M¨¦xico intenta frenar la ofensiva de un Trump en busca de r¨¦dito electoral

M¨¦xico busca amortiguar la en¨¦sima ofensiva de Donald Trump contra su vecino del sur, su flanco preferido para lograr r¨¦ditos electorales, el enemigo m¨¢s d¨¦bil. El Gobierno de L¨®pez Obrador, a trav¨¦s de su canciller, Marcelo Ebrard, ha tratado los ¨²ltimos d¨ªas de paliar las amenazas con decenas de reuniones para las que ha desplegado a pol¨ªticos, diplom¨¢ticos y empresarios. El encuentro de este mi¨¦rcoles entre las dos delegaciones es el inicio, admiten desde M¨¦xico, de un turbulento a?o de relaciones con Estados Unidos, en la medida en que avance la campa?a en la que Trump pretende lograr la reelecci¨®n.

¡°Cordial y respetuosa¡±. As¨ª calific¨® el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, el primer encuentro con la delegaci¨®n de Estados Unidos, liderada por el vicepresidente Mike Pence. Ambas partes se emplazaron a continuar el di¨¢logo a este jueves ¡°con el objetivo de acercar posiciones¡±, en palabras del jefe de la diplomacia mexicana. El propio Trump, a trav¨¦s de Twitter, asegur¨® que se hab¨ªa avanzado pero no lo suficiente y que si no se llegaba a un acuerdo, el lunes entrar¨ªan en vigor los aranceles a los productos mexicanos. "M¨¦xico necesita hacer m¨¢s", asegur¨®, por su parte, Pence.

El martes, desde Londres, Trump hab¨ªa dejado la cumbre herida de muerte al afirmar que ve¨ªa muy probable que los aranceles del 10 de junio entrasen en vigor y se lograse un acuerdo a posteriori. El neoyorquino busca asestar el golpe y luego empezar a hablar en serio, con la presi¨®n sobre la mesa, como hizo en la guerra comercial con China. No ha especificado p¨²blicamente sus demandas al Gobierno de L¨®pez Obrador, m¨¢s all¨¢ de reclamar ¡°medidas efectivas¡± que ¡°alivien¡± la crisis migratoria de la frontera sur.

No obstante, horas antes del encuentro entre la delegaci¨®n de Estados Unidos, encabezada por el vicepresidente Mike Pence y la mexicana, liderada por el canciller Marcelo Ebrard, que lleva en Washington desde finales de la semana pasada, se produjeron algunos gestos por parte de asesores pr¨®ximos a Trump, como Peter Navarro, que insinu¨® que el gravamen puede que no sea finalmente necesario, ya que Estados Unidos tiene m¨¢s atenci¨®n ahora de M¨¦xico sobre la pol¨ªtica migratoria.

Lo que en un principio se hab¨ªa anunciado como una reuni¨®n entre los jefes de la diplomacia de ambos pa¨ªses, Ebrard y Mike Pompeo, adquiri¨® otro perfil con la incorporaci¨®n de Pence. La presencia del vicepresidente de Estados Unidos supuso un b¨¢lsamo para la delegaci¨®n mexicana. Conscientes de la dificultad de parar la embestida de Trump, que enmarcan dentro de su campa?a para la reelecci¨®n y que varias fuentes pr¨®ximas al Gobierno de L¨®pez Obrador dan por hecho que se prolongar¨¢ durante meses, los representantes mexicanos sienten que con Pence las conversaciones adquieren otro nivel y abren una m¨ªnima posibilidad a un acuerdo.

En las reuniones previas al encuentro entre Ebrard y el vicepresidente de Trump los negociadores de la Casa Blanca s¨ª han apuntado tres grandes frentes, aunque sin abandonar del todo la vaguedad, seg¨²n informaron a este diario fuentes diplom¨¢ticas. Washington reclama que M¨¦xico refuerce la frontera con Guatemala, convertida pr¨¢cticamente en un campo de refugiados y por donde cruzan algunas de las caravanas de migrantes que enfilan hacia la frontera estadounidense. Reclama tambi¨¦n que acepte a m¨¢s solicitantes de asilo y que destine m¨¢s recursos y mano dura a la lucha contra los traficantes de personas, es decir, los llamados muleros que cobran por ayudar a cruzar la frontera a las personas que huyen de la miseria y la violencia de Centroam¨¦rica.

"Hay voluntad de acercamiento. Ambas partes reconocemos que la situaci¨®n actual no se puede mantener como est¨¢", asegur¨® Ebrard tras el encuentro de casi dos horas este mi¨¦rcoles. Las medidas tangibles que exige Trump chocan con la necesidad de M¨¦xico de navegar en varias aguas. El Ejecutivo de L¨®pez Obrador no ve mucho m¨¢s margen de maniobra en la frontera con Guatemala, que no puede militarizar, y asegura que encontrarse al l¨ªmite de su capacidad en la acogida de refugiados, pero s¨ª cree que puede ofrecer mejoras en el control de traficantes. No est¨¢ claro qu¨¦ es lo que va a contentar a la Casa Blanca, parece m¨¢s probable el cu¨¢ndo, que ser¨¢ al cabo de unos d¨ªas de tensi¨®n pol¨ªtica y comercial en la que Trump se maneja con soltura. El republicano presentar¨¢ el 18 de junio formalmente su candidatura a la reelecci¨®n y este pulso con el pa¨ªs vecino tiene algo de dej¨¤ vu, a cuando el magnate se lanz¨® a la carrera presidencial en aquel verano de 2015 en medio de un discurso insultante contra M¨¦xico.

El Gobierno de L¨®pez Obrador evitar¨¢ una respuesta rec¨ªproca a la ofensiva, que significar¨ªa aprobar un gravamen del 5% sobre todo producto que venga de EE UU, si la amenaza arancelaria de Washington se cumple tal y como se anunci¨® el jueves de la semana pasada. El Gobierno de L¨®pez Obrador est¨¢ ultimando, sin embargo, una lista de productos muchos de ellos agr¨ªcolas, como la carne de cerdo o las zarzamoras, similar a los gravados en su d¨ªa por Pe?a Nieto, seg¨²n informaron a este diario fuentes diplom¨¢ticas y confirmaron otras fuentes conocedoras de esos trabajos.

Estas tasas van dirigidas a los Estados tradicionalmente republicanos que, damnificados por la guerra arancelaria, pueden tratar de embridar al presidente. Varios senadores, como Ted Cruz, de Texas, o Ron Johnson, Wisconsin han advertido de que pueden acabar vetando los aranceles. Pero tambi¨¦n las propias empresas estadounidenses pueden llevar la medida a los tribunales si consideran que se est¨¢n malintepretando la ley. Trump aplica los aranceles alegando motivos de seguridad, pero un demandante puede discutir ante un juez que estos no resolver¨¢n la crisis migratoria.