El misil lanzado por el r¨¦gimen norcoreano puede alcanzar cualquier punto de EE UU

Una sonora bofetada a sus rivales. Con la prueba de su misil intercontinental m¨¢s potente hasta el momento, un gigante que ha alcanzado un apogeo de 4.475 kil¨®metros, el l¨ªder norcoreano, Kim Jong-un, ha vuelto a desafiar a la comunidad internacional. Y ha dejado patente que el par¨®n de dos meses en sus lanzamientos no ten¨ªa como objetivo abrir la puerta a un di¨¢logo, sino ultimar los detalles t¨¦cnicos de un proyectil capaz ya de alcanzar cualquier punto de Estados Unidos. Un desaf¨ªo al que el presidente Donald Trump respondi¨®: ¡°Nos vamos a hacer cargo de esta situaci¨®n. Hoy se impondr¨¢n nuevas sanciones a Corea del Norte¡±.

El mandatario estadounidense se ha mostrado extra?amente circunspecto en este nuevo pulso nuclear. El martes, al conocer el lanzamiento del misil, apenas habl¨® y centro sus esfuerzos en llamar al presidente surcoreano, Moon Jae-in, y al primer ministro japon¨¦s, Shinzo Abe, para reafirmar su compromiso de combatir a Corea del Norte. Hoy dio un nuevo paso y despu¨¦s de consultar con el presidente chino, Xi Jinping, anunci¨® que las ¡°¨²ltimas acciones de provocaci¨®n¡± ser¨ªan convenientemente castigadas. "El presidente enfatiz¨® la necesidad de que China use todas sus palancas para convencer a Corea del Norte de que ponga fin a su provocaci¨®n y vuelva a la senda de la desnuclearizaci¨®n", indic¨® en un comunicado la Casa Blanca.

A la espera del Consejo de Seguridad de la ONU que se va a celebrar esta tarde, el Departamento de Estado dio una pista de cu¨¢l podr¨ªa ser esa sanci¨®n adicional: la prohibici¨®n del tr¨¢fico mar¨ªtimo de mercanc¨ªas con Corea del Norte. Alej¨¢ndose de los tambores de guerra que tanto gustan al presidente, el Departamento que dirige Rex Tillerson insisti¨® en que la ¡°opci¨®n diplom¨¢tica sigue de momento viable y abierta¡±. ¡°Estados Unidos mantiene su compromiso de hallar un camino pac¨ªfico a la desnuclearizaci¨®n y poner fin a las beligerantes acciones de Corea del Norte¡±, se?al¨®.

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El lanzamiento supone un mensaje para Estados Unidos, cuyo presidente,hab¨ªa lanzado un gui?o a la posibilidad de di¨¢logo durante su gira por Asia a comienzos de este mes, inmediatamente antes de recuperar su habitual ret¨®rica de amenazas y burlas al llamar ¡°bajo y gordo¡± a Kim Jong-un. ¡°Es un claro mensaje de desaf¨ªo¡±, ha declarado en Pek¨ªn Daniel Russel, antiguo secretario de Estado de EE. UU. para Asia en la Administraci¨®n de Barack Obama.

Pero tambi¨¦n representa una sonora bofetada para China, el tradicional aliado norcoreano que en los ¨²ltimos meses ha comenzado a apretar m¨¢s las tuercas al r¨¦gimen del ¡°Brillante Camarada¡±. Hace diez d¨ªas, Pek¨ªn despert¨® las esperanzas de que algo se pudiera estar moviendo al enviar, por primera vez en dos a?os, a un emisario de alto rango, Song Tao, enviado especial del presidente Xi Jinping, con el argumento oficial de explicar los resultados del reciente Congreso del Partido Comunista de China. La misi¨®n no tuvo ¨¦xito. Song regres¨® a Pek¨ªn sin llegar a ser recibido en ning¨²n momento por Kim Jong-un.

El l¨ªder supremo norcoreano firm¨® de su pu?o y letra la orden de lanzamiento, seg¨²n ha informado la agencia oficial de ese pa¨ªs, la KCNA, que public¨® im¨¢genes del mensaje manuscrito: ¡°?Por el Partido y la Patria!¡±, escribi¨® Kim.

Quiz¨¢, al elegir el momento para su demostraci¨®n de fuerza, pes¨® la reciente deserci¨®n de un soldado norcoreano, identificado como Oh, que de modo espectacular cruz¨® al otro lado de la frontera en la zona desmilitarizada entre ambos lados de la pen¨ªnsula bajo el fuego de sus hasta entonces camaradas. Sin duda, las revelaciones de que el joven de 24 a?os se hab¨ªa alimentado con granos crudos de ma¨ªz y ten¨ªa alojadas en el intestino lombrices que ya no se ven en el sur desde hace d¨¦cadas han resultado humillantes para un r¨¦gimen que se precia de privilegiar a sus tropas por encima de cualquier otra clase social.

El lapso de dos meses entre el lanzamiento previo y la prueba de este mi¨¦rcoles hab¨ªa suscitado conjeturas de que Corea del Norte pudiera estar refrenando su comportamiento para abrir la puerta a un di¨¢logo. Una hip¨®tesis que ha quedado descartada. Pero Russel rest¨® importancia al momento elegido para el nuevo disparo, el n¨²mero veinte en lo que va de a?o. Seg¨²n el antiguo alto funcionario, las fechas para este tipo de pruebas ¡°est¨¢n motivadas sobre todo por factores t¨¦cnicos, que el misil est¨¦ listo o no¡±.

Pero eso no quiere decir que la situaci¨®n haya quedado fundamentalmente alterada. En una nota, Scott Seaman, de la consultora ¡°Eurasia Group¡±, prev¨¦ que a lo largo de los pr¨®ximos meses ¡°Pek¨ªn, Se¨²l y Mosc¨² seguir¨¢n defendiendo que Washington y Pyongyang se esfuercen m¨¢s en reducir las tensiones mediante conversaciones directas¡±. En su opini¨®n, un acuerdo que implique la paralizaci¨®n norcoreana de sus pruebas nucleares y de misiles, a cambio de que Estados Unidos reduzca sus maniobras militares en la regi¨®n, ¡°seguir¨¢ siendo una opci¨®n prominente para reducir las tensiones y dar pie al comienzo de negociaciones¡±.

Pero, mientras tanto, nadie espera que Corea del Norte suspenda sus pruebas militares. Aunque, tras el ¨¦xito del lanzamiento de este mi¨¦rcoles, el r¨¦gimen se ha autoproclamado ¡°un Estado nuclear¡±, que ha logrado su objetivo de convertirse en ¡°una potencia de misiles¡±, los expertos resaltan que a¨²n no ha demostrado el dominio de algunos aspectos t¨¦cnicos imprescindibles.

Para ser fiable, un misil debe poder llegar al punto deseado sin desintegrarse al regresar a tierra debido al fuerte calor y la presi¨®n del roce de la atm¨®sfera. Seg¨²n Pyongyang, el misil del tipo Hwasong-15 alcanz¨® una altura de 4.475 kil¨®metros -mucho m¨¢s que la Estaci¨®n Espacial Internacional, a 240 kil¨®metros- y cay¨® en aguas controladas por Jap¨®n a 950 kil¨®metros del lugar desde donde fue disparado, ¡°en las afueras de Pyongyang¡± seg¨²n los medios oficiales norcoreanos. Su vuelo dur¨® unos 50 minutos. El misil intercontinental ¡°cuenta con una ojiva especialmente grande y capaz de atacar cualquier punto de Estados Unidos¡±, ha asegurado KCNA.

Los expertos apuntan que este cohete tiene un alcance de 13.000 kil¨®metros: suficiente, efectivamente, para llegar a cualquier ciudad del territorio continental estadounidense. La vieja ambici¨®n del r¨¦gimen norcoreano, que calcula que la posibilidad de recibir un ataque en su propio territorio disuadir¨¢ a Washington de cualquier acto abiertamente hostil contra Pyongyang.

¡°Si hubiera volado en una trayectoria est¨¢ndar, en lugar de esta trayectoria parab¨®lica, este misil hubiera tenido un alcance de m¨¢s de 13.000 kil¨®metros. Es significativamente m¨¢s que las pruebas norcoreanas previas de largo alcance, que volaron en trayectorias parab¨®licas durante 37 minutos (4 de julio) y 47 minutos (28 de julio). Un misil como este tendr¨ªa un alcance m¨¢s que suficiente para alcanzar Washington y, de hecho, cualquier parte de la masa continental estadounidense¡±, ha indicadoel especialista David Wright, de la Uni¨®n de Cient¨ªficos Preocupados, en el blogAll Things Nuclear.

Corea del Norte ya hab¨ªa asegurado este verano que su meta era lograr el "equilibrio" de fuerza con Estados Unidos. Su autoproclamaci¨®n de este mi¨¦rcoles como Estado nuclear parece apuntar que cree haberlo logrado, y que ahora siente que puede hablar de igual a igual con Washington.