Bielorrusia, una protesta masiva pero poco organizada
La improvisaci¨®n y la falta de criterios para formar el ¨®rgano interlocutor con Lukashenko lastran a la oposici¨®n
En las ciudades bielorrusas hay protestas masivas y en muchas f¨¢bricas del pa¨ªs los obreros se han declarado en huelga. Sin embargo, en las estructuras que se forman y se postulan para negociar sobre el futuro con el l¨ªder Alexandr Lukashenko hay improvisaci¨®n, faltan criterios claros y eficacia organizativa.
Esta es la impresi¨®n que obtuvo EL PA?S como resultado de tres conversaciones telef¨®nicas con tres personas cr¨ªticas con el r¨¦gimen (un pol¨ªtico, un polit¨®logo y el dirigente de una asociaci¨®n de periodistas). Para empezar, el r¨¦gimen, de momento, no est¨¢ dispuesto a negociar nada y las estructuras en gestaci¨®n, aparte de los problemas internos para ponerse en marcha, se enfrentan con la falta del interlocutor.
El lunes, Olga Kovalkova, apoderada de la candidata presidencial Svetlana Tijan¨®vskaya, dio a conocer una lista de m¨¢s de una treintena de personas (en una versi¨®n 34 y en otra 36), que forman el llamado ¡°consejo provisional¡± destinado a ¡°elaborar un mecanismo para asegurar la transferencia del poder¡± en Bielorrusia. En la lista, que incluye a la premio N¨®bel de Literatura Svetlana Aleksi¨¦vich predominan personas del mundo de la cultura (literatura, cine, arte, m¨²sica), bastantes empresarios, juristas y activistas de derechos humanos y pol¨ªticos. De las grandes f¨¢bricas en huelga solo era posible identificar a un miembro, presentado como Sergu¨¦i Makeikov, ¡°delegado¡± de una f¨¢brica de tractores. Los confeccionadores de la lista, elaborada por encargo de Tijan¨®vskaya, quieren aumentar el n¨²mero de sus integrantes hasta 65, pero se dan tambi¨¦n otras cifras. ¡±El consejo coordinador no se ha acabado de formar y es uno de los muchos organismos que se han creado y que son poco eficaces para mantener conversaciones, aunque, del otro lado (Lukashenko) tampoco vemos a nadie que quiera dialogar¡±, dijo Andr¨¦i Bastunets, presidente de la asociaci¨®n de periodistas de Bielorrusia.
¡°Lukashenko no quiere irse y a su alrededor todos se mantienen firmes, aunque hubo algunas excepciones como el exministro de cultura o el embajador en Eslovaquia¡±, se?al¨® Bastunets, que dijo ser ¨¦l mismo parte del consejo. El presidente de la asociaci¨®n de periodistas afirma sentirse ¡°esc¨¦ptico ante estas organizaciones impregnadas de populismo que se est¨¢n formando¡±. ¡°Falta un mecanismo real. No veo que se efect¨²e una coordinaci¨®n efectiva¡±, se?ala. En su opini¨®n, ¡°esta semana puede ser decisiva¡± y ¡°habr¨¢ que ver si hace huelga la televisi¨®n estatal, donde hay mucha gente indecisa porque fueron muchos los periodistas que recibieron pisos y prebendas del r¨¦gimen¡±.
¡°Hasta ahora¡±, afirma Bastunets, ¡°el di¨¢logo con las autoridades ha sido una imitaci¨®n sin consecuencias, protagonizado por ministerios como el de Informaci¨®n y Cultura¡±. En su opini¨®n ¡°en las f¨¢bricas hay verdaderas protestas pero no huelgas en el sentido cl¨¢sico¡±.
¡°Queremos que haya cincuenta miembros en este consejo que se forma por mandato de Tijan¨®vskaia, nuestra presidenta electa, quien, como ¨²nica autoridad leg¨ªtima, tendr¨¢ que ratificar la lista final¡±, afirma Anatoli Lebedko, jefe del partido Civil Unido de Bielorrusia y veterano activista que ha pasado muchas veces por prisi¨®n. Explica Lebedko que, adem¨¢s del consejo, se formar¨¢ un ¡°comit¨¦ de tres parlamentarios encargados de conversar con el r¨¦gimen para la entrega del poder, y este comit¨¦ comenzar¨¢ por negociar la liberaci¨®n de los presos pol¨ªticos y represaliados¡±. ¡°Estas conversaciones ser¨ªa mejor mantenerlas con intermediarios como la UE, la OSCE y otras organizaciones parlamentarias¡±, a?ade. El consejo decidi¨® no dar a conocer los nombres de las personas que formar¨¢n el tr¨ªo parlamentario, informa.
En las listas de Tijan¨®vskaya no figura el candidato electoral Valeri Tsepkalo, que se vio obligado a huir, ni su esposa Veronika. Se da la circunstancia de que Tsepkalo, un diplom¨¢tico, hab¨ªa exhortado a formar un comit¨¦ de unidad nacional. ¡°El consejo de coordinaci¨®n est¨¢ integrado preferentemente por personas residentes en Bielorrusia¡±, puntualiza Lebedko.
¡°Tenemos dos olas de protesta paralelas que no se cruzan. Por una parte, las huelgas en las empresas y por la otra la gente que sale a la calle. La verdadera amenaza para Lukashenko son los obreros¡±, dice el polit¨®logo Sergu¨¦i Marts¨¦lev. ¡°En el consejo de coordinaci¨®n no hay representaci¨®n de un ¨®rgano coordinador de todas las empresas en huelga¡±, afirma Marts¨¦lev, que en el pasado fue jefe de equipo del socialdem¨®crata Nikol¨¢i Statkevich, actualmente encarcelado. En su opini¨®n, ¡°las huelgas en Bielorrusia son gigantes y en ellas participan decenas de miles de personas, pero no se puede hablar todav¨ªa de una huelga de todo el Estado¡±. Afirma el polit¨®logo que las estructuras administrativas del r¨¦gimen son ¡°bastante ¡°monol¨ªticas y no se han escindido y el movimiento obrero carece a¨²n de l¨ªderes¡±. ¡°Tampoco hay un l¨ªder del movimiento ciudadano porque Tijan¨®vskaya no puede perfilarse como l¨ªder desde la emigraci¨®n¡±, puntualiza. ¡°La gente no comprende el consejo coordinador, no sabe con qu¨¦ criterios se ha formado¡±, afirma.
De acuerdo con el art¨ªculo 89 de la Constituci¨®n de Bielorrusia, si Lukashenko abandona su puesto, el poder pasar¨ªa al jefe de Gobierno, recuerda Marts¨¦lev, si bien no ser¨ªa el caso con el actual, Rom¨¢n Golovchenko, al estar en funciones. Lukashenko ya ha calificado el consejo coordinador como un intento de ¡°tomar el poder con todas las consecuencias que de ello se deriva¡±.
En el mes de junio, Lukashenko renov¨® el Gobierno, y el actual primer ministro, que se form¨® en el Instituto de Relaciones Internacionales de Mosc¨², hab¨ªa sido jefe del comit¨¦ de la industria militar y embajador en pa¨ªses como los Emiratos ?rabes Unidos, Qatar, Kuwait y Arabia Saud¨ª. Seg¨²n Marts¨¦lev, Golovchenko est¨¢ relacionado con V¨ªctor Sheiman, un estrecho y veterano colaborador de Lukashenko que fue secretario del consejo de seguridad y jefe de la administraci¨®n presidencial y uno de los art¨ªfices de la pol¨ªtica Bielorrusia en relaci¨®n a Venezuela. Tanquista de formaci¨®n y veterano de la guerra de la URSS en Afganist¨¢n, Sheiman es considerado un miembro del sector duro y sigue siendo un asistente de Lukashenko.
¡°Tenemos una gran oportunidad, porque se mantiene la movilizaci¨®n y existe la voluntad de cambio, pero no hay un l¨ªder y hay un ¨®rgano no constitucional incomprensible con gente muy diferente¡±, se?ala Marts¨¦lev, quien teme que al final ¡°tengamos que negociar una nueva constituci¨®n con Lukashenko y todas las modestas libertades que conseguimos se ver¨¢n ahogadas porque Lukashenko no necesita gente libre, sino gente sumisa, incluso esclavos¡±. Pronostica que, en ese caso, ¡°los m¨¢s j¨®venes, los m¨¢s capaces y con m¨¢s talento se marchar¨¢n de Bielorrusia¡±. Bastunets va m¨¢s lejos y teme que se pueda producir una emigraci¨®n masiva.
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