Trump impulsa una ley para reducir la inmigraci¨®n legal hasta la mitad

En el centro del discurso migratorio de Donald Trump siempre han estado los extranjeros que entraban a Estados Unidos de forma irregular, pero el mensaje madre, ¡°Am¨¦rica, primero¡±, apuntaba desde el principio a una cuesti¨®n m¨¢s de fondo. El presidente lo hizo evidente este mi¨¦rcoles en la Casa Blanca al presentar y apadrinar una propuesta legislativa que podr¨ªa reducir la inmigraci¨®n legal hasta un 50% al primar las habilidades y el conocimiento del ingl¨¦s frente al parentesco como criterio de acogida.

El proyecto de ley ha sido elaborado por dos senadores republicanos, David Perdue, de Georgia, y Tom Cotton, de Arkansas, que acompa?aban a Trump en la presentaci¨®n y han encontrado en el presidente a su principal aliado. En la primera versi¨®n que elaboraron, presentada en abril, calculaban que la adjudicaci¨®n de green cards o permisos temporales de residencia que Estados Unidos concede, en torno a un mill¨®n por a?o, bajar¨ªa hasta un 50% a lo largo de una d¨¦cada.Hablar bien ingl¨¦s, tener una alta cualificaci¨®n profesional y contar con una oferta de trabajo bien pagada o un proyecto empresarial propio ser¨¢n los principales requisitos para lograr un permiso de residencia o trabajo, frente al criterio de parentesco con alg¨²n residente legal en el pa¨ªs, que hoy es la principal v¨ªa de entrada a Estados Unidos

Ese es el punto que quema a Trump y a los cr¨ªticos con el actual modelo migratorio de Estados Unidos, una se?a de identidad de la mayor potencia econ¨®mica del mundo. Si el trumpismo ha identificado la inmigraci¨®n ilegal como fuente de peligro y criminalidad, los recelos de los estadounidenses hacia los extranjeros que han cumplido con la ley se basa en un razonamiento econ¨®mico. Seg¨²n la Casa Blanca, solo 1 de cada 15 inmigrantes llega por sus altas cualidades profesionales y la mayor¨ªa son personas de baja cualificaci¨®n que presionan a la baja los salarios. Este mensaje, como ocurre con el de la fuga de f¨¢bricas a pa¨ªses de mano de obra m¨¢s barata, cal¨® y cala en la sociedad estadounidense, que identifica a otro responsable de la erosi¨®n de la clase media americana.

La Administraci¨®n a?ade el componente de los contribuyentes: como son trabajadores m¨¢s humildes, son los que m¨¢s se benefician de ayudas sociales.¡°Nuestro sistema migratorio no es justo¡±, critic¨® Trump durante la presentaci¨®n de la propuesta legislativa, la cual, dijo, ¡°representar¨ªa la mayor reforma de nuestro sistema migratorio en medio siglo¡±. ¡°Prevendr¨¢ a nuevos inmigrantes de obtener ayudas sociales y protege a los trabajadores estadounidenses de ser desplazados por extranjeros]¡±, insisti¨®.

Se llama Ley de Reforma de la Inmigraci¨®n Estadounidense para un Empleo Fuerte (cuyo acr¨®nimo en ingl¨¦s forma la palabra raise, incrementar) y contempla medidas duras. Se reducir¨ªa el n¨²mero de green cards (residencia temporal) a personas por motivo de parentesco o reagrupaci¨®n familiar, limit¨¢ndose solo a c¨®nyuges e hijos menores de edad, adem¨¢s de ancianos dependientes, cuando ahora las personas con ciudadan¨ªa estadounidense o residencia permanente pueden patrocinar a varios tipos de parientes. Adem¨¢s, elimina el sistema de loter¨ªa, que suele otorgar unos 50.000 permisos de este tipo a ciudadanos de pa¨ªses con bajos niveles de inmigraci¨®n.

La ley, en resumen, ¡°da prioridad a los solicitantes que hablen ingl¨¦s, puedan mantenerse financieramente a ellos mismos y a sus familias, y contribuyan a nuestra econom¨ªa¡±, un sistema basado en m¨¦ritos que, seg¨²n argumenta la Casa Blanca, se aplica tambi¨¦n en Australia y Canad¨¢.

Contradicciones

La propuesta de estos senadores hab¨ªa pasado sin pena ni gloria por la C¨¢mara, pero el presidente le acaba de dar un fuerte espaldarazo. La semana pasada, de hecho, Trump confirm¨® que su equipo estaba involucrado en la elaboraci¨®n de esta nueva propuesta reci¨¦n presentada que, aun as¨ª, afronta m¨²ltiples dificultades para ser aprobada.

El gesto refuerza el giro hacia una pol¨ªtica migratoria m¨¢s dura. El pasado junio Trump logr¨® una peque?a victoria cuando el Supremo permiti¨® aplicar provisionalmente el n¨²cleo de su pol¨¦mico veto migratorio a todos los ciudadanos de Ir¨¢n, Libia, Somalia, Siria, Sud¨¢n y Yemen que no tengan un v¨ªnculo fiable con ¡°una persona o entidad de EE UU¡±.

La medida es pura contradicci¨®n con el Trump empresario, que emplea a un gran n¨²mero de inmigrantes en trabajos de baja cualificaci¨®n. Adem¨¢s, rompe la idea a la que se acog¨ªa durante la campa?a de que s¨ª apoyaba la inmigraci¨®n, pero de forma legal.