Los vecinos de dos islas griegas protestan por la construcci¨®n de campos de detenci¨®n de migrantes
Los residentes de Lesbos y Qu¨ªos se enfrentan a la polic¨ªa y bloquean carreteras para impedir la llegada de m¨¢quinas y que se levanten las instalaciones
Las islas griegas de Lesbos y Qu¨ªos se convirtieron durante la madrugada de este martes en un campo de batalla contra los planes del Gobierno del conservador?Kyriakos Mitsotakis de construir centros de detenci¨®n de migrantes. Cientos de vecinos intentaron evitar el desembarco de maquinaria y agentes de polic¨ªa en sendos puertos.
El Gobierno envi¨® de madrugada a unos 200 agentes antidisturbios en una embarcaci¨®n, camiones de polic¨ªa y ca?ones de agua para asegurar la llegada de la maquinaria a los terrenos elegidos para la construcci¨®n de los nuevos centros. Ambas islas del Egeo, situadas frente a las costas de Turqu¨ªa, se suman a otras tres que son el principal punto de llegada de los flujos de refugiados. Ahora mismo hay unos 40.750 solicitantes de asilo repartidos por las cinco islas griegas donde deben tramitar sus peticiones de asilo, seg¨²n datos de ACNUR. La mitad de quienes llegan proceden de Afganist¨¢n, seguidos de sirios. En Lesbos la situaci¨®n es explosiva: el campo de refugiados de Moria alberga a unas 20.000 personas en tiendas de campa?a y en unas p¨¦simas condiciones de vida.?
La tensi¨®n, ya acumulada en las ¨²ltimas semanas, fue creciendo a lo largo de la madrugada hasta que la polic¨ªa intent¨® dispersar con gas lacrim¨®geno a los vecinos y autoridades locales que hab¨ªan acudido al puerto y a las carreteras que dan acceso a los terrenos. El alcalde de Qu¨ªos, Stamatis Karmantzis, y un sacerdote tuvieron que ser trasladados al hospital por inhalaci¨®n de esos gases.
A pesar de los enfrentamientos con la polic¨ªa, en ambas islas algunos vecinos contin¨²an bloqueando varias carreteras incluso con camiones de basura enviados por los ayuntamientos. Los vecinos de estas islas temen que la construcci¨®n de estos centros cerrados, que reemplazar¨ªa a los saturados campos de refugiados actuales, suponga una superpoblaci¨®n permanente de estos espacios. Frente a estos argumentos, las autoridades creen que los centros cerrados son m¨¢s seguros y limitan riesgos sanitarios.
En los ¨²ltimos meses, Grecia se ha convertido en la principal v¨ªa de llegadas irregulares del Mediterr¨¢neo, algo que no suced¨ªa desde la llegada de cientos de miles de refugiados entre 2015 y 2016.
Endurecimiento de la pol¨ªtica de asilo
Desde que lleg¨® al poder en julio de 2019, el nuevo Ejecutivo ha endurecido su discurso hacia la migraci¨®n y ha restringido las condiciones para pedir asilo. El portavoz del Ejecutivo, Stelios Petsas, calific¨® estos sucesos de "peque?as reacciones" y asegur¨® que la construcci¨®n de instalaciones cerradas se llevar¨¢ adelante, en una entrevista con la cadena de televisi¨®n OPEN. Petsas asegur¨® que el plan gubernamental beneficia a las comunidades locales ya que los centros estar¨¢n "lejos del tejido urbano, para que la actividad econ¨®mica y social pueda recuperar la normalidad".
El portavoz resalt¨® adem¨¢s que, en un centro cerrado, "problemas como el coronavirus pueden tratarse de forma m¨¢s efectiva" que en los campos actuales, que calific¨® de "an¨¢rquicos" y "bomba para la salud p¨²blica".
El Gobierno pretende comenzar las obras en marzo para poder trasladar ya en verano a los refugiados a estos centros que, en teor¨ªa, tendr¨¢n una capacidad m¨¢xima de 20.000 personas.
Las protestas de los vecinos contin¨²an a lo largo de la ma?ana y algunas organizaciones han convocado movilizaciones y huelgas. Medios locales hablan tambi¨¦n de posibles renuncias de cargos ocupados por pol¨ªticos de la conservadora Nueva Democracia, el partido al frente del Gobierno griego, en las islas a lo largo del d¨ªa.
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