Una respuesta solidaria en Europa
La ayuda no deber¨ªa tener condiciones que supongan volver a la austeridad
Este virus no respeta fronteras, no distingue entre color de piel ni nacionalidades. Todos compartimos el dolor de los habitantes de B¨¦rgamo, de Madrid, de Estrasburgo y de muchas otras ciudades de Italia, Espa?a y Francia. La heroica lucha de las enfermeras y enfermeros, m¨¦dicas y m¨¦dicos por salvar a los enfermos nos conmueve profundamente. La pandemia de la Covid-19 sit¨²a a todos los Estados europeos ante el mayor reto sanitario, social y econ¨®mico desde la fundaci¨®n de la Uni¨®n Europea. Una de las verdades respecto a esta terrible pandemia es el hecho de que Europa al principio no estaba preparada adecuadamente en todos los aspectos y que inicialmente no para todos los problemas encontr¨® una soluci¨®n convincente a nivel europeo. Lo importante ahora es que en el esp¨ªritu de la solidaridad ofrezcamos una respuesta europea integral. Cada uno de nuestros pa¨ªses saldr¨¢ fortalecido de esta crisis solamente si Europa emerge de ella fortalecida y unida.
La protecci¨®n de las ciudadanas y los ciudadanos es la mayor prioridad para todos nosotros en la Uni¨®n Europea. Prestar ayuda es para nosotros algo natural. Por ello aprovechamos las capacidades disponibles con las que cuenta Alemania para tratar aqu¨ª a pacientes muy graves que precisan cuidados intensivos provenientes de hospitales italianos y franceses o bien para que m¨¦dicos alemanes brinden su apoyo en Espa?a. Hemos enviado material sanitario y respiradores a Italia. Asimismo, evacuamos a bordo de aviones alemanes a miles de turistas europeos de pa¨ªses en los que la atenci¨®n sanitaria a menudo es bastante peor que en Europa.
Con el fin de ralentizar la propagaci¨®n del virus, casi todos los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea han impuesto fuertes restricciones a sus ciudadanas y ciudadanos. En muchos lugares la vida p¨²blica se ha paralizado casi por completo para evitar el contagio. Estas medidas son adecuadas. Sin embargo, implican un fuerte impacto para nuestras econom¨ªas. A ra¨ªz del cierre de almacenes, de la cancelaci¨®n de eventos y del cese temporal de la producci¨®n en algunas f¨¢bricas, millones de europeas y europeos temen por su empleo, por su empresa y su existencia. Los Estados miembros tienen distintos m¨¢rgenes financieros para afrontar esta crisis econ¨®mica provocada por causas de fuerza mayor.
Pr¨¢cticamente todos los Estados miembros de la Uni¨®n Europea ya han establecido programas de ayuda para proteger a los empleados y a las empresas. En todos los pa¨ªses se pusieron a disposici¨®n enormes cantidades en el plazo m¨¢s breve posible con el fin de proporcionar a las empresas y a los negocios cr¨¦ditos puente urgentes y para apoyar a las ciudadanas y ciudadanos sin muchos tr¨¢mites burocr¨¢ticos. No obstante, esto no es suficiente. Los padres y madres fundadores de Europa sab¨ªan que la solidaridad no es una calle de un solo sentido, sino que es un seguro de vida para nuestro continente. En esta crisis hist¨®rica debemos actuar con este esp¨ªritu. Necesitamos dar una se?al inequ¨ªvoca de la solidaridad europea en esta pandemia por coronavirus. Alemania est¨¢ dispuesta a ello. Ahora, la tarea conjunta de Europa ser¨¢ flanquear los programas existentes, cubrir lagunas y extender una red de seguridad para todos los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea que requieren m¨¢s ayuda. En Bruselas ya se han flexibilizado sustancialmente los criterios del Pacto de Estabilidad y las normas sobre ayudas. Con el anuncio de un nuevo programa de compra de bonos p¨²blicos y corporativos, el Banco Central Europeo (BCE) logr¨® generar estabilidad en el mercado financiero. Asimismo, los Estados miembros afectados reciben otras ayudas por miles de millones de euros a partir de fondos presupuestarios especiales de la Uni¨®n Europea.
Ahora es necesario dar un paso m¨¢s: los pa¨ªses m¨¢s afectados por la crisis del coronavirus tienen que ser estabilizados financieramente de manera r¨¢pida, ¨¢gil y en la medida de lo necesario. Por consiguiente, proponemos que procuremos lograr obtener r¨¢pidamente y de forma conjunta la suficiente liquidez en todos los pa¨ªses de la Uni¨®n Europea para evitar que el mantenimiento de los puestos de trabajo dependa de los caprichos de especuladores. En este sentido, los fondos financieros no deber¨¢n estar supeditados a requisitos innecesarios, que supondr¨ªan una reca¨ªda en la pol¨ªtica de austeridad similar a la que se aplic¨® despu¨¦s de la crisis financiera implicando que algunos Estados miembros reciban un trato desigual.
Actualmente, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) ya ofrece la posibilidad de que los pa¨ªses de la eurozona obtengan capital conjuntamente y con las mismas condiciones favorables. Para Espa?a esto significar¨ªa 28.000 millones de euros de nuevos fondos. Estos recursos deber¨ªan poder ser utilizados para todas las medidas necesarias destinadas a combatir el coronavirus. No necesitamos ninguna troika ni controladores ni ninguna comisi¨®n que elabore programas de reforma para un pa¨ªs determinado, sino ayuda ¨¢gil y bien enfocada. Eso es justamente lo que puede ofrecer el Mede si lo seguimos desarrollando con sensatez.
Asimismo, proponemos un fondo de garant¨ªa paneuropeo que pueda asegurar cr¨¦ditos y con el que el Banco Europeo de Inversiones (BEI) pueda proporcionar liquidez a las peque?as y medianas empresas en los respectivos pa¨ªses. Con ello se podr¨ªan asegurar financiamientos puente, periodos de cr¨¦dito m¨¢s prolongados y nuevos cr¨¦ditos a trav¨¦s de bancos comerciales nacionales o de instituciones de fomento. Adem¨¢s, mediante el proyecto SURE (Support Mitigating Unemployment Risks in Emergency), presentado ahora por la Comisi¨®n Europea, es posible brindar apoyo financiero a Estados miembros de la Uni¨®n Europea que ayudan a las empresas de forma similar a lo previsto en la normativa alemana sobre desempleo parcial, con el objeto de que conserven a sus empleados a pesar de una crisis coyuntural.
Finalmente, una vez superada la crisis habr¨¢ que reconducir la econom¨ªa europea a la senda de la recuperaci¨®n y el crecimiento. En este contexto, los Estados miembros de la UE habremos de actuar con solidaridad europea y aunando fuerzas para fortalecer a la Uni¨®n Europea. Todos nosotros, tambi¨¦n Alemania, tendremos en cuenta esto durante las negociaciones del marco financiero plurianual, es decir, el presupuesto de la Uni¨®n Europea para los pr¨®ximos siete a?os.
Todo lo anterior sin duda supone un enorme esfuerzo financiero para todos nosotros. Sin embargo, estamos seguros de que juntos podremos superar esta crisis hist¨®rica. Y m¨¢s a¨²n: si Europa ahora da los pasos id¨®neos, la UE, nuestra comunidad de destino, saldr¨¢ fortalecida de esta crisis. Un¨¢monos en pro de Europa, en contra del virus.
Heiko Maas es ministro de Exteriores del Gobierno alem¨¢n y Olaf Scholz es vicecanciller y titular de Finanzas.
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