Emiratos ?rabes quiere ir a la luna

Emiratos ?rabes Unidos (EAU) anunci¨® a finales de septiembre el env¨ªo de una nave espacial a la luna con un veh¨ªculo de exploraci¨®n para 2024. El proyecto, tras el reciente lanzamiento de una sonda a la ¨®rbita de Marte con ayuda de Estados Unidos, es el ¨²ltimo ejemplo de las ambiciones de este peque?o y rico pa¨ªs ¨¢rabe ribere?o del golfo P¨¦rsico. A punto de celebrar el 50? aniversario de su nacimiento el pr¨®ximo a?o, EAU aspira a ver reconocida su proyecci¨®n diplom¨¢tica, econ¨®mica y militar con un puest...

Emiratos ?rabes Unidos (EAU) anunci¨® a finales de septiembre el env¨ªo de una nave espacial a la luna con un veh¨ªculo de exploraci¨®n para 2024. El proyecto, tras el reciente lanzamiento de una sonda a la ¨®rbita de Marte con ayuda de Estados Unidos, es el ¨²ltimo ejemplo de las ambiciones de este peque?o y rico pa¨ªs ¨¢rabe ribere?o del golfo P¨¦rsico. A punto de celebrar el 50? aniversario de su nacimiento el pr¨®ximo a?o, EAU aspira a ver reconocida su proyecci¨®n diplom¨¢tica, econ¨®mica y militar con un puesto en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

La nave espacial va a ser totalmente fabricada en Emiratos y por ingenieros emirat¨ªes, seg¨²n ha asegurado su vicepresidente y primer ministro, el jeque Mohamed Bin Rashid al Maktum. El proyecto tiene como objetivo estudiar aspectos de la superficie lunar como sus componentes, formaci¨®n y propiedades t¨¦rmicas. Para ello, su veh¨ªculo lunar aterrizar¨¢ en un ¨¢rea del sat¨¦lite terrestre que no ha sido explorada por ninguna de las misiones anteriores. Adem¨¢s, el proyecto emirat¨ª tambi¨¦n quiere probar nuevas tecnolog¨ªas en ciencia de materiales, rob¨®tica, movilidad, navegaci¨®n y comunicaciones. Pero, sobre todo, aspira a convertir a EAU en el cuarto pa¨ªs que alcanza la luna, tras Estados Unidos, la Uni¨®n Sovi¨¦tica y China. Israel lo intent¨® sin ¨¦xito el a?o pasado.

¡°Las ambiciones espaciales de Emiratos reflejan la esencia de sus aspiraciones. Pocos pa¨ªses pueden permitirse una carrera espacial y Emiratos es el ¨²nico de entre los ¨¢rabes. Para [sus l¨ªderes] es crucial proyectar esa imagen de ¨¦xito, riqueza, poder y excelencia porque buscan que los j¨®venes y los dirigentes de otros pa¨ªses de la zona deseen parecerse a Emiratos y reforzar las relaciones con ellos¡±, interpreta Cinzia Bianco, investigadora especializada en el Golfo del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores. Algo ya han conseguido. Por noveno a?o consecutivo, EAU encabeza la lista de pa¨ªses que los j¨®venes ¨¢rabes elegir¨ªan para vivir, por delante de Estados Unidos, Canad¨¢ o cualquiera de los europeos, seg¨²n una reciente encuesta de la consultora ASDA¡¯A BCW.

Los gobernantes emirat¨ªes admiten esas ambiciones. ¡°Queremos ser un actor global¡±, ha dicho el ministro de Estado de Asuntos Exteriores, Anwar Gargash, portavoz habitual del Gobierno que, aunque formalmente est¨¢ bajo la batuta del jeque Mohamed Bin Rashid (tambi¨¦n emir de Dub¨¢i), en realidad controla el jeque Mohamed Bin Zayed al Nahyan, pr¨ªncipe heredero de Abu Dhabi, el emirato con mayor peso de los siete que forman la federaci¨®n. Y para ello est¨¢n dispuestos a romper barreras y asumir riesgos estrat¨¦gicos como han dejado patente este verano con el establecimiento de relaciones con Israel, rompiendo el consenso ¨¢rabe de no hacerlo hasta que no hubiera un Estado palestino.

¡°Quieren mostrar que son un socio estrat¨¦gico para Estados Unidos; es posible que les sirva para equilibrar sus relaciones con Ir¨¢n, e incluso frente a Arabia Saud¨ª si en el futuro llegara a surgir un conflicto entre ambos¡±, apunta Abdullah Baabood, especialista oman¨ª en asuntos del Golfo y profesor visitante en la Universidad de Waseda (Jap¨®n). M¨¢s all¨¢ de los beneficios tecnol¨®gicos y comerciales de esa alianza que subrayan los dirigentes emirat¨ªes en sus declaraciones, Baabood insiste en su valor pol¨ªtico. ¡°Lo ven como un seguro que puede ayudarles en su conflicto con Qatar o ante la mala prensa que les ha generado la campa?a [militar] en Yemen¡±, asegura.

EAU se uni¨® a Arabia Saud¨ª cuando en 2015 el pr¨ªncipe Mohamed Bin Salm¨¢n decidi¨® intervenir en la guerra civil de Yemen. Esa participaci¨®n, con despliegue de tropas en el sur de ese pa¨ªs, le ha costado al menos un centenar de muertos y da?ado su reputaci¨®n por las acusaciones de violaciones de derechos humanos que pesan sobre las fuerzas locales que ha entrenado. Desde el a?o pasado, Abu Dabi ha reducido su implicaci¨®n en el conflicto, aunque sigue presente en Libia y Somalia, donde se enfrenta a Turqu¨ªa en una lucha que es tanto militar como ideol¨®gica. Bajo Mohamed Bin Zayed, Emiratos se ha convertido en la punta de lanza contra el islam pol¨ªtico que sus dirigentes ven como una amenaza existencial, pero que cuenta con el respaldo de Ankara y Doha.

En ese contexto, adquiere mayor relevancia el empe?o emirat¨ª en conseguir uno de los cinco puestos rotatorios del Consejo de Seguridad de la ONU que se renuevan en junio del pr¨®ximo a?o. ¡°El Consejo de Seguridad es el ¨²nico lugar en el que puedes interactuar con las potencias globales casi en pie de igualdad. Es un prestigio incre¨ªble para un peque?o pa¨ªs que trata de comportarse como una gran potencia regional¡±, se?ala Bianco, convencida de que Emiratos busca representar al mundo ?rabe.

Baabood duda que eso sea posible dadas las divisiones que existen entre los ¨¢rabes e incluso entre las seis monarqu¨ªas del Golfo. ¡°Es un instrumento para mejorar su peso regional¡±, insiste. En su opini¨®n, para un pa¨ªs peque?o es importante mostrarse como un socio ¨²til ante las grandes potencias, pero tambi¨¦n equilibrarlo con los recursos no solo econ¨®micos y militares, sino tambi¨¦n humanos. EAU es la segunda mayor econom¨ªa del Golfo, despu¨¦s de Arabia Saud¨ª, pero casi el 90% de sus 9,5 millones de habitantes son extranjeros. ¡°Mi impresi¨®n es que EAU ha estado apostando demasiado fuerte y jugando en una liga superior, extralimit¨¢ndose tal vez de la misma forma que se acus¨® a Qatar en el pasado¡±, resume.

Bianco admite que Emiratos corre el riesgo de excederse en sus ambiciones, pero expresa su confianza en la capacidad de sus gobernantes de gestionar esa dificultad como han hecho, por ejemplo, con los puertos que controlan alrededor del mundo a pesar de carecer de la capacidad para protegerlos de ataques. ¡°Es previsible que tras la covid-19, y a pesar de que su econom¨ªa ha sido la menos da?ada del Golfo y probablemente de toda la regi¨®n, optimice su diplomacia financiera¡±, teoriza.

Reforzado por los buenos resultados de su apuesta por la innovaci¨®n y el crecimiento econ¨®mico, Emiratos ?rabes aspira a convertirse en modelo para otros pa¨ªses de la regi¨®n y, en ese proceso, cerrar el camino al islamismo. Para Bianco se trata de ¡°construir un nuevo orden regional donde EAU se convierta en una suerte de consejero geopol¨ªtico y actor importante para las estrategias econ¨®micas transnacionales, en definitiva, en el copiloto de las potencias globales en la zona¡±. Igual que en sus proyectos espaciales.