La carrera desesperada por salvar del coronavirus a los inmigrantes detenidos en Estados Unidos

En la prisi¨®n para inmigrantes de Adelanto, California, los detenidos duermen en literas en grupos de seis. Comparten lavabo, v¨¢ter y ducha. En las ¨¢reas comunes se juntan 60 o 70 internos. A la hora de comer, se sientan juntos, pr¨¢cticamente toc¨¢ndose. Ni los guardias, ni los detenidos, ni los trabajadores de la cafeter¨ªa llevan guantes o mascarillas. Esta es la situaci¨®n que se describe en la demanda para pedir a un juez que sacara de all¨ª a Enrique Francisco Hern¨¢ndez, un inmigrante mexicano con problemas de salud. Antes tem¨ªa su deportaci¨®n. Ahora teme enfermar de coronavirus.

En las c¨¢rceles de inmigrantes de Estados Unidos hay 32.000 personas. Hasta el viernes, se hab¨ªan registrado 124 contagiados de covid-19 entre los presos y 30 entre los guardias en 25 prisiones por todo el pa¨ªs. ¡°Los m¨¦dicos advierten de un escenario polvor¨ªn, por la expansi¨®n de la covid-19 en los centros de detenci¨®n de inmigrantes¡±, admite la sentencia del juez que, el pasado 1 de abril, dio la raz¨®n a Hern¨¢ndez y orden¨® a la polic¨ªa de inmigraci¨®n (ICE, por sus siglas en ingl¨¦s) que lo liberara de Adelanto y lo dejara en arresto domiciliario.

Hern¨¢ndez tiene 43 a?os y diversas patolog¨ªas previas, como hipertensi¨®n y gota. Es una persona de riesgo. ¡°Si el Gobierno no provee a un detenido de sus necesidades humanas b¨¢sicas, incluida una seguridad razonable y cuidado m¨¦dico, se est¨¢ violando el debido proceso¡±, recuerda el juez del distrito Central de California Terry Hatter. No solo se trata de proteger a Hern¨¢ndez. Dejarlo en libertad ¡°va completamente a favor del inter¨¦s general¡±, afirma. ¡°La ciudadan¨ªa tiene un inter¨¦s fundamental en prevenir la expansi¨®n del coronavirus. Un brote en Adelanto nos pondr¨ªa en peligro a todos, a los detenidos, a los guardias, a los residentes del condado y de California y al pa¨ªs entero¡±.

La decisi¨®n del juez Hatter sienta un precedente y lleva esperanza a al menos una decena de demandas que ya est¨¢n en los juzgados por todo Estados Unidos. ¡°Nos llaman clientes muy preocupados porque dentro de la prisi¨®n es imposible seguir las reglas de distanciamiento social dictadas por el gobernador y por el Centro para el Control y la Prevenci¨®n de Enfermedades¡±, explica Lisa Okamoto, abogada de la organizaci¨®n Immigrant Defenders en Los ?ngeles.

En concreto, en Adelanto, ¡°el tipo de persona que est¨¢ all¨ª es el que ha cruzado la frontera para pedir asilo y sin antecedentes criminales, y tambi¨¦n gente que lleva mucho tiempo aqu¨ª¡±. Es decir, ni siquiera son delincuentes peligrosos. La ¨²nica raz¨®n para estar encerrados es no tener papeles. ¡°La prioridad es sacar a los que tienen problemas de salud, pero queremos sacar a todos¡±, dice Okamoto. Hasta la semana pasada hab¨ªan logrado ¨®rdenes judiciales de liberaci¨®n de cuatro inmigrantes.

¡°El caso m¨¢s preocupante es la prisi¨®n de Otay Mesa (junto a la frontera de San Diego) porque all¨ª ya hay varios casos detectados¡± de coronavirus, asegura Monika Langarica, abogada en San Diego de la Uni¨®n Americana por las Libertades Civiles (ACLU). Esta organizaci¨®n est¨¢ presentando demandas por todo el pa¨ªs. ¡°Ya hay ¨®rdenes de liberaci¨®n en todas partes. Est¨¢ funcionando¡±.

La polic¨ªa de inmigraci¨®n ICE no reconoce un problema generalizado en las c¨¢rceles. S¨ª publica las cifras de casos confirmados en su sistema. Los peores brotes se est¨¢n viendo en el centro de Otay Mesa, California, donde hay 18 infectados, y en el de Richmond en Monroe, Louisiana, donde hay 20. ACLU present¨® la demanda para sacar a varios presos de Otay el viernes 3 de abril. Era la novena que presentaban. Algunos grupos de defensa de los inmigrantes est¨¢n publicando en las redes llamadas de tel¨¦fono de internos desesperados suplicando que les saquen de all¨ª para no enfermar. El grupo Pueblo Sin Fronteras, que trabaja en Tijuana, asegura que ha comenzado una huelga de hambre en el centro de Otay.

En esos lugares ¡°es imposible mantener la distancia f¨ªsica¡±. El pasado d¨ªa 9, un juez de Sacramento (California) orden¨® la liberaci¨®n de otros dos detenidos y cit¨® en su decisi¨®n el caso del portaviones nuclear USS Theodore Roosevelt. El capit¨¢n del portaviones envi¨® una carta pidiendo ayuda para desembarcar a m¨¢s de 4.000 marineros despu¨¦s de que un centenar dieran positivo por coronavirus, argumentando precisamente la imposibilidad de mantener la distancia.

En un comunicado, ICE ha informado que est¨¢ ¡°revisando casos de individuos detenidos que pueden ser vulnerables al virus¡±. ¡°ICE puede colocar a individuos en algunas alternativas a la detenci¨®n¡±, asegura, pero es una decisi¨®n que se har¨¢ ¡°caso por caso¡±. La agencia policial asegura que ha dado instrucciones a sus jefes de zona para que revisen los casos de mayores de 60 a?os, mujeres embarazadas y personas de riesgo para ver si pueden liberarlos. Hasta el 30 de marzo, hab¨ªan identificado a 600 personas como ¡°vulnerables¡± y 160 de ellas hab¨ªan sido liberadas.