Emiratos ?rabes Unidos, un peque?o Estado con un gran ego

La huella de Emiratos se encuentra a lo largo de un rosario de puertos que van desde el golfo P¨¦rsico sobre el que se asoma hasta Limasol y Bengasi en el Mediterr¨¢neo, pasando por el sur de la pen¨ªnsula Ar¨¢biga, el cuerno de ?frica y el mar Rojo, a trav¨¦s de la presencia de DP World, el gigante emirat¨ª del sector. Pero tambi¨¦n se halla, a diferentes niveles, en los diversos conflictos abiertos en el mundo ¨¢rabe: de la guerra contra el Estado Isl¨¢mico (ISIS, por sus siglas en ingl¨¦s) en Siria a la de Libia, pasando por Sud¨¢n y Yemen, esta ¨²ltima la m¨¢s significativa de sus intervenciones (y la que m¨¢s bajas ha costado a sus tropas).

Esa ambiciosa pol¨ªtica exterior, normalmente asociada con las grandes potencias, sorprende sin embargo en un pa¨ªs del tama?o de Andaluc¨ªa y en el que apenas un mill¨®n de sus 9,5 millones de habitantes son nacionales. Tambi¨¦n supone un giro respecto a la l¨ªnea seguida desde la independencia del Reino Unido en 1971, que evitaba inmiscuirse en disputas ajenas. De ¡°peque?o Estado con un gran ego¡±, lo ha calificado Gaith Abdulla, especialista emirat¨ª en estudios del Golfo.

Dos razones principales parecen estar detr¨¢s de la nueva estrategia: La ausencia de liderazgo ¨¢rabe tras el caos que sigui¨® a las revueltas de 2011 y el temor al avance islamista en la regi¨®n, sea de car¨¢cter chi¨ª (Ir¨¢n) o sun¨ª (con grupos como los Hermanos Musulmanes o los violentos yihadistas de Al Qaeda y del Estado Isl¨¢mico). Salvo Egipto, Emiratos es el pa¨ªs que ha adoptado la l¨ªnea m¨¢s dura frente al islamismo (uno de los motivos de su rifirrafe con Qatar).

La intervenci¨®n en Yemen junto a Arabia Saud¨ª en 2015 reafirm¨® la disposici¨®n de EAU de recurrir a las armas para defender sus intereses, aunque no fueran los mismos que los de su vecino y aliado. En realidad, tanto su proyecci¨®n militar como sus inversiones econ¨®micas han ido de la mano. Emiratos ha utilizado esa guerra para expandir su poder geopol¨ªtico en la regi¨®n y establecer bases militares en el Cuerno de ?frica.

¡°Argumentar¨¢n que se han retirado por motivos estrat¨¦gicos, pero muestra que tal vez no tuvieron tanto ¨¦xito como esperaban. Sus ambiciones iban mucho m¨¢s lejos¡±, declara Abdulla a EL PA?S. En su opini¨®n, ha pesado sobre todo ¡°la reacci¨®n negativa que el conflicto est¨¢ generando en Estados Unidos y en la prensa internacional¡±. Las ONG responsabilizan a la coalici¨®n ¨¢rabe de haber provocado en Yemen una cat¨¢strofe humanitaria sin precedentes y Amnist¨ªa Internacional ha acusado a EAU de violaciones de derechos humanos en c¨¢rceles secretas bajo su gesti¨®n. Adem¨¢s, asegura el experto, el repliegue ¡°no va contra sus intereses: el Ministerio de Exteriores est¨¢ feliz de pasar a la fase de diplomacia, desde el principio buscaba una salida¡±.

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Tambi¨¦n hay analistas que estiman que Abu Dhabi se ha alarmado ante la escalada de la tensi¨®n entre Ir¨¢n y Estados Unidos de los ¨²ltimos meses y desea concentrarse en su propia seguridad. Otros opinan, sin embargo, que EAU ha conseguido su objetivo: asegurarse una zona de influencia en la costa sur y occidental de la pen¨ªnsula Ar¨¢biga a trav¨¦s de las milicias que ha entrenado y sigue financiando en el sur de Yemen.

¡°El repliegue no indica una retirada total de Yemen. EAU a¨²n est¨¢ interesado en los puertos de ese pa¨ªs, las rutas mar¨ªtimas y las islas (en especial, Socotra, a la entrada del golfo de Aden) y va a continuar apoyando y financiando a milicias y tropas locales, sobre todo en el sur", explica por correo electr¨®nico Nael Shama, un acad¨¦mico egipcio especializado en relaciones internacionales. Tampoco se?ala el fin de las ambiciones de este pa¨ªs en la regi¨®n que Shama, como otros observadores, relaciona con ¡°la visi¨®n del mundo y la percepci¨®n de las amenazas que tienen los l¨ªderes [emirat¨ªes], en especial Mohamed Bin Zayed¡±.

Mohamed Bin Zayed impulsa las capacidades defensivas

Aunque no tiene ning¨²n cargo ejecutivo en el Gobierno de EAU, el jeque Mohamed, de 58 a?os, es el hombre fuerte del pa¨ªs, incluso desde antes de que el jeque Jalifa Bin Zayed sufriera un ictus hace cinco a?os. Jalifa sigue presidiendo formalmente la federaci¨®n en cuanto emir de Abu Dhabi, el emirato con m¨¢s peso de los siete que la forman y a cuyas reservas de crudo se debe que el pa¨ªs sea el quinto exportador de petr¨®leo del mundo.

Los petrod¨®lares han permitido a Mohamed Bin Zayed desarrollar capacidades de defensa independientes convirtiendo a los Emiratos ?rabes en uno de los mayores compradores de armas y reclutador de centenares de mercenarios. Resulta significativo que MBZ (como suelen referirse a ¨¦l diplom¨¢ticos y periodistas para distinguirle de otros pr¨ªncipes con el mismo nombre) anteponga su t¨ªtulo de vicejefe de las Fuerzas Armadas de Emiratos al de heredero de Abu Dhabi.

Uno de los pilares de ese proceso ha sido la estrecha cooperaci¨®n con Washington. EAU es ¡°uno de s¨®lo tres pa¨ªses y la ¨²nica naci¨®n ¨¢rabe que ha participado con EE UU en las seis acciones de coalici¨®n de los ¨²ltimos 20 a?os: Afganist¨¢n, Libia, Somalia, Bosnia-Kosovo, la guerra del Golfo de 1990 y la lucha contra el ISIS¡±, tal como destaca la p¨¢gina web de la Embajada emirat¨ª en EE UU. Adem¨¢s, facilita apoyo log¨ªstico tanto a la Marina como a la Fuerza A¨¦rea estadounidenses, y alberga la sede de un Centro de Combate A¨¦reo Conjunto.