May nombra a un nuevo ministro de Defensa entre cr¨ªticas de sus diputados
Gavin Williamson, ex jefe de disciplina del Partido Conservador, sustituye a Michael Fallon, que dimiti¨® envuelto en el esc¨¢ndalo de acosos sexuales en Westminster
Gavin Williamson, de 41 a?os, jefe de disciplina del grupo conservador en el Parlamento brit¨¢nico desde el a?o pasado, ha sido ascendido a ministro de Defensa tras la dimisi¨®n este mi¨¦rcoles de Michael Fallon, envuelto en el esc¨¢ndalo de acosos sexuales en Westminster. Williamson, que tiene en su oficina una tar¨¢ntula llamada Cronus como mascota, forma parte del c¨ªrculo m¨¢s cercano de Theresa May y fue clave en la firma del acuerdo con los unionistas norirlandeses que logr¨® mantener en el poder a la primera ministra tras perder la mayor¨ªa absoluta en junio.
El nombramiento ha suscitado cr¨ªticas en las filas tories, pues diversas fuentes aseguran que fue el propio Williamson quien aconsej¨® a May sobre la conveniencia de que dimitiera su predecesor, para contener el potencial destructor del esc¨¢ndalo que se ha apoderado esta semana del Parlamento brit¨¢nico. Numerosos diputados, amparados por el anonimato, han expresado su malestar en la prensa brit¨¢nica, y Downing Street se ha visto obligado a se?alar que Williamson no estuvo implicado en la remodelaci¨®n del Gobierno.
En la estela de las acusaciones de acoso sexual por parte del productor hollywoodiense Harvey Weinstein, han emergido numerosas acusaciones que afectan a destacados miembros del Partido Conservador. Una lista con 40 diputados tories acusados de conductas inapropiadas, en la mayor¨ªa de los casos sin verificar, circula desde el fin de semana por los pasillos de Westminster. Entre ellos se encuentran, adem¨¢s de Fallon, otros cinco miembros del Gobierno de May, incluido su n¨²mero dos de facto, Damian Green, que ha negado los hechos que se le atribuyen.
Fallon, uno de los tres ¨²nicos miembros del Gobierno que llevaban en su puesto desde 2014, admiti¨® que hace quince a?os puso la mano en la pierna de una periodista sin su consentimiento durante una cena. ¡°He estado por debajo de los est¨¢ndares altos que requerimos de las fuerzas armadas a las que tengo el honor de representar¡±, reconoci¨® el ya exministro de Defensa, tras convertirse en la primera v¨ªctima pol¨ªtica de un esc¨¢ndalo que tambi¨¦n ha salpicado al Partido Laborista. Una militante de la formaci¨®n opositora ha asegurado que fue violada en un acto del partido en 2011, y que un alto cargo del mismo le recomend¨® que no lo hiciera p¨²blico por el bien de su carrera.
Este mi¨¦rcoles, en la sesi¨®n semanal de preguntas a la primera ministra en el Parlamento, Theresa May convoc¨® a los l¨ªderes de los dem¨¢s partidos para debatir la forma de reaccionar al esc¨¢ndalo. La primera ministra se ha comprometido tambi¨¦n a dise?ar un sistema de quejas que permita a aquellos que trabajan al servicio de los diputados denunciar m¨¢s eficazmente los comportamientos inapropiados.
Downing Street conf¨ªa en que el relevo en el ministerio de Defensa evite una crisis de Gobierno mayor que desestabilice a¨²n m¨¢s su precaria situaci¨®n. Pero, en un nueva muestra de la debilidad de la primera ministra, numerosos diputados se han atrevido a cuestionar la mete¨®rica promoci¨®n de una persona tan joven y sin experiencia ministerial.
Se trata, adem¨¢s, de un momento en que el puesto que abandona Willimson, el de encargado de la disciplina de voto en el partido, es absolutamente clave, dadas la exigua mayor¨ªa de que dispone el Partido Conservador y la colosal y delicad¨ªsima labor legislativa que requerir¨¢ el Brexit. El cargo que deja el ahora ministro lo ocupar¨¢ quien ha sido hasta ahora su segundo, Julian Smith.
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