Una periodista acusa al senador dem¨®crata Al Franken de besarla y tocarla sin su consentimiento

La oleada de acusaciones de acoso sexual contra personalidades sigue creciendo en Estados Unidos. La periodista y modelo Leeann Tweeden asegur¨® este jueves que en 2006 el senador dem¨®crata Al Franken la ¡°bes¨® forzosamente¡± y agarr¨® sus pechos sin su consentimiento mientras ella dorm¨ªa y ¨¦l posaba para una fotograf¨ªa. El legislador, que entonces era un c¨®mico y locutor fuera de la pol¨ªtica, se ha disculpado p¨²blicamente y ha pedido que se le abra una investigaci¨®n ¨¦tica, pero la denuncia cuestiona gravemente su altura moral y amenaza con hundirle pol¨ªticamente.

Tweeden?explic¨® que ha decidido contar ahora su historia porque puede que haya otros casos, asegur¨® que todav¨ªa se siente ¡°enfadada¡± y lament¨® no haber denunciado enfrente de Franken su conducta. Pero, en una entrevista en la cadena CNN, dijo aceptar las disculpas del senador y se?al¨® que el objetivo era alentar a otras personas a denunciar y contribuir al debate nacional sobre el acoso.

El caso se conoce a los dos d¨ªas de que el Congreso admitiera que el acoso sexual es un problema muy presente entre los legisladores y decidiera impulsar una formaci¨®n obligatoria contra el acoso y la discriminaci¨®n a todo su personal. Llega, adem¨¢s, en plena pol¨¦mica en el Partido Republicano por las acusaciones sexuales contra Roy Moore, aspirante a senador por Alabama, en los a?os setenta.

La denuncia contra el dem¨®crata Franken, que es senador por Minnesota desde 2009, tiene su origen en una gira en diciembre de 2006 de una organizaci¨®n ben¨¦fica militar que inclu¨ªa visitas a soldados y en la que ¨¦l particip¨® junto a Tweeden. La modelo asegura que Franken escribi¨® un gui¨®n de su actuaci¨®n sat¨ªrica en que ¨¦l la besaba y explica que ella ten¨ªa previsto girar su rostro en el ¨²ltimo momento para evitar el beso. El c¨®mico insisti¨® en que practicaran la escena antes de la actuaci¨®n, pero ella se resisti¨®.

Finalmente, acept¨®. ¡°Hicimos el segmento que llevaba al beso y luego ¨¦l se acerc¨®, puso su mano detr¨¢s de mi cabeza, apret¨® sus labios con los m¨ªos y de forma agresiva meti¨® su lengua dentro de mi boca¡±, escribi¨® Tweeden en un art¨ªculo para la KABC, la radio de Los ?ngeles en la que trabaja. ¡°Me sent¨ª disgustada y transgredida¡±.

Hay otra escena. Al final de las dos semanas de gira, en la antesala de Navidad, los integrantes volaron a bordo de un avi¨®n militar desde Afganist¨¢n rumbo a Los ?ngeles. Tweeden explica que estaba agotada y que se durmi¨® al instante. Cuando estaba de vuelta en EE UU, descubri¨® at¨®nita una fotograf¨ªa en el CD de im¨¢genes de la gira que les hab¨ªa dado el fot¨®grafo: en ella aparece Franken, con una media sonrisa, agarrando con sus dos manos los pechos de Tweeden mientras ella duerme en uno de los asientos del avi¨®n.

En su art¨ªculo, Tweeden incluye esa fotograf¨ªa. ¡°Sab¨ªas exactamente lo que estabas haciendo¡±, escribe. ¡°Me besaste forzosamente sin mi consentimiento, agarraste mis pechos mientras yo dorm¨ªa e hiciste que otra persona tomara una fotograf¨ªa de ti haci¨¦ndolo sabiendo que yo la ver¨ªa despu¨¦s y me avergonzar¨ªa¡±, a?ade.

Tras difundirse las acusaciones, el senador emiti¨® un breve comunicado de disculpas. ¡°Ciertamente no recuerdo el ensayo de la escena de la misma manera, pero le mando mis m¨¢s sinceras disculpas a Leeann¡±, dice. ¡°En cuanto a la foto, estaba claramente intencionada para ser divertida pero no lo fue. No deber¨ªa haberlo hecho¡±.

Poco despu¨¦s, difundi¨® una segunda nota mucho m¨¢s extensa en que pidi¨® que se le investigue y prometi¨® cooperar. ¡°Respecto a las mujeres. No respeto a los hombres que no lo hacen. Y el hecho de que mis propias acciones han dado a la gente una buena raz¨®n para dudar me hace sentir avergonzado¡±, dijo. Se present¨® como un ¡°aliado¡± de las mujeres que dan el paso y denuncian un acoso sexual y se?al¨® que si les ¡°ha fallado¡± promete revertirlo.