La cumbre Xi-Kim abre una nueva fase de negociaci¨®n sobre Corea del Norte
El l¨ªder norcoreano se ha mostrado abierto a tratar sobre su programa nuclear, pero exigir¨¢ "medidas simult¨¢neas"
Los acontecimientos en torno a Corea se precipitan a velocidad vertiginosa. Este mi¨¦rcoles se confirmaba la reuni¨®n por sorpresa en Pek¨ªn entre Kim Jong-un y el presidente chino, Xi Jinping, en la que el l¨ªder norcoreano corrobor¨® personalmente sus planes para reunirse en las pr¨®ximas semanas con el surcoreano Moon Jae-in y con el estadounidense Donald Trump. Kim tambi¨¦n reiter¨® su disposici¨®n a tratar sobre desnuclearizaci¨®n. El tablero diplom¨¢tico se desplazar¨¢ este jueves ahora a la pen¨ªnsula coreana. Norte y Sur celebrar¨¢n una reuni¨®n preparatoria de alto nivel; un alto cargo diplom¨¢tico chino pondr¨¢ al d¨ªa a Se¨²l sobre los detalles de lo tratado en Pek¨ªn.
La visita de Kim, en otros tiempos, hubiera sido meramente protocolaria. Su padre, Kim Jong-il, acudi¨® a Pek¨ªn en las semanas previas a sus reuniones con dirigentes surcoreanos. Su hijo, pues, no hubiera hecho otra cosa que seguir la tradici¨®n.
Pero esta no era una visita cualquiera. Era la primera que Kim Jong-un hac¨ªa al exterior y su primera reuni¨®n con un l¨ªder extranjero en los seis a?os que lleva en el poder. Llegaba tras a?os de un deterioro sostenido de los lazos entre dos aliados que combatieron juntos en la guerra de Corea (1950-53), y en un momento estrat¨¦gico. China acaba de reforzar a su l¨ªder y quiere aumentar su protagonismo en el escenario mundial.
Ambos aliados sellaron su reconciliaci¨®n. Los dos pa¨ªses han prometido incrementar su cooperaci¨®n y elevar sus lazos ¡°a nuevos niveles¡±. Xi, seg¨²n la agencia oficial norcoreana KCNA, devolver¨¢ la visita y viajar¨¢ a Pyongyang ¡°en el momento m¨¢s conveniente¡±. ¡°Es innegable que la reuni¨®n ha abierto un nuevo cap¨ªtulo en las relaciones amistosas entre China y Corea del Norte¡±, se felicitaba el diario nacionalista ¡°Global Times¡± en un editorial.
Para Kim, el encuentro era doblemente importante. Este estreno internacional con su aliado tradicional le otorgaba credibilidad en el escenario mundial, antes de las cumbres. Adem¨¢s, necesitaba recuperar la fluidez en los lazos bilaterales. China representa el 90% del comercio exterior norcoreano pero, molesta por las pruebas nucleares y de misiles de su vecino, ha aplicado con inusitado rigor las sanciones internacionales contra Pyongyang. El ¡°Brillante Camarada¡± buscaba, a cambio de su deferencia -las im¨¢genes le muestran tomando notas diligentemente mientras habla Xi-, promesas de ayuda econ¨®mica, o de alivio de los embargos internacionales.
China tambi¨¦n obtiene beneficio. Esa normalizaci¨®n le devuelve al centro del tablero de juego en una partida donde parec¨ªa haber quedado arrinconada tras el acercamiento entre las dos Coreas a ra¨ªz de los Juegos Ol¨ªmpicos de Invierno el mes pasado. Deja claro que Pek¨ªn tiene mucho que decir a¨²n en un proceso que se anticipa complicado, prolijo y -potencialmente- hist¨®rico. Y lo hace justo a tiempo, antes de que los preparativos para las cumbres entren en una fase definitiva.
Una fase definitiva, y fren¨¦tica. Cada participante en esta delicada partida diplom¨¢tica empieza a ense?ar sus cartas. Mediante su v¨ªa favorita -los tuits- el presidente estadounidense, Donald Trump, ha aplaudido la reuni¨®n pero insiste en que ¡°?la m¨¢xima presi¨®n y las sanciones se mantienen!¡± a la espera de su propio encuentro con el l¨ªder norcoreano.
Kim, por su parte, ha tenido palabras optimistas sobre el fin de su programa nuclear, el objetivo declarado de los encuentros. ¡°La cuesti¨®n de la desnuclearizaci¨®n de la pen¨ªnsula coreana puede resolverse si Corea del Sur y Estados Unidos responden a nuestros esfuerzos con buena voluntad, crean una atm¨®sfera de paz y estabilidad y adoptan medidas progresivas y sincronizadas para conseguir la paz¡±, ha declarado.
Sus buenas palabras esconden una clave -¡°medidas progresivas y sincronizadas¡±- que apunta por d¨®nde pueden ir las conversaciones y qu¨¦ pedir¨¢ Pyongyang: probablemente, la marcha de las tropas estadounidenses destacadas en el Sur, un imposible para Washington y Se¨²l.
El Gobierno chino ha sido r¨¢pido en mover ficha. Tras concluir la visita, inform¨® de inmediato a la Casa Blanca y le transmiti¨® un mensaje personal de Kim, seg¨²n ha informado la portavoz de Trump, Sarah Huckabee Sanders. Yang Jiechi, el diplom¨¢tico de mayor rango en la jerarqu¨ªa china, viajar¨¢ este jueves a Se¨²l para informar de los resultados del encuentro y coordinar posiciones con las autoridades surcoreanas. Desde la capital del Sur, Yang podr¨¢ recibir tambi¨¦n informaci¨®n de primera mano sobre la reuni¨®n de las delegaciones de ambas mitades de la pen¨ªnsula para preparar la cumbre de abril.
¡°Pek¨ªn tiene intereses significativos y se juega mucho en los resultados de las pr¨®ximas cumbres, y no quer¨ªa ser un espectador en la banda mientras se desarrolla esta importante partida diplom¨¢tica¡±, apunta Paul Haenle, director del Centro Carnegie-Tsinghua para la Pol¨ªtica Global en Pek¨ªn. China ¡°tambi¨¦n puede haber querido enviar un mensaje a Washington, tras verse sorprendida por la decisi¨®n impulsiva de Trump de reunirse con Kim y estar molesta con las actuales investigaciones sobre comercio y gui?os a Taiw¨¢n por parte de Estados Unidos¡±, agrega.
En Se¨²l, el Gobierno surcoreano tambi¨¦n ha dado la bienvenida a la reuni¨®n en Pek¨ªn y ha expresado su esperanza en que sirva para ¡°la desnuclearizaci¨®n y el logro de la paz en la pen¨ªnsula coreana¡±.
El viaje se gest¨® en el mayor de los secretos. Seg¨²n KCNA comenz¨® el domingo y concluy¨® el mi¨¦rcoles (despu¨¦s de que la comitiva de Kim hubiera entrado de nuevo en territorio norcoreano). Un tren blindado, en colores verde y amarillo, cruzaba la frontera y llegaba a Pek¨ªn recibido con honores y rodeado de misterio. Sus ocupantes se alojaban en Diaoyutai, la residencia para hu¨¦spedes oficiales del Gobierno chino, y se desplazaban en una largu¨ªsima caravana de veh¨ªculos, incluida una ambulancia. Los rumores se dispararon. Pero solo este mi¨¦rcoles recibieron confirmaci¨®n oficial.
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