Familiares de los tripulantes del submarino argentino: ¡°Van a volver¡±

"Van a volver, seguro. Hay que tener fe, van a volver", dijo hoy la hermana del suboficial Celso ?scar Vallejos frente a las puertas de la base militar de Mar del Plata. Malvina Vallejos colg¨® en la valla un cartel con fotograf¨ªas de su hermano y el mensaje: "Tu familia te espera. Te amamos y te extra?amos". En el interior de este complejo militar se concentran m¨¢s de 200 familiares de los 44 tripulantes del submarino argentino ARA San Juan, en paradero desconocido desde el pasado mi¨¦rcoles. "No perdemos la esperanza. Yo s¨¦ que van a volver porque son personal especializado, est¨¢n muy preparados, saben lo que es la supervivencia", declar¨® a la prensa Luisa, la madre de Ricardo Alfaro, frente a una imagen de su hijo.

Fueron la excepci¨®n. La mayor¨ªa de familiares opt¨® por recluirse este martes dentro de la base y se disculparon por no atender las llamadas telef¨®nicas de los medios debido a la falta de fuerzas. "Hay momentos en que quiero no estar viva. Ya se me pasar¨¢", respondi¨® por whatsapp la madre de uno de los marinos. A la distancia, se vi¨® a otra fundirse en abrazos y l¨¢grimas con otros familiares. Contenidos por psic¨®logos y psiquiatras, intentan no caer en la desesperaci¨®n mientras siguen minuto a minuto el operativo de b¨²squeda.

Las vallas del apostadero naval al que tendr¨ªa que haber llegado el ARA San Juan el pasado domingo est¨¢n llenas de mensajes de aliento. "Los vamos a encontrar". "Fuerza para las 44 familias". "Los estamos esperando", puede leerse sobre banderas argentinas, camisetas de la selecci¨®n, cartones y papeles. El fuerte viento arrastra algunos de estos ¨²ltimos lejos de all¨ª, hasta el mar hacia el que todos miran en busca de se?ales.

Muestras de solidaridad

El peregrinaje de vecinos y turistas hasta la sede marplatense de la Armada es un goteo incesante. Los m¨¢s creyentes dejan rosarios, velas, oraciones y estampitas de la Virgen, de santos y del papa Francisco. Organizan tambi¨¦n cadenas de oraci¨®n, entrelazando sus manos, para pedir a Dios que los traiga de vuelta. Los coches aminoran el paso y algunos hacen sonar repetidamente la bocina al pasar por delante. Todos intentan aliviar la angustiosa espera de los allegados de los 44 marinos.

"Yo no soy familiar, pero esto me toca de cerca, paso todos los d¨ªas por ac¨¢, soy jardinero en esta zona", dice Gustavo de Simone, tras estampar palabras de aliento sobre una camiseta y colgarla en la verja. "Yo miro el mar todo el tiempo y ahora cada vez pienso en ellos, los tienen que encontrar", suplica. Cerca de su mensaje, la Armada ha realizado un emotivo mural con una docena de dibujos de una escuela primaria. Sobre los submarinos, ni?os de entre seis y ocho a?os han volcado por escrito sus esperanzas: "Queremos que est¨¦n vivos", "regresen pronto", "queremos que vuelvan".

Adriana y Horacio son de Tucum¨¢n, una provincia del norte de Argentina a la que pertenecen al menos dos de los marinos del ARA San Juan, el capit¨¢n Pedro Mart¨ªn Fern¨¢ndez, de 45 a?os, y el cabo Luis Esteban Garc¨ªa, de 31. "Nosotros tambi¨¦n tenemos hijos y pensamos en esos padres, lo que est¨¢n sufriendo", dice, muy emocionada, Adriana. De vacaciones en Mar del Plata, esta pareja decidi¨® acercarse hasta la base naval para dejar una carta de aliento a los familiares y rezar por los desaparecidos.

La interrupci¨®n de las comunicaciones con el submarino ha tenido un gran impacto en esta ciudad, uno de los destinos tur¨ªsticos m¨¢s populares de los argentinos, situada 400 kil¨®metros al sur de Buenos Aires. El Festival Internacional de Cine de Mar del Plata ha suspendido los festejos y actividades musicales previstas en solidaridad con los familiares y allegados del ARA San Juan y el Ayuntamiento ha decidido postergar hasta el 12 de diciembre el lanzamiento de la temporada de verano. Todos contienen el aliento. Este mi¨¦rcoles se cumple una semana de la desaparici¨®n del submarino.