Salvini destroza a sus rivales y prepara el asalto al poder

Matteo Salvini, ministro del Interior de Italia y l¨ªder de la Liga, es el nuevo meteorito de la pol¨ªtica italiana. Las elecciones europeas han pulverizado todos los pron¨®sticos y su partido ha doblado los resultados obtenidos en las legislativas de hace poco m¨¢s de un a?o. Los casos de corrupci¨®n, que terminaron con la dimisi¨®n de sus hombres de confianza, no le han afectado. Tampoco la dureza en la gesti¨®n de los flujos migratorios o el hecho de no haber pisado el Ministerio del Interior en un a?o a causa de sus compromisos electorales y de haberlo convertido en una m¨¢quina de propaganda. Salvini pasa del 17% de apoyo al 34,3%: le han votado 9.153.384 ciudadanos italianos. Un resultado estratosf¨¦rico, engrandecido todav¨ªa m¨¢s por la debacle de su socio de Gobierno, el Movimiento 5 Estrellas, que hizo el camino exactamente inverso: de 33,4% a 17,1%.

Salvini, un pol¨ªtico de carrera de 46 a?os que jam¨¢s ha trabajado fuera del partido, tiene ahora en su mano cambiar la identidad del inestable gobierno de Italia. Primero lo har¨¢ devorando todo el espacio pol¨ªtico desde su vicepresidencia, a?adiendo muescas en el rev¨®lver de la Liga y contentando a su electorado del norte con medidas pensadas para estimular la econom¨ªa. Desde dentro, confirman fuentes de la Liga a este peri¨®dico. As¨ª lo hizo tambi¨¦n al tomar el mando del partido cuando apenas llegaba al 4% hace solo cinco a?os y logr¨® reflotarlo. Luego, nadie lo duda, intentar¨¢ el asalto al Palacio Chigi forzando la ruptura con el M5S y buscando unas nuevas elecciones que le permitan materializar el enorme consenso acumulado.

La pol¨ªtica italiana es hoy de una volatilidad extrema y el camino ha sido corto. El 4 de marzo de 2018, la Liga qued¨® en tercera posici¨®n en las elecciones legislativas. Entonces, se present¨® a la mesa de negociaci¨®n del futuro acuerdo con el M5S con la mitad de votos que su socio. Nadie entendi¨® aquel experimento que pon¨ªa en marcha el primer gobierno populista y euroesc¨¦ptico de la UE. En clara minor¨ªa, trag¨® con una serie de propuestas y carteras ministeriales que le supieron a poco. El propio primer ministro termin¨® siendo un hombre del M5S, un abogado desconocido llamado Giuseppe Conte, que el partido pens¨® que podr¨ªa controlar f¨¢cilmente y no incomodar¨ªa a la Liga. Pero los grillinos, tal y como antes hab¨ªa hecho Silvio Berlusconi, subestimaron el instinto pol¨ªtico de Salvini y la experiencia de un partido con una clase dirigente acostumbrada a gobernar el norte de Italia en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas. Solo 12 meses despu¨¦s, las tornas han cambiado y el ministro del Interior tiene la sart¨¦n por el mango.

El poder se manifiesta de distintas formas. Y el l¨ªder de la Liga anunci¨® este lunes que no tiene intenci¨®n de hacerlo valer para exigir ministerios o hacer caer al gobierno. Por ahora. Salvini promete que aprovechar¨¢ el nuevo vigor electoral para la implantaci¨®n de la agenda pol¨ªtica de la Liga, una suerte de trumpismo mediterr¨¢neo cuyas medidas econ¨®micas y sociales hab¨ªa vetado su socio. Ahora exigir¨¢ el inicio de las obras de la alta velocidad entre Tur¨ªn y Lyon, que los empresarios reclaman y el M5S hab¨ªa paralizado (su negativa es una las bases del coraz¨®n medioambiental del partido); m¨¢s dureza en temas de seguridad y pol¨ªtica migratoria (el resultado avala el desmantelamiento progresivo del sistema de acogida llevado a cabo este a?o); bajada radical de impuestos, con la puesta en marcha de una tarifa plana de IRPF del 15% (este lunes sostuvo que ha estudiado a fondo y piensa copiar las pol¨ªticas econ¨®micas del primer ministro de Jap¨®n, Shinzo Abe); y conceder mayor autonom¨ªa a las regiones que lo deseen, un anhelo de los votantes de la vieja Liga Norte, que todav¨ªa insufla ox¨ªgeno al nuevo partido en el norte de Italia.

El M5S, muy tocado

El M5S dif¨ªcilmente podr¨¢ oponerse. El partido y su l¨ªder, Luigi Di Maio, est¨¢n completamente groguis. Han perdido nos seis millones de votos y la Liga les ha pasado por encima incluso en regiones como Calabria, una de las zonas m¨¢s pobres del pa¨ªs donde un partido que hace apenas dos a?os despreciaba el sur del pa¨ªs (les llamaba paletos) ha sido el m¨¢s votado. Los grillinos deber¨¢n tragar con muchas de esas imposiciones. Lo normal ser¨ªa que el desgaste y la imagen de debilidad que supondr¨¢ aceptar medidas que atentan contra la naturaleza del partido, sumado a la tensi¨®n que se generar¨¢ en Italia a la vuelta del verano cuando haya que negociar los nuevos presupuestos con Bruselas (Salvini anunci¨® el lunes que tambi¨¦n utilizar¨¢ su poder para forzar una modificaci¨®n de los par¨¢metros), conducir¨¢n a una situaci¨®n dif¨ªcil de gestionar. La jugada permitir¨ªa vender a la ciudadan¨ªa una situaci¨®n de ingobernabilidad que obligar¨ªa a pasar por las urnas y buscar nuevos aliados.

Los n¨²meros de las europeas permiten a Salvini mirar hacia los socios con quienes gobierna ya todo el norte de Italia: Forza Italia (FI) y Hermanos de Italia (HI). Silvio Berlusconi aguanta con pinzas el partido que fund¨®, en plena descomposici¨®n y fuga de sus votantes hacia la Liga. Giorgia Meloni (HI), en cambio, sigue creciendo acaparando un ¨¢rea posfascista ¡ªsu candidato a las europeas era Caio Julio Cesar Mussolini, nieto del dictador¡ª y ya se ha ofrecido para reconstruir la alianza de centroderecha en un posible adelanto electoral. En ning¨²n caso, coincide todo el mundo, ser¨ªa antes de oto?o.