P¨¦kerman, Cambiasso, James y 34 toques de bal¨®n
El seleccionador de Colombia recurre a un viejo conocido para fortalecer su cuerpo t¨¦cnico en Rusia
La solidaria Colombia de Jos¨¦ Pekerman deslumbr¨® hace cuatro a?os en Brasil. El primer gol de James Rodr¨ªguez frente Uruguay, pecho y volea desde el balc¨®n del ¨¢rea sin dejar caer el bal¨®n, fue la postal de aquel Mundial. Esa genialidad t¨¦cnica eclips¨® su segundo tanto en ese partido, acaso m¨¢s representativo de la contagiosa comuni¨®n que se apoder¨® de los colombianos: ocho de los 11 jugadores trenzaron 10 pases antes de que Juan Guillermo Cuadrado se lo sirviera de cabeza al inesperado goleador del certamen.
Ese gol tiene un ilustre antepasado en otra selecci¨®n sudamericana: la solidaria Argentina de Jos¨¦ Pekerman. Esteban Cambiasso anot¨® en Alemania 2006 un tanto que la FIFA ha considerado uno de los m¨¢s memorables en la historia de los mundiales, el segundo de la goleada 6-0 sobre Serbia y Montenegro. Su definici¨®n no es particularmente virtuosa, pero fue precedida de 24 toques seguidos en los que nueve argentinos monopolizaron la pelota durante casi un minuto. Alg¨²n m¨¦rito debe recaer en el entrenador que celebr¨® desde la raya aquellos dos monumentos al trabajo colectivo.
A los equipos de don Jos¨¦, que se prepara para repetir en Rusia con Colombia, los ha distinguido el buen trato al bal¨®n. Pero hasta sus m¨¢s apasionados defensores reconocen que la selecci¨®n cafetera ha perdido lustre, y obtuvo el ¨²ltimo de los cuatro boletos directos de Sudam¨¦rica sin el esplendor de aquel conjunto que alcanz¨® los cuartos de final en Brasil. Ahora necesita recuperar su mejor versi¨®n. Y recurri¨® precisamente a Cambiasso, el elegante volante de marca que fue internacional en 74 ocasiones con la albiceleste y reci¨¦n colg¨® los botines el a?o pasado. La incorporaci¨®n del Cuchu al cuerpo t¨¦cnico es la gran novedad de la tricolor.
Pekerman lo conoce desde que estaba al frente de las divisiones menores de Argentina y Cambiasso era un talento adolescente de pelo largo y rubio que apenas despuntaba. Juntos fueron campeones del Mundial Sub 20 de Malasia 1997. Aquel disciplinado mediocampista apenas comenzaba la destacada carrera que lo llev¨® dos temporadas al Real Madrid de los gal¨¢cticos y una d¨¦cada al Inter de Mil¨¢n, donde lo gan¨® todo. En septiembre, ya prematuramente calvo, se retir¨® tras su paso por Leicester y Olympiacos.
El fichaje de Cambiasso, que se especulaba desde hace semanas, nunca se anunci¨® de manera oficial. Se incorpor¨® al equipo a su llegada a Milanello, la sede deportiva del Milan donde Colombia se prepara antes de viajar a Rusia. La ¨²ltima semana se le ha visto en funciones en medio de las pr¨¢cticas, conversando con Pekerman. En el empate sin goles frente a Egipto en B¨¦rgamo, el ¨²ltimo juego de preparaci¨®n, estuvo en la tribuna. A falta de detalles desde la Federaci¨®n Colombia de F¨²tbol, la prensa le atribuye un papel en el an¨¢lisis de rivales, el trabajo del mediocampo y la salida del bal¨®n, esa funci¨®n que tan bien conoce.
Aunque se gradu¨® como entrenador de la UEFA, esta es su primera experiencia en los banquillos. Pero nadie cuestiona la trayectoria del Cuchu. Pekerman sigue siendo su mentor. ¡°Un maestro. Y no s¨®lo del juego. Con ¨¦l tuve la oportunidad de aprender a ser jugador de selecci¨®n. Los valores dentro y fuera de la cancha¡±, le dijo Cambiasso el a?o pasado al peri¨®dico argentino La Naci¨®n. ¡°Estaba tan ensamblado ese cuerpo t¨¦cnico que me cuesta decir Jos¨¦ y no pensar en todos. Pienso en Jos¨¦ y pienso en un grupo de trabajo". Ahora ¨¦l es parte de ese grupo, al servicio de Colombia. Un refuerzo en toda regla.
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