Los republicanos piden a Biden que recorte su plan de est¨ªmulos en dos tercios
El presidente y la oposici¨®n mantienen su primera toma de contacto en esta nueva era con cordialidad, pero sin visos de llegar a un acuerdo sobre el rescate econ¨®mico
El presidente dem¨®crata Joe Biden, que lleg¨® a la Casa Blanca con la promesa de recuperar un marco de di¨¢logo con los republicanos tras a?os de hostilidad, afront¨® la primera prueba este lunes en una reuni¨®n con la oposici¨®n para discutir los est¨ªmulos econ¨®micos por la pandemia. Un grupo de 10 senadores de la oposici¨®n, la mayor¨ªa de perfil centrista, present¨® al mandatario una propuesta del programa que asciende a 618.000 millones, lo que supone reducir en m¨¢s de dos tercios el plan del mandatario, de 1,9 billones. Al encu...
El presidente dem¨®crata Joe Biden, que lleg¨® a la Casa Blanca con la promesa de recuperar un marco de di¨¢logo con los republicanos tras a?os de hostilidad, afront¨® la primera prueba este lunes en una reuni¨®n con la oposici¨®n para discutir los est¨ªmulos econ¨®micos por la pandemia. Un grupo de 10 senadores de la oposici¨®n, la mayor¨ªa de perfil centrista, present¨® al mandatario una propuesta del programa que asciende a 618.000 millones, lo que supone reducir en m¨¢s de dos tercios el plan del mandatario, de 1,9 billones. Al encuentro en el Despacho Oval acudieron senadores como Susan Collins, de Maine; o Mitt Romney, de Utah; adem¨¢s de la vicepresidenta Kamala Harris. La cita se desarroll¨® en un clima de cordialidad muy improbable hace solos unos meses, pero, m¨¢s all¨¢ del cambio de tono, el pacto en este asunto parece hoy por hoy muy lejano.
¡°El riesgo de este plan de est¨ªmulos no es que sea demasiado cuantioso, sino que se quede corto¡±, advirti¨® la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, poco antes de la cita, rebajando las expectativas de consenso. La artiller¨ªa dem¨®crata incluye fondos para acelerar el programa de vacunaci¨®n, as¨ª como ayudas a empresas y gobiernos estatales, aunque la parte del le¨®n se la llevan los cheques de hasta 1.400 d¨®lares para cada ciudadano (que se sumar¨ªan a los 600 de la ¨²ltima ronda de est¨ªmulos de diciembre). Los republicanos plantean reducir el montante de esta ayuda directa hasta los 1.000 y rechazan el aumento del salario m¨ªnimo federal que ha impulsado Biden hasta de los 7,5 a los 15 d¨®lares por hora, tras m¨¢s de una d¨¦cada de congelaci¨®n.
En una carta dirigida a Biden este fin de semana, en la que solicitaban la reuni¨®n, los senadores republicanos afirmaron: ¡°Reconocemos sus llamamientos a la unidad y queremos trabajar de buena fe con su Administraci¨®n¡±. La senadora Collins, l¨ªder de este grupo, calific¨® de ¡°excelente¡± la reuni¨®n, pese a que los dem¨®cratas se preparan para aprobar el plan en solitario.
Los dem¨®cratas disponen de la mayor¨ªa de la C¨¢mara de Representantes y, de facto, de la del Senado, ya que se encuentran divididos 50-50 con los republicanos y la vicepresidenta, Kamala Harris, vota y dirime en caso de empate. Con los procedimientos habituales, necesitar¨ªa el respaldo de 60 de los 100 senadores para aprobar el nuevo plan de est¨ªmulos, pero los dem¨®cratas planean echar mano del marco presupuestario especial por el cual puede sacarlo adelante con una mayor¨ªa simple.
La pandemia llev¨® a la econom¨ªa de Estados Unidos a su peor recesi¨®n desde la Segunda Guerra Mundial, con una contracci¨®n del 3,5%, pese al repunte del ¨²ltimo trimestre del a?o (que fue del 1%), y se han evaporado 10 millones de puestos de trabajo, lo que se traduce en una tasa de paro del 6,7%. En paralelo a la Reserva Federal, el Congreso ha reaccionado con dos grandes programas de est¨ªmulos: el de 2,2 billones aprobado en marzo y el adicional alumbrado el pasado diciembre, por valor de 900.000 millones.
La negociaci¨®n de este segundo se enquist¨® durante meses, mientras que el primero, el m¨¢s voluminoso de la historia, llev¨® solo unos d¨ªas de negociaci¨®n por la urgencia que impon¨ªa aquella debacle ins¨®lita, sobrevenida, un apag¨®n econ¨®mico autoimpuesto como consecuencia del virus que hab¨ªa desconcertado al mundo. En ambos casos, el desenlace demostr¨® que, pese a lo crispado que se encuentre el clima pol¨ªtico, Gobierno y oposici¨®n son capaces de llegar a acuerdos casi un¨¢nimes en momentos de verdadera necesidad.
Entonces, los dem¨®cratas controlaban la C¨¢mara de Representantes y los republicanos, el Senado, lo que hac¨ªa necesario el consenso.