?Abec¨¦ o #Abec¨¦? Qu¨¦ significa saber leer y escribir en la era digital
Las tecnolog¨ªas de comunicaci¨®n e informaci¨®n pueden impulsar la alfabetizaci¨®n, pero es necesario superar la brecha de acceso que a¨²n existe
El 8 de septiembre de 1967 se celebr¨® el primer D¨ªa Internacional de la Alfabetizaci¨®n. Para entonces, estar alfabetizado implicaba saber leer, escribir y tener una competencia aritm¨¦tica b¨¢sica. No exist¨ªan los celulares, ni las computadoras personales y no hab¨ªan nacido a¨²n los creadores de las redes sociales.
Medio siglo despu¨¦s, seguramente usted est¨¢ leyendo esto desde la pantalla de su celular, una computadora o una tableta y esta es quiz¨¢ la mejor imagen para ilustrar que estar alfabetizado implica, por supuesto, saber leer, escribir, sumar, restar, multiplicar, dividir, pero que hay m¨¢s: involucra seguir el ¡°dictado¡± de sociedades cada vez m¨¢s digitalizadas.
Con esta premisa, y la convicci¨®n de la que las plataformas digitales han ayudado y pueden seguir ayudando a la educaci¨®n de las personas, la UNESCO celebra hoy el D¨ªa Internacional de la Alfabetizaci¨®n planteando una reflexi¨®n amplia sobre la ense?anza en un mundo digital.
Los avances en la era digital han transformado la vida de millones de personas: las tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n han conectado a aquellos que, de no ser por ellas, dif¨ªcilmente se habr¨ªan vinculado; han ayudado a que en segundos tengamos informaci¨®n por la que antes deb¨ªamos esperar mucho tiempo; han hecho posible que se ahorren horas y horas de espera para hacer tr¨¢mites o transacciones y que, incluso, se pueda activar el lavarropas desde la oficina.
Alfabetizar en un mundo digitalizado
Muchas de estas transformaciones no son exclusivas de pa¨ªses desarrollados. El Informe de Desarrollo del Mundial 2016, del Banco Mundial, se?ala que en los pa¨ªses en desarrollo, por ejemplo, son m¨¢s los hogares que poseen un tel¨¦fono m¨®vil que los que tienen acceso a agua limpia. ¡°El total de usuarios de Internet se ha triplicado con creces en una d¨¦cada, de 1,000 millones en 2005 a una cifra estimada de 3,200 millones a fines de 2015. Esto significa que las empresas, las personas y los gobiernos est¨¢n m¨¢s conectados que nunca¡±, apunta el estudio.
Para 2016, el 65% de la poblaci¨®n mundial ten¨ªa acceso a un celular, seg¨²n un reporte de la Consultora GSM Asociation. De acuerdo con cifras de ese mismo informe, para 2015, en Am¨¦rica Latina, 441 millones de personas (el 70% de la poblaci¨®n) contaba con un celular y m¨¢s de 300 millones de personas estaban suscritas a servicios de internet m¨®vil.
Sin embargo, las ventajas de vivir en la era digital, no son para todos. El reporte del Banco Mundial hace ¨¦nfasis en la brecha digital que existe: ¡°Internet ha crecido r¨¢pidamente, pero su acceso no es en ning¨²n caso universal. Por cada persona que tiene conexi¨®n de banda ancha de alta velocidad, cinco no la tienen. Unos 4.000 millones de personas, casi la mitad de la poblaci¨®n mundial, no tienen acceso a Internet; cerca de 2.000 millones a¨²n no usan un tel¨¦fono celular y casi 500 millones viven en zonas donde no hay se?al de telefon¨ªa m¨®vil¡±.
Entonces, el debate no es s¨®lo sobre qu¨¦ significa estar alfabetizado hoy, sino c¨®mo las nuevas tecnolog¨ªas pueden colaborar en el proceso de alfabetizaci¨®n y convertirse en c¨®mplices de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en materia de educaci¨®n y, m¨¢s a¨²n, ?c¨®mo sustituir la brecha digital por una oportunidad digital que merme las desigualdades y nos ayude a avanzar a sociedades m¨¢s alfabetizadas?
¡°Estas nuevas tecnolog¨ªas brindan nuevas y amplias oportunidades para mejorar nuestra vida y conectarnos a escala mundial, pero tambi¨¦n pueden marginar a quienes carecen de las competencias esenciales, como la alfabetizaci¨®n, que se precisan para utilizarlas¡±, afirma Irina Bokova, directora general de UNESCO en su mensaje con motivo de este d¨ªa.
?A qui¨¦nes se refiere Bokova?
A los que han podido ir a la escuela, que usan internet durante varias horas al d¨ªa, quiz¨¢s les cueste creer que Bokova est¨¢ hablando de 758 millones de adultos en el mundo que a¨²n no saben leer y escribir. Y no se trata s¨®lo de adultos y personas de la tercera edad que no tuvieron acceso a la educaci¨®n primaria. Tambi¨¦n existen 263 millones de ni?os en edad de cursar la ense?anza primaria y secundaria que no est¨¢n recibiendo educaci¨®n escolar. Asimismo, se refiere a unos 102 millones de j¨®venes, entre 15 y 24 a?os de edad, de los cuales casi el 60% son mujeres, seg¨²n cifras del Instituto de Estad¨ªstica de UNESCO.
Las cifras en Am¨¦rica Latina son optimistas. La base de datos del Banco Mundial se?ala que entre la poblaci¨®n que tiene entre 15 y 24 a?os, s¨®lo 2% no est¨¢ alfabetizado y que el 92% de la poblaci¨®n mayor de 15 a?os puede leer y escribir ?Qu¨¦ podr¨ªa ayudar al 8% restante? ?Qu¨¦ podr¨ªa ayudar a los pa¨ªses que tiene cifras m¨¢s cr¨ªticas?
Las tecnolog¨ªas de la informaci¨®n y comunicaci¨®n (desde las redes sociales hasta los juegos) pueden ponerse al servicio de la alfabetizaci¨®n. Seg¨²n Bokova, las herramientas digitales pueden contribuir a ampliar el acceso al aprendizaje y mejorar su calidad. Tienen el poder de mejorar el seguimiento de los progresos en materia de alfabetizaci¨®n, de facilitar la evaluaci¨®n de las competencias y de aumentar la eficiencia de la gesti¨®n y la gobernanza de los sistemas de ense?anza de competencias.
El Banco Mundial apoya con prestar asistencia y asesoramiento t¨¦cnico a los pa¨ªses para ayudarlos a planificar, implementar, monitorear y evaluar sus esfuerzos para introducir y mantener el uso de la tecnolog¨ªa en la educaci¨®n. Al mismo tiempo, est¨¢ trabajando en investigar y documentar las experiencias que funcionan y las que no, pues la falta de evidencia rigurosa complica los intentos para elaborar pol¨ªticas eficaces de educaci¨®n mediante nuevas tecnolog¨ªas de la comunicaci¨®n y la informaci¨®n.
Los expertos insisten en que la alfabetizaci¨®n es necesaria no s¨®lo en t¨¦rminos de comunicaci¨®n b¨¢sica, sino tambi¨¦n para que las personas adquieran m¨¢s competencias y as¨ª puedan servirse del potencial de las nuevas tecnolog¨ªas para prosperar y tener m¨¢s oportunidades laborales en un futuro donde las habilidades tecnol¨®gicas ser¨¢n cada vez m¨¢s demandas.
Marjorie Delgado es productora online del Banco Mundial.
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