Sanremo contra el nacionalpopulismo

Alessandro Mahmood, el hijo de un inmigrante egipcio y una sarda, un chaval criado en la periferia milanesa y curtido a base de rimas de rap, levant¨® el premio del Festival de la Canci¨®n de Sanremo el s¨¢bado por la noche. Adem¨¢s, el joven, de 26 a?os, representar¨¢ en el festival de Eurovisi¨®n a la Italia que cierra puertas y niega la nacionalidad a los hijos de inmigrantes nacidos en el pa¨ªs. En cualquier otro momento representar¨ªa todo un s¨ªmbolo de integraci¨®n y apertura.

El s¨¢bado, Mahmood tuvo que plantarse ante los periodistas y reivindicar algo que no ten¨ªa nada que ver con su talento o sus habilidades musicales. Lo ¨²nico que en ese momento parec¨ªa importarle a la gente. ¡°Soy italiano al 100%¡±, dijo.

Antes de que el nacionalpopulismo estuviese de moda en Europa, el festival de Sanremo ya encarnaba parte de esa esencia durante sus cuatro d¨ªas de celebraci¨®n. Italianidad, nacionalismo, purpurina y unas audiencias de v¨¦rtigo que disolv¨ªan las clases sociales. De modo que hab¨ªa curiosidad por ver qui¨¦n ganar¨ªa en el primer a?o de la era soberanista de Italia. Pero el giro de guion fue fabuloso. ¡°Es la m¨²sica de Italia la que cambia¡±, defendi¨® el jurado su victoria. En realidad, es el propio pa¨ªs el que se transforma desde hace tiempo. Pero la victoria de Mahmood volvi¨® a desatar una extra?a pol¨¦mica.

El vice primer ministro y responsable de Interior, Matteo Salvini, denunci¨® que el resultado era fruto del peso excesivo del jurado de expertos con respecto a la votaci¨®n popular. Lo mismo hizo Luigi Di Maio, el otro vice primer ministro y l¨ªder del Movimiento 5 Estrellas, que convirti¨® el triunfo de Mahmood en su obsesiva dial¨¦ctica entre ¨¦lite y pueblo. ¡°No ha ganado lo que quer¨ªa la mayor¨ªa desde casa, sino una minor¨ªa de jueces compuesta por periodistas y radicales chic. Los mismos que cada vez est¨¢n m¨¢s alejados del sentir popular¡±. Ese mismo d¨ªa su partido se hab¨ªa dejado 20 puntos en los Abruzos.