Al menos 79 muertos en la explosi¨®n de una toma clandestina de combustible en M¨¦xico

La tragedia se cierne nuevamente sobre M¨¦xico. Una explosi¨®n en una toma clandestina de combustible en el municipio de?Tlahuelilpan, en el Estado de Hidalgo (en el centro del pa¨ªs, a unos 100 kil¨®metros de la capital mexicana), ha dejado al menos 79 muertos (la cifra conocida hasta la ma?ana del domingo 20) y decenas de heridos, seg¨²n ha informado el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad. Dos horas antes del estallido ocurrido el viernes, que se produjo a las 17.00 (hora local), las autoridades hab¨ªan tenido conocimiento de una fuga intencionada de carburante en una zona de cultivos.?

El Gobierno de Hidalgo ha hecho un llamamiento a los habitantes de Tlahuelilpan (casi 20.000 habitantes) para que se mantengan lejos del lugar de la explosi¨®n y permanezcan, en la medida de lo posible, en sus hogares. El gobernador de Hidalgo ha confirmado que se trataba de una toma clandestina y que los fallecidos han muerto calcinados, informa Diego Mancera.

Seg¨²n inform¨® el secretario de Defensa, Luis Sandoval, en una rueda de prensa matutina, fueron desplegados unos 25 efectivos del Ej¨¦rcito. En un comunicado oficial se explica que "al aumentar la presi¨®n del ducto, el brote de combustible creci¨® considerablemente y los pobladores (...) acudieron en gran n¨²mero con cubetas, bidones y todo tipo de recipientes". "Para evitar un enfrentamiento con la poblaci¨®n", prosigue el texto, "los militares se replegaron". Poco despu¨¦s se produjo la explosi¨®n. La petrolera estatal Pemex cerr¨® el oleoducto alrededor de las seis de la tarde, cuando detect¨® que el nivel de presi¨®n era inferior a lo habitual. El motivo: el combustible ya estaba brotando a la superficie.

Seg¨²n el testimonio del alcalde de Tlahuelilpan, Juan Pedro Cruz, eran alrededor de 200 personas las que trataban de recoger el combustible derramado en el suelo. Los polic¨ªas y militares que trataban de acordonar la zona?les pidieron, sin ¨¦xito, que se retirasen del lugar. "Eran hordas de personas que, por llevarse una cubeta de hidrocarburo, pueden perder la vida", agreg¨® el gobernador Fayad. El incendio fue completamente extinguido a las 23.50, hora local, seg¨²n inform¨® el secretario de Seguridad P¨²blica, Alfonso Durazo.

La explosi¨®n ha tenido lugar en plena batalla del Ejecutivo federal contra el robo de combustible, un negocio de gran escala en M¨¦xico en el que tambi¨¦n ha penetrado el crimen organizado. Desde el pasado 21 de diciembre, las autoridades mexicanas han cerrado varios canales de transporte de gasolina en el centro y occidente del pa¨ªs, que engloba las regiones m¨¢s afectadas por el robo de combustible, popularmente conocido como huachicoleo. La clausura de las tuber¨ªas por las que circula la gasolina ha obligado al despliegue de camiones cisterna para llevar combustibles a las estaciones de servicio. Pese a estas medidas preventivas, en las ¨²ltimas jornadas se han repetido las escenas de desabastecimiento en varios Estados, entre ellos la Ciudad de M¨¦xico.

"Continuaremos luchando contra el robo de combustible hasta que logremos erradicarlo", asegur¨® el presidente de M¨¦xico, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, desde la zona del suceso.?El Gobierno federal ha ordenado, adem¨¢s, el despliegue de m¨¢s de 5.000 militares para vigilar las instalaciones, canalizaciones y los camiones cisterna. Precisamente este jueves, el Ejecutivo federal inform¨® del bloqueo de las cuentas de 42 empresas, el arresto de 435 personas vinculadas al robo de carburante y la apertura de 1.831 investigaciones. De acuerdo con los datos oficiales, en 2017 y 2018 el robo de combustible ha provocado p¨¦rdidas de alrededor de 3.000 millones de d¨®lares (2.638 millones de euros) en las cuentas p¨²blicas.

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Varios carriles de la carretera M¨¦xico-Quer¨¦taro, a la altura del kil¨®metro 43 ¡ªun punto intermedio entre la capital y Tlahuelilpan¡ª?fueron cortados para permitir el despegue de los helic¨®pteros que trasladaban a los heridos a hospitales especializados en la atenci¨®n de quemados. Hasta ese lugar llegaban en ambulancias. "Desde las 10.00, cuando llegu¨¦, han salido 12 pacientes con quemaduras de segundo o tercer grado, que son los que est¨¢n siendo trasladados a la Ciudad de M¨¦xico", dec¨ªa desde all¨ª y al filo de la medianoche, Daniel Villace?or, uno de los m¨¦dicos enviados desde la capital mexicana como parte del operativo de emergencia.

Como Lourdes Ram¨ªrez, vecina de?Tlahuelilpan, han sido varios los m¨¦dicos que se han desplazado voluntariamente al lugar de los hechos para ofrecer su ayuda. "No me pod¨ªa quedar sentada. Fue muy fuerte; estaba en mi escritorio cuando vi la llamarada y agarr¨¦ r¨¢pidamente el botiqu¨ªn con lo necesario para atender las quemaduras", declara Ram¨ªrez desde una de las ambulancias. Entre los heridos hay ni?os y adolescentes.

Tras la tragedia, el centro cultural de Tlahuelilpan se ha convertido improvisadamente en un centro de informaci¨®n. Hasta all¨ª llegan decenas de personas en busca de sus familiares para saber si se encuentran entre los fallecidos o, en el mejor de los casos, entre los heridos. Entre los que buscan a sus allegados no localizados est¨¢ Ricardo Jim¨¦nez, que se ha desplazado desde la Ciudad de M¨¦xico para tratar de conocer el paradero de su hermano C¨¦sar. Frente a uno de los ¨²ltimos controles antes de acceder al lugar de la explosi¨®n, Luciana Serrano, de 55 a?os, busca a su hijo Germ¨¢n, de 20. "No lleg¨® a casa. Le he hemos buscado en todos los hospitales de la zona y no lo encontramos. Solo me queda la esperanza de que est¨¦ en alguno de los hospitales de la Ciudad de M¨¦xico", relata mientras se cubre con una manta para protegerse del intenso fr¨ªo. Amelia Bautista, de 47 a?os, quiere saber d¨®nde est¨¢ su hijo Hugo, de solo 13. Como Luciana, le ha buscado sin ¨¦xito en todos los centros hospitalarios de los alrededores.

En diciembre de 2010 se produjo un incidente similar en San Mart¨ªn Texmelucan (Puebla). En aquella ocasi¨®n 29 personas murieron tras la explosi¨®n de miles de litros de combustible que escaparon de las tuber¨ªas de Pemex a trav¨¦s de una toma clandestina. Fue la primera tragedia del?huachicoleo?en la regi¨®n. La explosi¨®n se produjo cuando la fuga de di¨¦sel lleg¨® hasta la zona urbana durante la madrugada y una chispa provoc¨® el incendio, que dej¨® tambi¨¦n 52 heridos. El Gobierno mexicano nunca dio con los responsables directos de aquel desastre, informa Sonia Corona.