Los matrimonios homosexuales tendr¨¢n los mismos derechos de residencia en toda la UE

Los matrimonios homosexuales tendr¨¢n los mismos derechos de residencia en la UE que los heterosexuales, incluso en los pa¨ªses donde este tipo de uniones no sean legales. As¨ª lo ha dictaminado este martes el Tribunal de Justicia de la UE. La decisi¨®n de los magistrados permitir¨¢ a las parejas gais en las que uno de los c¨®nyuges es extracomunitario, mudarse a otro pa¨ªs de los Veintiocho sin restricciones, como ya pueden hacer los matrimonios entre hombre y mujer. "Aunque los Estados miembros tienen libertad para autorizar o no el matrimonio homosexual, no pueden obstaculizar la libertad de residencia de un ciudadano de la Uni¨®n denegando a su c¨®nyuge del mismo sexo, extracomunitario, la concesi¨®n un derecho de residencia", ha concluido la Corte.

La sentencia es una victoria para los defensores de los derechos de los homosexuales frente a los gobiernos m¨¢s conservadores del continente. El caso tiene su origen en una denuncia presentada por el rumano Adrian Coman y su esposo, el estadounidense Claibourn Hamilton, ambos de 46 a?os. Iniciaron su relaci¨®n en 2002 tras conocerse por Internet, y dado que por aquel entonces estaba prohibido en Estados Unidos, se casaron en Bruselas en 2010, donde Coman, experto en derechos humanos, trabajaba en el Parlamento Europeo. Dos a?os despu¨¦s de la boda pidieron a Ruman¨ªa permiso de residencia para Hamilton con la intenci¨®n de trasladarse juntos, pero Bucarest rechaz¨® su solicitud alegando que como no reconoce las uniones homosexuales, un extracomunitario como Hamilton no pod¨ªa obtener la residencia al no ser considerado c¨®nyuge. Sin dicho permiso, los ciudadanos de fuera de la UE no pueden permanecer m¨¢s de tres meses en los Veintiocho.

La pareja denunci¨® ante los tribunales lo que estimaron una discriminaci¨®n frente a los matrimonios heterosexuales al no disfrutar del mismo derecho a la libre circulaci¨®n en la UE. Aunque finalmente decidieron irse a vivir a Nueva York, mantuvieron el proceso judicial abierto para que otros en su situaci¨®n no tuvieran que enfrentarse a la misma negativa en el futuro. "Ten¨ªamos que acabar con esto ahora. No solo por nosotros, sino por otros que no disponen de nuestros recursos", afirm¨® Coman en una entrevista a este diario.

Esa insistencia ha tenido r¨¦ditos cinco a?os despu¨¦s. En 2016, el Tribunal Constitucional rumano remiti¨® el asunto a los jueces comunitarios, que hoy se han pronunciado a su favor dejando claro que, a efectos legales, el t¨¦rmino c¨®nyuge tambi¨¦n incluye a los del mismo sexo. Ambos han recibido la noticia este martes en Bucarest, donde se trasladaron para seguir el desenlace del caso y dirigirse a los medios de comunicaci¨®n. "Por fin somos una familia. Estaba nervioso pero optimista. ?Vivimos en 2018!", ha afirmado Coman a este diario minutos despu¨¦s de la sentencia, de cuya resoluci¨®n se ha enterado a trav¨¦s de Twitter. Los d¨ªas previos los pasaron juntos en un congreso en defensa de los derechos de los homosexuales en Botsuana. Su batalla judicial les ha convertido en s¨ªmbolos del combate global por la igualdad, y a menudo son invitados a participar en eventos organizados por activistas proderechos.

El fallo es un varapalo para Ruman¨ªa. Pero tambi¨¦n afecta a todos aquellos pa¨ªses comunitarios en los que el matrimonio homosexual no es legal. Durante la audiencia en la Corte de Luxemburgo, Hungr¨ªa, Polonia, Letonia y la propia Ruman¨ªa defendieron que es competencia de los Estados decidir al respecto. Los jueces no han avalado esa tesis. A partir de ahora, si un ciudadano europeo se casa con alguien de fuera de la UE, tiene derecho a que su pareja se mude con ¨¦l o ella a cualquiera de los Veintiocho Estados miembros, independientemente de que la ley del pa¨ªs reconozca o no el matrimonio homosexual.

La decisi¨®n aumenta tambi¨¦n la brecha que separa a Bruselas de determinados pa¨ªses del Centro y el Este, recelosos de que la UE intervenga en asuntos que consideran de ¨ªndole dom¨¦stica. 22 de los 28 estados de la UE contemplan el matrimonio homosexual o alguna forma de uni¨®n civil de este tipo en sus leyes. Solo Eslovaquia, Letonia, Lituania, Ruman¨ªa, Bulgaria y Polonia lo proh¨ªben o no lo aceptan.

Las resistencias a una mayor apertura siguen existiendo en amplios sectores sociales de estos pa¨ªses. La Coalici¨®n por la Familia, una organizaci¨®n civil asentada en Ruman¨ªa, recolect¨® en 2016 tres millones de firmas a favor de modificar la definici¨®n de matrimonio en la Constituci¨®n para limitarla a la uni¨®n entre un hombre y una mujer frente a la expresi¨®n actual de "c¨®nyuges que dan su consentimiento". Los partidarios del cambio constitucional llevan tiempo reclamando la celebraci¨®n de una consulta al respecto, pero el retraso por parte del parlamento en aprobar una ley sobre refer¨¦ndums ha dejado por ahora paralizada la votaci¨®n.