El pr¨ªncipe Enrique y Meghan Markle renuncian a sus t¨ªtulos reales y a la financiaci¨®n p¨²blica

La orden dada por Isabel II para que se encontrara una soluci¨®n ¡°en los pr¨®ximos d¨ªas¡± a la crisis desatada por el pr¨ªncipe Enrique y su esposa, Meghan Markle, ha sido obedecida. Al menos, en su primera fase. Los duques de Sussex, seg¨²n ha anunciado este s¨¢bado el palacio de Buckingham, dejar¨¢n de utilizar el t¨ªtulo de su alteza real a partir de primavera y no percibir¨¢n m¨¢s fondos p¨²blicos. La resoluci¨®n del conflicto, sin embargo, dista mucho de ser definitiva.

El equipo de expertos que se puso a trabajar desde el primer minuto para forjar un acuerdo que evitara nuevos quebraderos de cabeza a la casa de Windsor ha anunciado una primera decisi¨®n, con el visto bueno de Isabel II. El pr¨ªncipe Enrique y su esposa, Meghan Markle, seguir¨¢n siendo los duques de Sussex, pero dejar¨¢n de participar en actos p¨²blicos en representaci¨®n de la reina y ya no podr¨¢n encabezar sus nombres con las iniciales H. R. M. (His o Her Royal Majesty, su alteza real).

La soluci¨®n, cuya urgencia fue impuesta por el anuncio del matrimonio de su intenci¨®n de volar por libre, ha acabado siendo la m¨¢s satisfactoria para los deseos de Enrique y Meghan de iniciar una vida independiente y para la voluntad del heredero al trono, Carlos de Inglaterra, de perfilar una monarqu¨ªa m¨¢s escueta en el que el n¨²mero de miembros relevantes de la familia real se reduzca a los imprescindibles.

¡°Despu¨¦s de muchos meses de conversaciones y de discusiones m¨¢s recientes, me agrada anunciar que juntos hemos dado con un modo constructivo y comprensivo de apoyar a mi nieto y a su familia¡±, comenzaba el comunicado emitido por el palacio de Buckingham en nombre de Isabel II.

El matrimonio podr¨¢ cumplir su deseo de residir m¨¢s tiempo en Am¨¦rica del Norte (Canad¨¢ es el pa¨ªs escogido por ambos), y de adquirir ¡°de modo gradual una independencia econ¨®mica¡±. A partir de esta primavera dejar¨¢n de recibir fondos p¨²blicos del presupuesto soberano, que distribuye la reina. Enrique percib¨ªa m¨¢s de la mitad de los seis millones de euros anuales que dedicaba esa partida para ¨¦l y para su hermano, el pr¨ªncipe Guillermo. No est¨¢ claro si, por el momento, dejar¨¢ tambi¨¦n de ingresar los otros seis millones de euros procedentes del ducado de Cornualles, el complejo agropecuario e inmobiliario de 550 kil¨®metros cuadrados que gestiona su padre, Carlos de Inglaterra.

Las obras de su residencia

Uno de los asuntos m¨¢s espinosos, los casi tres millones de euros del erario p¨²blico que se utilizaron para reformar la residencia en Windsor de los duques de Sussex, Frogmare Cottage, ha quedado tambi¨¦n resuelto. Devolver¨¢n el dinero, han dicho, y mantendr¨¢n la casa como su residencia oficial en el Reino Unido.

Como duques de Sussex podr¨¢n seguir impulsando todas las organizaciones y proyectos sociales que hasta ahora han apadrinado, pero no est¨¢ claro que la marca RoyalSussex, que la pareja registr¨® antes de su explosivo anuncio, sobreviva. Al menos, acompa?ada del adjetivo Royal (Real).

Isabel II admiti¨® la semana pasada que se trataba de un asunto complejo que llevar¨ªa tiempo resolver. El anuncio despeja los nubarrones que se hab¨ªan posado sobre la familia real y ha servido para consolidar la imagen de abuela comprensiva que persegu¨ªa ofrecer a toda costa la reina. ¡°Enrique, Meghan y Archie [su hijo] ser¨¢n siempre miembros muy queridos de esta familia¡±, dice el comunicado. ¡°Reconozco los desaf¨ªos a que han hecho frente como resultado del intenso escrutinio de los dos ¨²ltimos a?os y apoyo su deseo de tener una vida m¨¢s independiente. Quiero agradecerles su dedicaci¨®n a lo largo de todo el pa¨ªs, de la Commonwealth (Comunidad de Naciones) y m¨¢s all¨¢, y estoy particularmente orgullosa del modo en que Meghan ha pasado r¨¢pidamente a ser un miembro m¨¢s de esta familia. Toda mi familia desea que este acuerdo les permita comenzar a construir una nueva vida feliz y pac¨ªfica¡±, concluye.

Markle abandon¨® el Reino Unido apenas tres d¨ªas despu¨¦s del anuncio y regres¨® a Canad¨¢. El pr¨ªncipe Enrique hab¨ªa planeado reunirse con su esposa y su hijo a finales de esta semana, pero ha sido convocado el lunes a una nueva reuni¨®n familiar para seguir perfilando los detalles de su nueva vida. Los medios brit¨¢nicos han dedicado a este episodio una atenci¨®n en ocasiones desorbitada, con especiales repletos de p¨¢ginas en los ¨²ltimos d¨ªas. La prensa conservadora y la progresista han hecho bandera y causa de lo sucedido, para criticar despiadadamente a los duques de Sussex o defender su decisi¨®n.