?Por qu¨¦ los japoneses aborrecen los tatuajes?
La inscripci¨®n en japon¨¦s de la cantante Ariana Grande y los pr¨®ximos juegos ol¨ªmpicos de 2020 ponen en primer plano la dif¨ªcil relaci¨®n de los nipones con la tinta indeleble sobre la piel
El patinazo de Ariana Grande, que quiso tatuarse en japon¨¦s el nombre de su ¨²ltimo ¨¦xito en la palma de la mano y ante el dolor que sent¨ªa decidi¨® economizar caracteres y en vez de 7 Rings el resultado significaba "parrilla para barbacoa", lleg¨® a los titulares de los medios nipones y volvi¨® a poner en primer plano la extra?a relaci¨®n de los japoneses con las inscripciones en la piel.
Cuando intent¨® arreglarlo, lo empeor¨® al a?adir el ideograma para ¡°dedo¡± y un coraz¨®n. El error ling¨¹¨ªstico de Ariana Grande fue recibido en el pa¨ªs asi¨¢tico con la misma indulgencia que se tiene con las divertidas equivocaciones en las que suele incurrir quien se inicia en un nuevo idioma.
Para conocer la graf¨ªa correcta del t¨ªtulo del tema de Ariana Grande basta visualizar el arranque de su videoclip, que supera ya los trescientos millones de visualizaciones y que se recrea en una est¨¦tica de neones rosa y turquesa que confirma la devoci¨®n de la cantante nacida en Florida (EE UU) por la iconograf¨ªa del cosplay y la ¡°Lolita nipona¡± originada en el barrio tokiota de Harajuku.
La falta de ortograf¨ªa ha servido para que aumenten las b¨²squedas de "Ariana Grande" en Asia y ha contribuido a reavivar la inquietud por el fuerte rechazo social que provocan los tatuajes en el pa¨ªs que en el a?o 2020 prev¨¦ la llegada de atletas y visitantes de todo el mundo, muchos de ellos con el cuerpo decorado en sitios muy visibles con tintas indelebles.
Estigmatizar ladrones tatuando una ¡°X¡± u otras marcas en su frente o en sus brazos, fue una pr¨¢ctica habitual en las prisiones japonesas a lo largo los siglos dieciocho y diecinueve. La conexi¨®n entre tatuaje y delincuencia se consolid¨® a mediados del siglo veinte con la aparici¨®n del g¨¦nero de cine yakuza, la mafia japonesa cuyos miembros envuelven su cuerpo entero con flores y criaturas quim¨¦ricas pintadas en el estilo de los coloridos grabados tradicionales ukiyo-e.
Hasta finales del siglo pasado era tab¨² llevar tatuajes en Jap¨®n y a¨²n hoy hay piscinas, ba?os p¨²blicos y balnearios de todo el pa¨ªs que rechazan a las personas tatuadas. Aunque se supone que la prohibici¨®n est¨¢ dirigida a los intimidantes ornamentos de los miembros de la Yakuza, la mujer que como Ariana Grande lleva tatuadas lunas diminutas o corazones del tama?o de una moneda en cuello y pies, recibe un discreto esparadrapo para taparlos.
Cuando en 2018 se confirm¨® que el jugador Andr¨¦s Iniesta ser¨ªa contratado por el Vissel Kobe, la prensa deportiva japonesa destac¨® su buen car¨¢cter y tambi¨¦n la ausencia de tatuajes visibles en su cuerpo, algo raro en el mundo del f¨²tbol occidental. La abundancia de vistosos tatuajes entre jugadores c¨¦lebres como Fernando Torres, que juega en el tambi¨¦n japon¨¦s Sagan Tosu, contribuye, sin embargo, a cambiar la percepci¨®n de que marcarse el cuerpo de por vida es invitar al rechazo social.
El temor a que el sector que administra el principal atractivo tur¨ªstico natural de Jap¨®n, los ba?os termales, sea acusado de discriminar a los extranjeros, ha llevado a algunas empresas de provincias a relajar la prohibici¨®n y a sumarse a una web en ingl¨¦s (tattoo-friendly.jp) que permite a los turistas tatuados encontrar sitios donde no ser¨¢n rechazados.
A¨²n as¨ª, muchos japoneses que tienen tatuajes los ocultan debajo de la ropa, y los profesionales de ese arte viven en un limbo legal a causa de normativas que sin prohibir su oficio pretenden limitar el uso de agujas en la piel.
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