?Qui¨¦n habla en nombre de los ¡®chalecos amarillos¡¯?
Los cuestionamientos sobre qui¨¦nes representan al movimiento de protesta dificultan el di¨¢logo con el Gobierno
De todas las reuniones de emergencia organizadas por el primer ministro franc¨¦s, ?douard Philippe, para buscar una salida a la crisis de los chalecos amarillos, la cita clave era la de este martes en la tarde, hora a la que el jefe de Gobierno hab¨ªa invitado, por segunda vez, al palacio de Matignon donde tiene su sede a los ¡°miembros del colectivo de chalecos amarillos que hayan solicitado un encuentro¡±. Ante las declaraciones durante el lunes de la mayor¨ªa de los supuestos representantes del movimiento indicando que no acudir¨ªan a la entrevista parisina -solo uno, David Tan, taxista de Nantes, hab¨ªa manifestado su deseo de ver a Philippe, aunque a t¨ªtulo personal- el ejecutivo confirm¨® finalmente esta ma?ana que cancelaba el encuentro.
Uno de los problemas principales del Gobierno ante esta crisis es la dificultad para encontrar un interlocutor representativo de este movimiento que naci¨® como una protesta ciudadana por el aumento del impuesto a los carburantes pero que ha degenerado en una manifestaci¨®n generalizada por la p¨¦rdida del poder adquisitivo de los franceses y con demandas de todo tipo.
Hace una semana, en las redes sociales ¡ªdonde naci¨® y se organiz¨® inicialmente la protesta¡ª circul¨® un comunicado en el que se informaba de la creaci¨®n de una ¡°coordinadora nacional¡± con ¡°decenas de?chalecos amarillos de todos los horizontes¡±. Dicha coordinadora eligi¨® a ocho ¡°comunicantes¡± ¡ªvarios de ellos rechazaron expl¨ªcitamente ser llamados representantes o hasta portavoces¡ª que deber¨ªan buscar ¡°un primer encuentro con el presidente, el primer ministro y su gobierno¡±. Pero cuando Philippe los convoc¨®, el viernes pasado, ¨²nicamente acudieron dos. Uno de ellos, Jason Herbert, solo permaneci¨® unos minutos con el primer ministro y el ministro de Transici¨®n Ecol¨®gica, Fran?ois de Rugy, porque estos se negaron, declar¨® el chaleco amarillo, a que ¡°la entrevista fuera retransmitida en directo¡±. Otro segundo chaleco amarillo, cuya identidad no fue revelada, debati¨® durante una hora con el jefe de Gobierno y el ministro, un di¨¢logo que Philippe calific¨® m¨¢s tarde de ¡°interesante, franco y ¨²til¡±, a la par que asegur¨® que sus puertas segu¨ªan abiertas a los representantes de los gilets jaunes. Fueran quienes fueran.
El pasado fin de semana, se anunci¨® la creaci¨®n de una nueva coordinadora, denominada ¡°chalecos amarillos libres¡±, con una decena de portavoces de una ¡°c¨®lera constructiva¡± ¡ªcon un rechazo expl¨ªcito de la violencia¡ª que publicaron una tribuna en el dominical Journal Du Dimanche con algunas de sus reclamaciones. Entre otros, quieren un debate amplio sobre fiscalidad, la introducci¨®n del sistema proporcional en las elecciones ¡ªen vez del sistema de dos vueltas, que discrimina a los partidos peque?os o antisistema¡ª y un recurso m¨¢s frecuente a los referendos. Como medida inmediata para franquear esa puerta de di¨¢logo abierta por el Gobierno, exig¨ªan adem¨¢s la ¡°congelaci¨®n inmediata¡± del incremento de los impuestos a los carburantes.
Pero tampoco este frente parece unido o listo para un di¨¢logo con el ejecutivo. Despu¨¦s de mantener la inc¨®gnita durante toda la jornada, dos de los?chalecos amarillos "libres" anunciaron a la Agencia France Presse la tarde del lunes que finalmente no acudir¨ªan a la convocatoria. Uno de ellos, Benjamin Cauchy, explic¨® que de un lado no hab¨ªan obtenido su condici¨®n de la congelaci¨®n del precio del combustible para abrir el di¨¢logo. Adem¨¢s, ¡°no deseamos ser las marionetas de una comunicaci¨®n pol¨ªtica¡±, agreg¨®. Una tercera raz¨®n, citada por varios de los portavoces de los chalecos ¡°libres¡± todo el lunes, es la seguridad: seg¨²n denunciaron, han recibido ¡°amenazas e intimidaciones¡±, tanto ellos como sus familiares, desde que apareci¨® su tribuna en el dominical.
Cauchy y todos chalecos amarillos se despertaron este martes con la noticia de que el Gobierno preparaba el anuncio inminente de la exigida moratoria sobre el carburante. "Un primer paso", consider¨®. Sin embargo, dijo en declaraciones a la cadena BFMTV, los franceses quieren "la baguette entera". Es decir, m¨¢s reivindicaciones. Y adem¨¢s, agreg¨®, hay otras formas, como "las redes sociales o los medios", de comunicarse, dijo sin recordar, al parecer, que eran los chalecos amarillos los que hab¨ªan reclamado desde un principio una entrevista con el ejecutivo de Macron. La cita, por el momento, seguir¨¢ pendiente.
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