Marruecos avanza en su dominio del S¨¢hara Occidental

Al taxi marroqu¨ª le est¨¢ vetado acceder al paso de Guerguerat en direcci¨®n a Mauritania. Pero las autoridades marroqu¨ªes permiten que el periodista entre a pie en esa franja que estaba catalogada por la ONU como ¡°restringida¡±, con acceso prohibido para tropas y municiones. Siete d¨ªas antes, en ese mismo terreno intercambiaron disparos las fuerzas del Frente Polisario y del Ej¨¦rcito marroqu¨ª, por primera vez desde que firmaron el alto el fuego en 1991. Rabat desea mostrar que en esa zona ya no hay peligro, que circulan los camiones y todo est¨¢ bajo control. A pesar de que el Frente Polisario ha decretado el estado de guerra, tras la expulsi¨®n de los civiles saharauis.

Hay cientos de coches abandonados a un lado y a otro de una carretera de cinco kil¨®metros, entre Mauritania y Marruecos. Son restos del gran negocio que supone el contrabando de coches robados desde Europa a ?frica. Decenas de camiones aguardan su turno para continuar su camino por el S¨¢hara Occidental hacia Europa pasando antes por la aduana de Marruecos. Otros bajan hacia Mauritania. No se oye ning¨²n tiro. Tampoco por la noche, afirman los marroqu¨ªes.

Ahora, las m¨¢quinas marroqu¨ªes se afanan en retirar la chatarra y limpiar la zona. ¡°Esto va a estar irreconocible en una semana. Lo vamos a limpiar todo¡±, dice la misma fuente. ¡°Vamos a terminar de asfaltar esta carretera para que llegue hasta la aduana con Mauritania. En 2017 asfaltamos casi tres kil¨®metros. Ahora completaremos el resto. En unas dos semanas. Esta carretera es muy importante para Marruecos. Y tambi¨¦n para Espa?a y Europa. Por aqu¨ª pasa el pescado que pescan los espa?oles en Mauritania y llega a Espa?a. Y tambi¨¦n bajan muchos productos espa?oles hacia ?frica. Bajan hasta caballos espa?oles y ganado¡±.

Tambi¨¦n circulan por esa frontera, seg¨²n diversas fuentes consultadas, los coches de lujo robados en Europa, el hach¨ªs que baja desde Marruecos a Mauritania, y la coca¨ªna proveniente de Colombia, que sube desde Mauritania a Europa, pasando por el S¨¢hara Occidental. ¡°Nosotros solo queremos que se cumpla la ley¡±, se?ala la autoridad marroqu¨ª, ¡°queremos que se fomente la riqueza entre pa¨ªses, que los rebeldes del Polisario no corten m¨¢s el tr¨¢fico¡±.

Hay un ambiente alegre en la aduana marroqu¨ª, de victoria. A¨²n perduran las se?ales de la protesta de los saharauis, que manten¨ªan bloqueada la carretera desde el 21 de octubre. Todav¨ªa se ve una gran frase que pintaron en espa?ol: ¡°No a la brecha de Guerguerat¡±. Se ven los restos de las tiendas de campa?a que ellos mismos quemaron cuando los soldados marroqu¨ªes los obligaron a huir. Queda alguna lata de tomate, un paquete de caf¨¦. Y a pocos metros, los militares marroqu¨ªes.

Los soldados levantan un muro de arena a 20 kil¨®metros al este de la carretera de Guerguerat. Y adem¨¢s, est¨¢n alargando 200 kil¨®metros al este el muro que empezaron a construir en 1980 bajo el reinado de Hassan II y que recorre 2.700 kil¨®metros en el desierto. Ese muro llegar¨¢ ahora hasta la frontera con Mauritania, seg¨²n inform¨® el jefe del Gobierno, Saaded¨ªn el Otmani a la agencia Reuters. Con lo cual, la franja de Guerguerat quedar¨¢ acordonada. El Frente Polisario ya no podr¨¢ bloquear la carretera.

¡°Estamos asegurando toda la zona¡±, se?ala la m¨¢xima autoridad civil de Marruecos sobre el terreno. ¡°Y lo estamos haciendo en coordinaci¨®n con Mauritania. Los terroristas del Frente Polisario ya no podr¨¢n amenazar cada a?o con bloquear la carrera del rally Par¨ªs-Dakar, que pasa por aqu¨ª. Ya no podr¨¢n bloquear el paso de m¨¢s camiones, como han hecho estas tres semanas¡±.

El stop que hab¨ªan pintado los saharauis en el asfalto ya ha sido tachado. Y la pintada en espa?ol de ¡°no a la brecha de Guerguerat¡± tardar¨¢ muy poco en ser borrada. Para el Polisario, la batalla pol¨ªtica de la ¡°brecha¡± est¨¢ perdida, pero no la ¡°guerra¡±. El representante del Frente Polisario ante la Uni¨®n Europea, Oubi Bouchraya, se?ala en conversaci¨®n telef¨®nica desde Bruselas: ¡°Para nosotros el Guerguerat era de suma importancia pol¨ªtica hasta el 13 de noviembre. Era una muestra de la pasividad de la Minurso [la Misi¨®n de Naciones Unidas para el Refer¨¦ndum del S¨¢hara Occidental] ante una brecha ilegal y de la arrogancia de Marruecos para hacer lo que le da la gana. Pero ahora, nuestros objetivos var¨ªan, ya no son pol¨ªticos, sino basados en c¨¢lculos militares. El Guerguerat es solo una parte de los m¨¢s de 2.700 kil¨®metros que van desde el norte al sur en el S¨¢hara Occidental. Y estamos haciendo ataques puntuales a lo largo de ese territorio¡±.

Bouchraya a?ade que ¡°la maquinaria de guerra del Polisario¡± no ha hecho m¨¢s que arrancar, est¨¢ ¡°calentando motores¡±. ¡°Marruecos se instala en la l¨®gica de negar los ataques. Todo el mundo sabe que ha habido v¨ªctimas mortales en el Ej¨¦rcito marroqu¨ª, pero no lo ha negado. Es solo cuesti¨®n de tiempo que comience a reconocerlo¡±.

El tr¨¢fico de personas y mercanc¨ªas comenz¨® en Guerguerat a partir de 2001. Poco a poco fue aumentando. En 2005 Marruecos instal¨® su aduana y unos cuatro kil¨®metros al sur Mauritania instal¨® la suya en 2010. Solo cuando Marruecos empez¨® a asfaltar la carretera en 2016 y 2017 el Frente Polisario decidi¨® bloquear la carretera para denunciar lo que considera un ¡°expolio¡± de los recursos naturales del S¨¢hara Occidental por parte de Marruecos.

Su representante ante la Uni¨®n Europea se?ala: ¡°A menudo nos preguntan por qu¨¦ no protestamos en su d¨ªa contra la brecha. Hay que tener en cuenta que se abri¨® en 2001, cuando hab¨ªa un proceso pol¨ªtico en marcha liderado por el estadounidense James Baker [enviado de la ONU para el S¨¢hara Occidental] con el fin de organizar un refer¨¦ndum. Y no nos importaba esa brecha. Fue un acto de buena fe por nuestra parte ignorar la brecha. Pero a?o tras a?o la ONU ha ido renunciado al refer¨¦ndum. Y ahora lleva un a?o y medio sin nombrar un enviado para el S¨¢hara. La situaci¨®n ya era insostenible¡±.

Junto al puesto aduanero de Marruecos, en Guerguerat hay varios caf¨¦s y alguna peque?a pensi¨®n. Los taxistas dicen que antes de la pandemia ah¨ª se formaban colas de camiones de hasta cuatro kil¨®metros. Los camioneros pod¨ªan esperar hasta dos d¨ªas. La corriente el¨¦ctrica funciona a partir de la tarde, cuando arrancan los generadores. Dentro de unas dos semanas se habr¨¢ terminado de asfaltar el kil¨®metro y medio de carretera que queda hasta llegar a Mauritania.

A pocos metros del puesto aduanero, en direcci¨®n a Dajla, Marruecos est¨¢ allanando varios kil¨®metros de terreno para construir una pista de aterrizaje de aviones. Rabat lleva varios lustros promoviendo sus relaciones con Estados africanos y el tr¨¢fico por Guerguerat no cesa de aumentar.

Una fuente neutral conocedora del S¨¢hara Occidental se?ala: ¡°Marruecos ha conseguido lo que quer¨ªa, que es un acceso directo con Mauritania. Y lo ha hecho sin mancharse las manos de sangre. La carretera del Guerguerat les une no solo con Mauritania, sino con ?frica. A trav¨¦s de ella sacar¨¢n sus frutas. Y tambi¨¦n la electricidad que pretenden exportar. Porque podr¨ªan hacerlo a trav¨¦s del mar, pero ser¨ªa mucho m¨¢s caro. Marruecos tiene razones para sentirse contento. Y adem¨¢s, le protege Francia. Y la ONU no le va a decir nada¡±.