El ¡®influencer¡¯ de Dios

Los santos rejuvenecen y ya no responden solo a remotos milagros. Carlo Acutis ascendi¨® al altar de los beatos, el primer paso para su santificaci¨®n, con sus vaqueros y un par de zapatillas Nike puestas. El joven, que muri¨® a los 15 a?os v¨ªctima de una leucemia repentina, fue beatificado el pasado 10 de octubre en As¨ªs abriendo la posibilidad de convertirse en el primer santo millennial. La supuesta ascensi¨®n a los cielos de un chaval que adoraba la comunicaci¨®n, la inform¨¢tica y las redes sociales, conecta de pleno con una generaci¨®n de cat¨®licos alejada inevitablemente de algunos de los mitos de la santificaci¨®n. El influencer de Dios o El Patr¨®n de la web, como ya le conocen los miles de devotos que le segu¨ªan antes de la ceremonia que termin¨® de encumbrarle, inaugura una nueva era en la adoraci¨®n de ¨ªdolos cat¨®licos. Su historia, por varios motivos, dio la vuelta al mundo la semana pasada.

Carlo Acutis naci¨® en Londres en 1991, donde sus padres, una familia de la alta burgues¨ªa turinesa, se hab¨ªan trasladado por motivos laborales. Sin embargo, el chico creci¨® y desarroll¨® sus pasiones (la inform¨¢tica y la fe) en Mil¨¢n. Su labor en las redes sociales y en Internet en favor de la Iglesia le convirtieron en un personaje conocido dentro del mundo de las juventudes cat¨®licas. El propio Papa se refiri¨® a ¨¦l y a esa vertiente de mensajero la semana pasada se?alando que el joven "supo utilizar las nuevas t¨¦cnicas de comunicaci¨®n para transmitir el Evangelio, comunicar valores y belleza". Para el cardenal Angelo Becciu, entonces prefecto para Congregaci¨®n de los Santos ¡ªhoy ca¨ªdo en desgracia por los esc¨¢ndalos que atraviesan la Santa Sede¡ª era "un ejemplo de fe para los j¨®venes". ¡°Cre¨® un proyecto inform¨¢tico sobre los temas de la fe, ten¨ªa un sitio sobre los milagros eucar¨ªsticos. As¨ª que este jovencito vivi¨® su fe al m¨¢ximo", se?al¨® Becciu.

El talento para el manejo de los unos y los ceros no basta para llamar la atenci¨®n de la Congregaci¨®n para las Causas de los Santos. El milagro atribuido y necesario para la beatificaci¨®n de Acutis sucedi¨® en 2013, cuando, seg¨²n la versi¨®n aceptada por la Iglesia, salv¨® la vida a un ni?o brasile?o "con una rara anormalidad anat¨®mica cong¨¦nita¡± conocida como p¨¢ncreas anular. El chico hab¨ªa nacido en 2010 en Campo Grande con una lesi¨®n que seccionaba el ¨®rgano en dos partes, por lo que te¨®ricamente necesitaba una cirug¨ªa importante. Su familia, sin embargo, pidi¨® la intercesi¨®n de Acutis, que ya hab¨ªa muerto. B¨¢sicamente se realiz¨® una oraci¨®n celebrada por un sacerdote ante un trozo de pijama del futuro beato, que el chico toc¨®. La operaci¨®n nunca lleg¨® a practicarse porque el ni?o se recuper¨®, sin una aparente explicaci¨®n m¨¦dica. Un hecho que la Congregaci¨®n para las Causas de los Santos reconoci¨® como el milagro necesario para la beatificaci¨®n de Acutis.

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La ¨²ltima sorpresa lleg¨® cuando los devotos que acudieron a la ceremonia hace una semana en As¨ªs ¡ªlugar donde pidi¨® ser enterrado¡ª comprobaron c¨®mo el cuerpo del joven se encontraba aparentemente incorrupto. Es decir, pr¨¢cticamente intacto. Una supuesta se?al m¨¢s de la singularidad de Acutis. Cuando se realiza una beatificaci¨®n o canonizaci¨®n siempre se exhuma el cuerpo del candidato a los altares y se realiza una comprobaci¨®n. Pero el de Acutis no fue exhumado en el estado que luego fue mostrado, como explic¨® el obispo Domenico Sorrentino, de la Di¨®cesis de As¨ªs. ¡°Fue hallado en el normal estado de transformaci¨®n propio de la condici¨®n post mortem (...) el cuerpo, si bien transformado, pero con varias partes todav¨ªa en su conexi¨®n anat¨®mica, fue tratado con t¨¦cnicas de conservaci¨®n y de integraci¨®n normalmente practicadas para exponer con dignidad a la veneraci¨®n de los fieles los cuerpos de los beatos y de los santos. La reconstrucci¨®n de la cara con una m¨¢scara de silicona fue particularmente exitosa.¡± La imagen del chico postrado en su sepultura, con sus vaqueros, unas zapatillas Nike y una sudadera deportiva gener¨® un impacto enorme. El s¨ªmbolo de una nueva generaci¨®n de santos.