La UE impone sanciones a 11 altos cargos de Venezuela
Los Veintiocho los consideran responsables de "violaciones de los derechos humanos y de socavar la democracia"
Crece la lista de miembros del r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro vetados en Europa.?Los ministros de Exteriores de los 28 pa¨ªses comunitarios han a?adido este lunes a 11 altos cargos de varios organismos venezolanos a la lista de personas que tienen prohibida la entrada en la UE. Tambi¨¦n se han congelado sus posibles bienes en el continente. Esta nueva ronda de sanciones supone una respuesta a las irregularidades que rodearon las elecciones del 20 de mayo, celebradas en medio de una abstenci¨®n r¨¦cord y en ausencia del grueso de la oposici¨®n. En un comunicado conjunto, los responsables de Exteriores europeos han defendido que los comicios "no fueron libres ni justos, y su resultado carece de credibilidad".
Entre los sancionados hay nombres muy pr¨®ximos a Nicol¨¢s Maduro. Concretamente los vicepresidentes Delcy Rodr¨ªguez y Tareck el Aissami y el ministro de Educaci¨®n, El¨ªas Jaua. Pero tambi¨¦n funcionarios leales al Ejecutivo bolivariano en ¨¢mbitos como las fuerzas armadas, la justicia o el Consejo Nacional Electoral, organismo encargado de velar por la transparencia de las consultas. "Las personas incluidas en la lista son responsables de violaciones de los derechos humanos y de socavar la democracia y el Estado de derecho en Venezuela", estima la UE.
La medida es un nuevo golpe al entorno de Maduro. En enero, otros siete miembros del c¨ªrculo m¨¢s cercano al sucesor de Hugo Ch¨¢vez, entre ellos su n¨²mero dos, Diosdado Cabello, recibieron id¨¦ntico castigo. Los socios comunitarios buscan elevar la presi¨®n para forzar a Caracas a abrir un proceso de di¨¢logo que culmine en una nueva convocatoria de elecciones, si bien hasta ahora no se han obtenido resultados palpables.
El Gobierno venezolano reaccion¨® a las sanciones de enero elevando el tono contra Espa?a ¡ªla gran inspiradora de las represalias diplom¨¢ticas¡ª, e incluso expuls¨® al embajador espa?ol durante casi tres meses. Este lunes ha vuelto a alzar la voz calificando de "agresi¨®n" e "intromisi¨®n" las nuevas penalizaciones.? "Es sorprendente la flagrante subordinaci¨®n de la UE a la Administraci¨®n Trump, emulando sus acciones de agresi¨®n contra Venezuela", ha contraatacado.
Entretanto, la UE combina en su estrategia el palo y la zanahoria: esto es, la firmeza diplom¨¢tica con la puerta abierta a dar marcha atr¨¢s si se perciben gestos desde Caracas. El ministro de Exteriores espa?ol, Josep Borrell, ha se?alado en rueda de prensa desde Luxemburgo que las sanciones "no excluyen en ning¨²n caso la voluntad de di¨¢logo", y se ha mostrado partidario de hallar resquicios de acercamiento pol¨ªtico. "[La crisis] no va a resolverse f¨¢cilmente a base de sanciones", ha admitido.
La UE es el tercer mayor socio comercial de Venezuela tras Estados Unidos y China, aunque hasta ahora los Veintiocho han eludido utilizar la econom¨ªa como instrumento de presi¨®n. De momento, la acci¨®n comunitaria ha centrado las sanciones en los altos cargos del r¨¦gimen, y ha evitado da?ar el tejido productivo del pa¨ªs o sectores sensibles como el petrolero al entender que en medio de la severa crisis que padece el pa¨ªs, no procede agravar el sufrimiento de la poblaci¨®n.
Europa aplica sanciones a Venezuela desde noviembre de 2017, cuando los 28 pa¨ªses miembros acordaron por unanimidad un embargo de armas y equipos electr¨®nicos ante su progresiva deriva institucional. Su efecto es sin embargo limitado. Espa?a, Holanda y Austria son los ¨²nicos tres pa¨ªses de la Uni¨®n que venden material militar a Caracas, y m¨¢s del 90% proviene de China y Rusia.
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