Las grandes potencias celebran una cumbre de alto riesgo en Hamburgo
El autoaislamiento estadounidense y las protestas amenazan la cumbre del G-20

Los dirigentes de los pa¨ªses m¨¢s industrializados, los llamados a decidir el rumbo del planeta aterrizan este jueves en Hamburgo para celebrar una cumbre que se prev¨¦ convulsa. Es la primera para Donald Trump y el presidente llega dispuesto a evidenciar el autoaislamiento estadounidense en al menos en dos de los asuntos sobre los que pivotar¨¢ el encuentro: cambio clim¨¢tico y libre comercio.
Al margen de asuntos m¨¢s o menos concretos, Hamburgo se convertir¨¢ en los pr¨®ximos dos d¨ªas en un escenario en el que los distintos actores ensayar¨¢n sus nuevos papeles en un orden mundial en profunda transformaci¨®n y en el que los liderazgos y alianzas labrados con mimo durante d¨¦cadas se diluyen como azucarillos.
La canciller Angela Merkel, anfitriona de la cumbre y l¨ªder de facto de una Europa en reconstrucci¨®n, ha trabajado durante meses para tejer un frente com¨²n que aglutine al menos al resto de participantes que reniegan del credo proteccionista trumpiano y del negacionismo clim¨¢tico. Merkel ha repetido en los ¨²ltimos d¨ªas que las negociaciones ser¨¢n ¡°dif¨ªciles¡± y que no est¨¢ dispuesta a camuflar las diferencias. Avanzar sin contar con Estados Unidos, pero sin quebrar a la vez la necesaria alianza trasatl¨¢ntica es uno de los retos a los que se enfrenta la canciller.
Otro, mucho m¨¢s tangible, es lograr que la cumbre de los altos mandatarios transcurra sin grandes altercados en la calle. Miles de activistas llegados de toda Europa se han dado cita en la ciudad hanse¨¢tica para protestar por lo que consideran un orden global injusto y para presionar por un cambio de las reglas del juego que reduzca la brecha entre ricos y pobres. Celebran estos d¨ªas como es ya tradicional una cumbre social alternativa, que corre paralela a la oficial. Se esperan adem¨¢s diversas acciones con las que los activistas tratar¨¢n de boicotear la cumbre y bloquear el puerto de Hamburgo. Los m¨¢s radicales est¨¢n convocados esta tarde a una marcha anticapitalista que se prev¨¦ violenta y que han bautizado ¡°bienvenidos al infierno¡±.
Los encuentros en los m¨¢rgenes de la cumbre ser¨¢n probablemente tanto o m¨¢s importantes que la cita oficial. Trump se sentar¨¢ cara a cara por vez primera con su hom¨®logo ruso, Vlad¨ªmir Putin, en una encuentro de alto riesgo diplom¨¢tico. Los servicios de inteligencia estadounidenses han acusado al Kremlin de maniobrar para lograr la victoria de Trump en las elecciones, mientras que el Congreso estadounidense se esfuerza por poner coto a la influencia de Rusia en la Casa Blanca.
Made in Germany
Hay tambi¨¦n cierta expectaci¨®n por ver c¨®mo se materializa el cuerpo a cuerpo entre Trump y la canciller Merkel. La falta de sinton¨ªa entre ambos l¨ªderes es notoria, como qued¨® de relieve en la pasada cumbre de Taormina y en las posteriores declaraciones de la l¨ªder alemana, quien sostiene que Europa ya no puede contar con Estados Unidos como lo hab¨ªa hecho hasta ahora.
Washington acusa a Berl¨ªn de inundar su mercado con productos Made in Germany. Una queja similar marca las relaciones estadounidenses con China, otro pa¨ªs con un importante super¨¢vit comercial, pero con el que ahora EE UU se ve obligado a tender puentes para tratar de frenar la escalada norcoreana. La pelea estadounidense por redefinir las reglas del comercio mundial e instaurar un proteccionismo de nuevo cu?o en aras del America First ser¨¢ uno de los puntos de fricci¨®n durante la cumbre de Hamburgo, seg¨²n fuentes pr¨®ximas a la negociaci¨®n.
Otro encuentro muy esperado es el previsto entre Trump y el presidente mexicano, Enrique Pe?a Nieto, marcado por la tensi¨®n debido al muro fronterizo entre ambos pa¨ªses, en el que sin embargo no se prev¨¦ que se produzcan avances significativos.?
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