Un periodista alem¨¢n permanece detenido desde hace un mes en Venezuela

Billy Six, periodista y documentalista alem¨¢n, ha cumplido m¨¢s de un mes en las celdas de la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), en Caracas, por supuestamente haber fotografiado al presidente de Venezuela, Nicol¨¢s Maduro, en un acto p¨²blico.

El reportero, detenido el 17 de noviembre en el Estado occidental de Falc¨®n, es acusado de espionaje, violaci¨®n de zonas de seguridad y rebeli¨®n. Su proceso judicial ser¨¢ llevado por un tribunal militar, una irregularidad aplicada con frecuencia a civiles durante el r¨¦gimen de Maduro. ¡°?l entr¨® a Venezuela desde la ciudad colombiana de C¨²cuta, hizo varias coberturas, entre ellas un mitin con Maduro. Es ah¨ª donde hace unas fotograf¨ªas muy cerca al mandatario y por ese motivo lo acusan de violar los per¨ªmetros de seguridad¡±, explica Carlos Correa, director de la ONG Espacio P¨²blico.

El periodista ha permanecido incomunicado durante los primeros d¨ªas de su detenci¨®n. De ah¨ª que inici¨® una huelga de hambre el 13 de diciembre para pedir un abogado privado y comunicarse con la Embajada de Alemania y sus padres. En una carta divulgada por Espacio P¨²blico, el reportero asegur¨® estar ¡°feliz¡± porque afronta ¡°mejores condiciones¡± de detenci¨®n que en el Oriente Pr¨®ximo y ?frica y agradeci¨® por la atenci¨®n m¨¦dica para sanarse de un dengue que contrajo a finales de octubre, pero denunci¨® que no se permiti¨® conocer los resultados de las pruebas m¨¦dicas y que un agente de la polic¨ªa pol¨ªtica posiblemente rob¨® su tarjeta bancaria en Venezuela, adem¨¢s de ser privado de sus derechos.

La Embajada alemana en el pa¨ªs sudamericano apenas ha tenido contacto telef¨®nico con el periodista el pasado viernes. ¡°Billy ha concluido su huelga de hambre despu¨¦s de comunicarse con los diplom¨¢ticos de Alemania, pero todav¨ªa no ha podido hablar con sus padres directamente, siempre lo ha hecho a trav¨¦s de un tercero. Est¨¢ aislado. Su arresto se conoci¨® tarde, ya ten¨ªa muchos d¨ªas arrestados cuando supimos¡±, dice Correa.

La preocupaci¨®n por su seguridad se ha disparado por la muerte de dos reclusos en custodia del Estado, el concejal Fernando Alb¨¢n y el expresidente de Petr¨®leos de Venezuela Nelson Mart¨ªnez. Six es colaborador para los medios de derechas Junge Freiheit y Deutschland Magazine y se hab¨ªa autobautizado el ¡°Indiana Jones del Periodismo¡± en su canal en YouTube por sus incursiones en pa¨ªses con conflictos o grandes crisis. A finales de 2012, el documentalista estuvo detenido un par de semanas en Siria.

Hace unos meses hab¨ªa grabado el ¨¦xodo en la frontera colombo-venezolana y un a?o atr¨¢s se fotografiaba junto a militares que custodiaban las elecciones de alcaldes del pa¨ªs caribe?o, pero en octubre se traslad¨® hasta otras provincias para continuar con sus investigaciones period¨ªsticas.

Con ¨¦l son tres comunicadores prisioneros en el pa¨ªs sudamericano por supuestamente cometer cr¨ªmenes contra el Estado. Otros arrestados por orden del Gobierno son Braulio Jatar, director del portal Reporte Confidencial, y del reportero gr¨¢fico Jes¨²s Medina Ezaine.

El Comit¨¦ para la Protecci¨®n de los Periodistas ubica a Venezuela como el pa¨ªs con m¨¢s periodistas en prisi¨®n en Am¨¦rica Latina, mientras que Reporteros Sin Fronteras (RSF) lo sit¨²a en su informe anual en el puesto 143 de 180 que conforman la actual Clasificaci¨®n Mundial de la Libertad de Prensa.

Emmanuel Colombi¨¦, director del Despacho Am¨¦rica Latina de RSF, exigi¨® su inmediata liberaci¨®n hace una semana. ¡°El trato que se da a Billy Six es indigno y escandaloso¡±, dijo. El directivo ha pedido a las autoridades venezolanas que expusieran las pruebas presentadas contra el periodista y ponerlo en libertad para que pueda preparar su defensa. ¡°Por otra parte, es inconcebible que el Estado venezolano haga que un tribunal militar juzgue al periodista. Esto constituye una grave violaci¨®n a la legislaci¨®n nacional y a las obligaciones internacionales del pa¨ªs. Un civil no tiene por qu¨¦ comparecer ante una corte militar¡±, agreg¨®.