Italia y la Guardia Costera libia mantienen al ¡®Aquarius¡¯ y al ¡®Open Arms¡¯ al margen de los rescates frente a Libia

El Aquarius vuelve a patrullar frente a Libia tras la odisea de llevar a Espa?a a los ¨²ltimos rescatados. Exactamente 14 d¨ªas despu¨¦s de recoger en una sola noche a 630 migrantes que tuvieron que ser trasladados a Valencia, el barco de M¨¦dicos Sin Fronteras y SOS Mediterran¨¦e acaba de llegar a la zona frente a Libia para continuar con su misi¨®n de ayudar a pateras en peligro. Tambi¨¦n el barco de Proactiva, el Open Arms, est¨¢ en ese ¨¢rea. Este domingo, cuando ambos buques humanitarios se dirig¨ªan a la zona donde siete pateras han pedido auxilio, todas las embarcaciones en la zona recibieron el aviso de las autoridades mar¨ªtimas italianas de que ¡°la Guardia Costera de Libia asume la responsabilidad de los casos SAR (de rastreo y rescate)¡±, es decir, que Italia delega las operaciones de salvamento a los libios. Unos 1.020 migrantes iban en las pateras, seg¨²n Open Arms.

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El barco de esta ¨²ltima ONG ha llegado a la ubicaci¨®n de una de esas barcazas cuando sus ocupantes acababan de ser trasladados a una patrullera libia. Solo quedaba la patera vac¨ªa, ha explicado Guillermo Car?ardo, de Open Arms, que ha a?adido que la patrullera se ha alejado con unas 200 personas. Pese a la proximidad de este barco de rescate y a que el Aquarius se acercaba a la zona, la Guardia Costera libia ha pedido ayuda a dos mercantes y no a estos especialistas en salvamento. Es una se?al m¨¢s en la estrategia europea para disuadir a las ONG que rastrean frente a Libia.

Ca?ardo y otros miembros m¨¢s de Open Arms han recogido este domingo por la noche varios suministros m¨¦dicos (bolsas para cad¨¢veres para adultos y ni?os, jeringuillas, guantes, m¨¢scaras¡­ ) en el Aquarius porque el s¨¢bado Malta no les permiti¨® hacer el cambio de tripulaci¨®n y suministro en tierra. Tuvieron que hacerlo en alta mar en otra se?al de las crecientes dificultades para las ONG.

Los puertos italianos siguen herm¨¦ticamente cerrados para las ONG e incluso los mercantes est¨¢n teniendo dificultades para dejar en tierra a los n¨¢ufragos que recogen. Tampoco Malta ha abierto la puerta a nadie. Hacia el norte, otro barco de una ONG, el Lifeline, ha amanecido por cuarto d¨ªa a la espera de que alg¨²n puerto le permita desembarcar a los 239 migrantes salvados de ahogarse y el mercante dan¨¦s Alexander Maersk est¨¢ parado ante la ciudad siciliana de Pozzalo con m¨¢s de un centenar de migrantes que rescat¨® hace d¨ªas.

Este domingo, antes de la reuni¨®n informal de l¨ªderes de la UE en Bruselas para tratar el desaf¨ªo migratorio y pese a su postura de puertos cerrados, Italia critic¨® a Malta por no aceptar al Lifeline, con bandera holandesa. En un mensaje en su cuenta de Facebook, el ministro de Transporte, Danilo Toninelli, afirm¨® que el buque estaba en aguas maltesas, que ning¨²n otro pa¨ªs estaba coordinando operaciones y que por tanto las responsabilidades del Gobierno de La Valeta eran a¨²n mayores, informa Reuters. El Ejecutivo de Joseph Muscat insiste en que su pa¨ªs no es la autoridad competente. "La inhumanidad de Malta es el espejo de la actitud de Europa", dijo Toninelli.

El barco de Proactiva, el Open Arms y el Aquarius son ahora los dos barcos de ONG con m¨¢s capacidad entre los que est¨¢n desplegados frente a Libia en un momento en que la cuesti¨®n migratoria acapara el grueso del debate pol¨ªtico en la UE. Desde enero, 41.381 migrantes han llegado a Europa por mar, al menos 1.063 se han ahogado en el intento y los libios han interceptado a m¨¢s de 7.000 personas en las 12 millas de aguas territoriales y m¨¢s al norte, seg¨²n datos oficiales de agencias de la ONU.

La batalla entre las ONG, los Estados y la UE sobre los rescates en el Mediterr¨¢neo central, donde opera media docena de barcos humanitarios adem¨¢s de la Guardia Costera de Italia y sus cada vez m¨¢s activos hom¨®logos libios (que reciben entrenamiento, apoyo material y econ¨®mico de Italia y de la UE), es cada vez m¨¢s encarnizada.

Y simult¨¢neamente, lejos de observadores independientes, aumentan las pateras que los libios interceptan y devuelven a su territorio. 1.161 migrantes han sido devueltos a Libia en la semana desde el 17 de junio sin contar la noche del s¨¢bado, seg¨²n los recuentos de Acnur y la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones (OIM) informa el equipo de MSF en el Aquarius. Como relataron a EL PA?S a bordo del barco de SOS Mediterrane¨¦ y MSF muchos de los 630 rescatados trasladados finalmente a Valencia por invitaci¨®n del Gobierno espa?ol, los malos tratos, la extorsi¨®n, los abusos son una constante y las torturas y a violencia sexual, muy frecuentes.

Los organismos que coordinan y dirigen los rescates ¡ªcada pa¨ªs costero con las capacidades t¨¦cnicas requeridas tiene uno¡ª se han convertido en protagonistas de esta batalla que se libra v¨ªa comunicaciones de radio y correos electr¨®nicos. En caso de recibir un SOS son ellos los encargados de dar instrucciones a un barco u otro para realizar el salvamento. El centro de Roma delega cada vez m¨¢s a menudo en los guardacostas libios y el de Malta lo hizo el s¨¢bado por la noche.

Los rescates mar¨ªtimos, de cualquier n¨¢ufrago, incluidos los inmigrantes y refugiados, est¨¢n regulados por leyes y convenciones que delimitan las responsabilidades del capit¨¢n del barco encargado del erscate que recibe la alerta y de los Estados. ¡°El capit¨¢n est¨¢ obligado a dar ayuda a aquellos en peligro en el mar al margen de su nacionalidad, su estatus o el estado en que se encuentran. Es una tradici¨®n marinera y una obligaci¨®n inscrita en la legislaci¨®n internacional¡±, recuerda una gu¨ªa elaborada por Acnur, la OIM y la C¨¢mara Internacional de Navieras. El barco que los recoge les debe dar lo b¨¢sico y trasladarlos a donde les instruyan: otro barco o tierra firme. Los Estados ¡°responsables de la regi¨®n de rastreo y rescate¡± es, a trav¨¦s de sus centros de coordinaci¨®n mar¨ªtima, ¡°el encargado de facilitar ese lugar seguro [de desembarco] tan pronto como sea posible en la pr¨¢ctica¡±, a?ade la normativa mar¨ªtima.

La convenci¨®n de los refugiados proh¨ªbe expresamente que ¡°los solicitantes de asilo sean expulsados a las fronteras de territorios donde su vida y libertades est¨¦n amenazadas¡± incluido el pa¨ªs de que huyen, dice la gu¨ªa. Las devoluciones a Libia, que van en aumento, entrar¨ªan en este supuesto.

El Aquarius vuelve a patrullar frente a Libia tras la odisea de llevar a Espa?a a los ¨²ltimos rescatados. Exactamente 14 d¨ªas despu¨¦s de recoger en una sola noche a 630 migrantes que tuvieron que ser trasladados a Valencia, el barco de M¨¦dicos Sin Fronteras y SOS Mediterran¨¦e acaba de llegar a la zona frente a Libia para continuar con su misi¨®n de ayudar a pateras en peligro. Tambi¨¦n el barco de Proactiva, el Open Arms, est¨¢ en ese ¨¢rea. Los puertos italianos siguen herm¨¦ticamente cerrados para las ONG e incluso los mercantes est¨¢n teniendo dificultades para dejar en tierra a los n¨¢ufragos que recogen. Tampoco Malta ha abierto la puerta a nadie. Hacia el norte, otro barco de una ONG, el Lifeline, ha amanecido por cuarto d¨ªa a la espera de que alg¨²n puerto le permita desembarcar a los 239 migrantes salvados de ahogarse y el mercante dan¨¦s Alexander Maersk est¨¢ parado ante la ciudad siciliana de Pozzalo con en torno a un centenar de migrantes que rescat¨® hace d¨ªas.

Este domingo, antes de la reuni¨®n informal de l¨ªderes de la UE en Bruselas para tratar el desaf¨ªo migratorio y pese a su postura de puertos cerrados, Italia critic¨® a Malta por no aceptar al Lifeline, con bandera holandesa. En un mensaje en su cuenta de Facebook, el ministro de Transporte, Danilo Toninelli, afirm¨® que el buque estaba en aguas maltesas, que ning¨²n otro pa¨ªs estaba coordinando operaciones y que por tanto las responsabilidades del Gobierno de La Valeta eran a¨²n mayores, informa Reuters. El Ejecutivo de Joseph Muscat insiste en que su pa¨ªs no es la autoridad competente. "La inhumanidad de Malta es el espejo de la actitud de Europa", dijo Toninelli.

El barco de Proactiva, el Open Arms y el Aquarius son ahora los dos barcos de ONG con m¨¢s capacidad entre los que est¨¢n desplegados frente a Libia en un momento en que la cuesti¨®n migratoria acapara el grueso del debate pol¨ªtico en la UE. Desde enero, 41.381 migrantes han llegado a Europa por mar, al menos 1.063 se han ahogado en el intento y los libios han interceptado a m¨¢s de 7.000 personas en las 12 millas de aguas territoriales y m¨¢s al norte, seg¨²n datos oficiales de agencias de la ONU.

La batalla entre las ONG, los Estados y la UE sobre los rescates en el Mediterr¨¢neo central, donde opera media docena de barcos humanitarios adem¨¢s de la Guardia Costera de Italia y sus cada vez m¨¢s activos hom¨®logos libios (que reciben entrenamiento, apoyo material y econ¨®mico de Italia y de la UE), es cada vez m¨¢s encarnizada. Este domingo, cuando el Aquarius (y el Open Arms) se dirig¨ªan a la zona donde siete pateras han pedido auxilio, el puente de mando recibi¨® un mensaje por correo electr¨®nico, como el resto de los nav¨ªos en la zona, de que ¡°la Guardia Costera de Libia asume la responsabilidad de los casos SAR (de rastreo y rescate)¡±, es decir, que delega las operaciones de salvamento a los libios. Seg¨²n la ONG espa?ola, hay unas mil personas en las embarcaciones en apuros.

Y simult¨¢neamente, lejos de observadores independientes, aumentan las pateras que los libios interceptan y devuelven a su territorio. 1.161 migrantes han sido devueltos a Libia en la semana desde el 17 de junio sin contar la noche del s¨¢bado, seg¨²n los recuentos de Acnur y la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones (OIM) informa el equipo de MSF en el Aquarius. Como relataron a EL PA?S a bordo del barco de SOS Mediterrane¨¦ y MSF muchos de los 630 rescatados trasladados finalmente a Valencia por invitaci¨®n del Gobierno espa?ol, los malos tratos, la extorsi¨®n, los abusos son una constante y las torturas y a violencia sexual, muy frecuentes.

Los organismos que coordinan y dirigen los rescates ¡ªcada pa¨ªs costero con las capacidades t¨¦cnicas requeridas tiene uno¡ª se han convertido en protagonistas de esta batalla que se libra v¨ªa comunicaciones de radio y correos electr¨®nicos. En caso de recibir un SOS son ellos los encargados de dar instrucciones a un barco u otro para realizar el salvamento. El centro de Roma delega cada vez m¨¢s a menudo en los guardacostas libios y el de Malta lo hizo el s¨¢bado por la noche. Un mercante, el Melkon Rize, informa a Malta a las 22.00 de que rodea hace tres horas una patera sobrecargada que avist¨®. Ambas embarcaciones est¨¢n a 80 millas de la costa libia (y a 91 del Aquarius, que se ofrece a ayudar). El barco humanitario recibe informaci¨®n de que las autoridades mar¨ªtimas maltesas derivan el rescate a sus colegas libios. Que las ONG del Aquarius sepan es la primera vez que se encarga a los libios un rescate tan lejos de su base.

Los rescates mar¨ªtimos, de cualquier n¨¢ufrago, incluidos los inmigrantes y refugiados, est¨¢n regulados por leyes y convenciones que delimitan las responsabilidades del capit¨¢n del barco encargado del erscate que recibe la alerta y de los Estados. ¡°El capit¨¢n est¨¢ obligado a dar ayuda a aquellos en peligro en el mar al margen de su nacionalidad, su estatus o el estado en que se encuentran. Es una tradici¨®n marinera y una obligaci¨®n inscrita en la legislaci¨®n internacional¡±, recuerda una gu¨ªa elaborada por Acnur, la OIM y la C¨¢mara Internacional de Navieras. El barco que los recoge les debe dar lo b¨¢sico y trasladarlos a donde les instruyan: otro barco o tierra firme. Los Estados ¡°responsables de la regi¨®n de rastreo y rescate¡± es, a trav¨¦s de sus centros de coordinaci¨®n mar¨ªtima, ¡°el encargado de facilitar ese lugar seguro [de desembarco] tan pronto como sea posible en la pr¨¢ctica¡±, a?ade la normativa mar¨ªtima.

La convenci¨®n de los refugiados proh¨ªbe expresamente que ¡°los solicitantes de asilo sean expulsados a las fronteras de territorios donde su vida y libertades est¨¦n amenazadas¡± incluido el pa¨ªs de que huyen, dice la gu¨ªa. Las devoluciones a Libia, que van en aumento, entrar¨ªan en este supuesto.