Una nueva extrema derecha emerge en Rumania

Hasta las elecciones generales del pasado 6 de diciembre en Rumania ¡ªque ganaron los socialdem¨®cratas¡ª, pocos hab¨ªan o¨ªdo hablar de la Alianza para la Uni¨®n de Rumanos (AUR, que significa oro en rumano). Aquella noche, este partido de impronta ultraderechista dej¨® perpleja a la opini¨®n p¨²blica al emerger de la nada s¡ªse fund¨® hace un a?o¡ª para colarse como la cuarta formaci¨®n pol¨ªtica en el Parlamento, tras cosechar m¨¢s del 9% de los votos (medio mill¨®n de papeletas).

¡°Comenzaremos una revoluci¨®n conservadora¡±, proclam¨® Claudiu Tarziu, de 47 a?os y copresidente de AUR ¡ªal que califica de formaci¨®n ¡°antisistema¡±¡ª, tras conocerse los resultados en unos comicios en los que la participaci¨®n apenas alcanz¨® el 32%, la m¨¢s baja desde la ca¨ªda del r¨¦gimen estalinista de Nicolae Ceausescu hace 31 a?os. Esta abstenci¨®n, sin duda, ha facilitado la irrupci¨®n de AUR en el espectro pol¨ªtico con unos valores tradicionales de familia, patria, fe cristiana y libertad. ¡°Hasta ahora, la Rumania poscomunista no hab¨ªa tenido un verdadero partido conservador¡±, critica Tarziu, en referencia al Partido Nacional Liberal (PNL), que qued¨® segundo en las legislativas (25,2%), por detr¨¢s del vencedor Partido Socialdem¨®crata (PSD), que sum¨® un 28,9%. Pese a los resultados, el pa¨ªs ser¨¢ finalmente gobernado por una coalici¨®n de centroderecha (la alianza centrista USR-PLUS y el partido de minor¨ªa h¨²ngara, UDMR), liderada por el primer ministro, Florin C??u, del PNL.

Respecto al ascenso de AUR, Rumania era hasta ahora uno de los pocos pa¨ªses de la UE que no ten¨ªa una fuerza pol¨ªtica de extrema derecha con representaci¨®n parlamentaria. La formaci¨®n se impuso en algunas ¨¢reas rurales del Este. Sin embargo, la mayor sorpresa se produjo en Italia, donde fue la primera opci¨®n de los expatriados, y se erigi¨® como la segunda fuerza m¨¢s votada en Espa?a, donde tiene 35 sucursales repartidas por todo el territorio, seg¨²n el propio partido. ¡°Nos vamos a tener que acostumbrar a esta formaci¨®n ultra; resistir¨¢, puesto que es el ¨²nico partido antisistema sobre el que recaer¨¢ el descontento de la sociedad¡±, dice Gelu Duminica, soci¨®logo de la Universidad de Bucarest.

Con un exiguo presupuesto de un cuarto de mill¨®n de euros, sus l¨ªderes planificaron una campa?a ganadora: se dirigieron en un autocar a las principales plazas de los pueblos m¨¢s desfavorecidos para transmitir el mensaje de ¡°salvaci¨®n pol¨ªtica¡±; y lanzaron una campa?a agresiva en Facebook con teor¨ªas conspiratorias sobre las medidas restrictivas que el anterior Gobierno tom¨® para combatir la expansi¨®n de la covid-19. Una enfermedad que se ha llevado por delante la vida de 15.469 personas en Rumania y ha contagiado a 623.066, seg¨²n el Grupo de Comunicaci¨®n Estrat¨¦gica rumano.

En un pa¨ªs donde la Iglesia ortodoxa y las Fuerzas Armadas gozan de la mayor confianza de los ciudadanos, AUR logr¨® movilizar tambi¨¦n al nido de sacerdotes ortodoxos radicales negacionistas de la pandemia, que propagaron bulos sobre Bill Gates, al que acusaron de querer implantar un microchip con la vacuna contra la covid-19, pero tambi¨¦n a antiguos mandos del Ej¨¦rcito. Lo hicieron con discursos que recordaban a la narrativa rusa: nacionalismo, homofobia, xenofobia, cristianismo ortodoxo y soberanismo. ¡°Nos tildan de ser una creaci¨®n de Rusia, de los servicios secretos de Rumania e, incluso, de trumpistas; nada es cierto¡±, se?ala Tarziu.

Durante la pandemia, AUR organiz¨® amplias protestas contra el uso de las mascarillas precisamente en zonas donde impera la desilusi¨®n hacia los principales partidos del pa¨ªs. El anterior Gobierno liberal se centr¨® en ayudar m¨¢s a las grandes compa?¨ªas y a los inversores que a los peque?os emprendedores. ¡°El PNL reaccion¨® de manera ca¨®tica cuando se dio cuenta de que ca¨ªa en las encuestas. Abri¨® los mercados para que los agricultores con ingresos modestos que ganan los fines de semana no se vieran tentados a votar a AUR. Pero lleg¨® tarde¡±, explica Duminica.

Pese a que Tarziu, que ha ejercido como periodista en distintos medios nacionales como Cotidianul, afirma que solo se trataba de manifestaciones a favor de la libertad de elecci¨®n de llevar mascarillas, Sorin Lavric, presidente del senado interno de AUR ¡ªuna instituci¨®n endog¨¢mica y cercana al fascismo que imita a los antiguos partidos legionarios de extrema derecha de los a?os 30 en Rumania¡ª, lleg¨® a declarar que las mascarillas son ¡°in¨²tiles¡±, ¡°mutilantes¡± y ¡°un signo de obediencia¡±. El soci¨®logo Duminica explica que los ciudadanos ¡°han perdido la confianza¡± en los l¨ªderes tradicionales y se sienten ¡°abandonados¡±, por lo que ¡°han buscado [en AUR] a sus salvadores¡±.

Este ascenso de la extrema derecha pas¨® inadvertido completamente para los medios de comunicaci¨®n, absorbidos por la pandemia, las luchas pol¨ªticas y la corrupci¨®n que sigue lastrando una de las econom¨ªas m¨¢s d¨¦biles de la Uni¨®n Europea. ¡°Debido a la covid-19 no hemos hecho nuestro trabajo sobre el terreno; no hemos captado el pulso pol¨ªtico de la campa?a¡±, se lamenta Cristian Pantazi, periodista del portal G4Media.ro.

De hecho, un hombre que vot¨® a AUR y que prefiere mantenerse en el anonimato ahora se arrepiente de su elecci¨®n y critica la ausencia de informaci¨®n sobre la formaci¨®n ultra. ¡°Apenas ten¨ªamos informaci¨®n del partido hasta despu¨¦s de las elecciones, cuando los medios comenzaron a analizar su programa y a hablar de sus l¨ªderes. Los vot¨¦ por desafecci¨®n pol¨ªtica, pero desconoc¨ªa su posici¨®n contra la homosexualidad y el aborto¡±, ilustra. Los l¨ªderes ultraderechistas se manifiestan abiertamente hostiles al matrimonio entre personas del mismo sexo, al derecho al aborto y a la UE. Tambi¨¦n se oponen a la minor¨ªa h¨²ngara y abogan por la reunificaci¨®n con la Rep¨²blica de Moldavia.

Pese a su visible euroescepticismo, Tarziu revela que AUR tiene la intenci¨®n de adherirse al Grupo de Conservadores y Reformistas Europeos (ECR; en sus siglas en ingl¨¦s) en el Parlamento Europeo, que acoge a VOX, Hermanos de Italia y al polaco Ley y Justicia (PiS), entre otros.