¡°Las vulneraciones del Estado de derecho en Polonia y Hungr¨ªa son un problema sist¨¦mico¡±
El titular de Justicia explica que la Comisi¨®n no descarta proteger por ley a los periodistas frente a la escalada de agresiones en la UE
Didier Reynders (Lieja, 62 a?os) es uno de los pol¨ªticos con m¨¢s experiencia del Gabinete de la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen. Tras haber sido ministro en varios Ejecutivos belgas, este pol¨ªtico liberal es ahora comisario europeo de Justicia. Reynders recibe a EL PA?S pocos d¨ªas despu¨¦s de haber publicado el primer informe sobre el Estado de derecho en la Uni¨®n Europea, que vuelve a apuntar a un deterioro de la independencia judicial y el pluralismo informativo en Polonia y Hungr¨ªa.
Pregunta. ?Los poderes extraordinarios que han asumido los Gobiernos para hacer frente a la pandemia han derivado en un retroceso del Estado de derecho en la UE?
Respuesta. La pandemia ha sido una prueba sobre la resiliencia de los pa¨ªses sobre el Estado de derecho. Durante la pandemia hemos visto un traspaso de competencias de los parlamentos a los gobiernos. Y es l¨®gico cuando hay que tomar decisiones r¨¢pidas. En algunos pa¨ªses hab¨ªa un control del Parlamento, que pod¨ªa negarse, e incluso de los tribunales. En otros, hemos expresado preocupaciones. En el caso de Hungr¨ªa, el estado de emergencia no ten¨ªa l¨ªmite temporal y tuvimos problemas con algunas disposiciones penales adoptadas para castigar presuntas desinformaciones. En Polonia hubo la intenci¨®n de celebrar elecciones presidenciales sin que hubiera una campa?a real. Pero finalmente se hall¨® una salida gracias a la presi¨®n, no solo de la Comisi¨®n Europea.
P. Pero la pandemia no ha finalizado. ?Han detectado alguna otra deriva?
R. Estamos siguiendo la situaci¨®n en todos los pa¨ªses, porque a¨²n hay estados y medidas de emergencia. Es importante que los parlamentos y el sistema judicial est¨¦n alerta y reaccionen, si es necesario. Y nuestro trabajo es ir a los tribunales si tambi¨¦n lo es. Recuerdo que ha sido durante los estados de emergencia cuando algunos Estados han vulnerado la ley europea, en concreto la que protege los derechos de los pasajeros, lo que nos oblig¨® a intervenir.
P. Se ha referido a Hungr¨ªa y Polonia, que son los dos pa¨ªses con m¨¢s fisuras en su Estado de derecho. ?Qu¨¦ clase de democracia est¨¢n construyendo?
R. No se puede decir que no sean democracias porque hay un proceso democr¨¢tico. En algunos Estados miembros tenemos preocupaciones, pero en otros m¨¢s que eso. Se trata de un problema sist¨¦mico m¨¢s amplio. En Polonia se trata de la independencia judicial y de la discriminaci¨®n, por ejemplo, a personas transg¨¦nero o al colectivo LGTBI+. Las preocupaciones son m¨¢s importantes porque tenemos la certeza de que hay un riesgo sist¨¦mico.
P. Ya hemos visto la dificultad de sancionar mediante el art¨ªculo 7 a ambos pa¨ªses. ?Cree que se podr¨¢ hacer mediante el presupuesto de la UE?
R. Tenemos varios instrumentos y queremos otro para proteger el presupuesto europeo del fraude o la corrupci¨®n mediante la fiscal¨ªa general de la UE.
P. Pero la fiscal no podr¨¢ actuar ni en Hungr¨ªa ni Polonia porque esos pa¨ªses no se han adherido a esa instituci¨®n...
R. Para eso tenemos otra propuesta m¨¢s de la Comisi¨®n para proteger el presupuesto ante un incumplimiento generalizado del Estado de Derecho. De acuerdo, tenemos problemas en algunos pa¨ªses miembros. Pero hemos visto reformas, por ejemplo, en el sistema judicial de Malta que vamos a seguir. Es complicado apreciarlo porque ha ocurrido a ra¨ªz del golpe por el asesinato de una periodista, las turbulencias pol¨ªticas en el pa¨ªs y la presi¨®n de Bruselas y la sociedad civil. No digo que sea perfecto, pero el cambio es posible.
P. En el caso de Espa?a, se?alan la falta de renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial. ?Espera que el Parlamento espa?ol adopte medidas para abordarlo?
R. Lo espero. Entiendo que es complicado alcanzar un acuerdo entre los principales partidos pol¨ªticos sobre la renovaci¨®n, pero llevamos desde 2018. Hemos expresado una preocupaci¨®n mayor sobre esa situaci¨®n en otros pa¨ªses miembros. Eso significa que si eso persiste, cuando se debata sobre la situaci¨®n de Hungr¨ªa o Polonia los gobiernos de esos pa¨ªses podr¨¢n escudarse en que ese asunto en Espa?a a¨²n no se ha solucionado. Y en el caso de Espa?a no es el mismo problema sist¨¦mico, sino que es muy puntual.
P. En Espa?a destacan el aumento de ataques a periodistas. ?A qu¨¦ los atribuyen?
R. En Europa hay una tendencia negativa sobre la libertad de prensa y el lugar de los medios y los periodistas. Hay varios motivos. El primero al que debemos prestar atenci¨®n es econ¨®mico, a causa de la irrupci¨®n de nuevas plataformas o el papel de Google y el coste de la digitalizaci¨®n. Eso supone que para proteger el pluralismo tal vez haya que ayudar a la prensa, de una manera equitativa. M¨¢s all¨¢ de esto, hemos visto agresiones, intimidaciones y asesinatos en Malta o la Rep¨²blica Checa. Y tambi¨¦n c¨®mo en algunos pa¨ªses hay entre 20 o 30 actuaciones abiertas contra los mismos periodistas de investigaci¨®n.
P. ?La Comisi¨®n puede hacer algo?
R. Estamos haciendo un mapa de la situaci¨®n, pero tambi¨¦n pensando en medidas, si son necesarias, legislativas. O en crear un pool de abogados y expertos a nivel europeo para ponerlo a disposici¨®n de los afectados.
P. En el informe sobre Espa?a no hay ni una palabra sobre el juicio del proc¨¦s. ?Significa eso que no hay preocupaci¨®n en la Comisi¨®n?
R. Lo hemos seguido muy de cerca, pero es un asunto interno. Y tenemos plena confianza en la independencia judicial y en el orden constitucional espa?ol. Y como se desprende del informe, no es un pa¨ªs donde haya un elevado grado de preocupaci¨®n sobre la independencia judicial, salvo por la cuesti¨®n del fiscal general.
P. El eurodiputado Carles Puigdemont ha denunciado que no haya incluido ninguna de las 13 contribuciones que le hicieron llegar sobre el juicio...
R. Hemos recibido observaciones de grupos de inter¨¦s al respecto y las hemos publicado porque hemos querido ser transparentes. No est¨¢n en el informe porque no consideramos que sea un problema sist¨¦mico. Es un problema interno de Espa?a, que debe gestionarse de acuerdo con su orden constitucional.
P. ?Est¨¢ entre sus planes reformar la euroorden?
R. Con los n¨²meros que tenemos, vemos que suben las ¨®rdenes, pero tambi¨¦n las respuestas positivas. S¨¦ del caso Puigdemont, pero es una excepci¨®n. Y un caso muy espec¨ªfico no nos puede llevar a decir que no funciona. Estoy abierto a llevar el asunto al Consejo si hay una mayor¨ªa parlamentaria para la reforma. Pero me da miedo abrir la caja de Pandora y que lleguen much¨ªsimos cambios para uno de los mejores instrumentos que tenemos.
P. ?Cree que los pa¨ªses no ser¨ªan tan ambiciosos como lo fueron en su d¨ªa en el alcance de la orden?
R. Es el riesgo. Por ello, estamos m¨¢s sobre la implementaci¨®n que en abrir la puerta a un debate general para algunos cambios. Y ah¨ª tiene que ver el Estado de derecho tambi¨¦n. Por ejemplo, los jueces de ?msterdam rechazaron extradiciones a Polonia y ahora Varsovia hace lo mismo. Sin confianza ser¨¢ dif¨ªcil organizar una cooperaci¨®n entre pa¨ªses, pero desde hace unos meses hemos recibido comentarios de varias empresas que nos dicen que no invierten porque no conf¨ªan en acudir a la justicia de alg¨²n Estado en caso de problemas con las autoridades.
P. ?Prepara la Comisi¨®n un expediente contra Alemania por la sentencia contra el programa de compra de deuda del Banco Central Europeo?
R. La presidenta ha dicho que hemos de garantizar la primac¨ªa del Tribunal de Justicia de la Uni¨®n Europea (TJUE) y la independencia del Banco Central Europeo y ha pedido consejo a los servicios legales porque para ir al TJUE necesitamos tener una base legal s¨®lida. As¨ª que hay que verlo.
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