¡°Trump se comprometi¨® con los ¡®dreamers¡¯ pero minti¨®¡±
El presidente de la C¨¢mara de Comercio Hispana en Estados Unidos, Javier Palomarez, explica por qu¨¦ ha dimitido del Comit¨¦ de Diversidad que asesora al presdiente
Los desacuerdos de Javier Palomarez, presidente de la C¨¢mara de Comercio Hispana en Estados Unidos, con la Administraci¨®n de Donald Trump eran manifiestos desde hace tiempo. Pero el cese del DACA (siglas en ingl¨¦s del programa de Barack Obama que evitaba la deportaci¨®n de 800.000 j¨®venes que entraron en el pa¨ªs de forma ilegal hace una d¨¦cada, siendo ni?os) le puso en un punto de no retorno. Este martes, nada m¨¢s conocerse la noticia, Palomarez dimiti¨® del Consejo de Diversidad que asesora al presidente. As¨ª explicaba por qu¨¦ el golpe a los dreamers (so?adores, en ingl¨¦s) ha sido definitivo.
Pregunta. ?Por qu¨¦ deja el Consejo?
Respuesta. El Consejo trata asuntos muy distintos pero yo siempre dije, y sigo diciendo, que los j¨®venes eran la preocupaci¨®n principal. Cuando vi claramente que el Consejo no se le escuchaba decid¨ª que lo ¨²nico que pod¨ªa hacer era dejarlo. Tampoco nos hab¨ªamos reunido nunca f¨ªsicamente, ni ten¨ªamos una agenda, pero eso no me importaba porque ten¨ªamos contacto directo con la Casa Blanca, hoy mismo [por el martes] lo he tenido... Seguiremos trabajando con ellos, en la reforma fiscal y otros temas, pero mi tiempo en ese Consejo ha terminado.
P. Pero usted se hab¨ªa mantenido en ¨¦l, pese a las muchas discrepancias que ya hab¨ªa manifestado, hasta ahora. ?Por qu¨¦ es este el detonante final?
R. Yo me compromet¨ª a seguir para opinar sobre asuntos que afectaban a las peque?as y medianas empresas y a las mujeres en el mundo de los negocios. Uno de los asuntos por los que particularmente segu¨ªa era mi temor respecto a estos 800.000 j¨®venes a los que trajeron a este pa¨ªs sin preguntarles y que llegaron a una edad media de seis a?os. Estos dreamers, para beneficiarse del programa, pasaron muchos controles, ninguno de ellos ten¨ªa delitos, deb¨ªan estar estudiando y graduados. Est¨¢n trabajando, estudiando y contribuyendo, que es lo que necesitamos en Estados Unidos. Este presidente se comprometi¨® a cuidar de ellos, a tratarlos con coraz¨®n, hace solo cuatro meses. Ahora resulta que minti¨® a todos sobre este tema. Desde un punto de vista econ¨®mico tampoco tiene sentido porque los dreamers no solo no pueden recibir ning¨²n subsidio, y por tanto no cuestan ning¨²n dinero al contribuyente, sino que de hecho pagan impuestos locales y estatales. Deportarles costar¨ªa 60.000 millones... Da igual por d¨®nde lo mires, no tiene sentido.
"Charlottesville es un ejemplo de esos momentos que definen una presidencia"
P. ?Y por qu¨¦ cree que Trump lo ha hecho?
R. Se reduce a la promesa electoral rid¨ªcula que hizo y no entiende el efecto que tiene en los estadounidenses, 2.000 millones en impuestos que dejar¨¢n de pagar¡ Imag¨ªnese qu¨¦ pasa si dentro de seis meses [cuando se acaba la moratoria que ha permitido Trump antes del fin efectivo del programa] llaman de madrugada a casa de alguien a llevarse a su hijo, habr¨¢ peleas, ser¨¢ horrendo. Este presidente ha demostrado de nuevo que el negocio ha cedido su puesto a la intolerancia. Ha creado un ambiente deplorable y ahora la naci¨®n tendr¨¢ que lidiar con ello.
P.? ?Fueron los incidentes racistas de Charlottesville -cuando Trump se mostr¨® equidistante entre las marchas nazis y las protestas antirracistas- un punto de inflexi¨®n para los hispanos?
R. Lo fue para todo el pa¨ªs. Charlottesville es un ejemplo de esos momentos que definen una presidencia y a un presidente. No puede haber ambig¨¹edad en lo que a autoridad moral se refiere y ¨¦l fall¨®.
P. ?Cree que el presidente es racista?
R. No s¨¦ si lo es, pero actu¨® como tal. Perdi¨® la oportunidad de denunciar el racismo, el nazismo y el antisemitismo. Para m¨ª es racista. ?l dice que no lo es. Veremos.
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