La opini¨®n de Boris Johnson sobre su ministro de Sanidad: ¡°Un puto in¨²til total¡±
El exasesor estrella de Downing Street e ide¨®logo del Brexit, Dominic Cummings, publica nuevos mensajes de m¨®vil comprometedores para el primer ministro brit¨¢nico
Si el entorno de Boris Johnson pensaba que hab¨ªa capeado la tormenta de Dominic Cummings, el exasesor estrella del primer ministro e ide¨®logo del Brexit ha demostrado este mi¨¦rcoles que dispone a¨²n de suficiente munici¨®n para causar m¨¢s da?os. Cummings ha publicado intercambios de wasap con Johnson en los que el exasesor advert¨ªa al primer ministro de lo que ¨¦l consideraba los fallos de su ministro de Sanidad. ¡°Nos hemos quedado en unos 5.000 o 7.000 test y MH [iniciales de Matt Hancock, ministro de Sanidad brit¨¢nico] dijo hoy que es ¡®esc¨¦ptico¡¯ sobre que lleguemos a los 10.000 el lunes, cuando hab¨ªa dicho que ¡®seguro¡¯ los alcanzar¨ªamos el martes¡±se lee en un mensaje del asesor a Johnson de finales de marzo. ¡°Eso implica que decenas de miles de sanitarios no van a poder acudir a su puesto de trabajo en las pr¨®ximas tres semanas, que ser¨¢n cr¨ªticas. Aparte de mi insistencia de que los test son una ruta esencial del plan de escape¡±, advierte. Johnson responde: ¡°Un puto in¨²til total [Totally fucking hopeless]¡±. El primer ministro brit¨¢nico a?ade en su mensaje: ¡°No puedo dejar de pensar en quitar a Hancock del medio y sustituirle por Gove [Michael Gove, el actual jefe de Gabinete, un cargo equivalente al del ministro de la Presidencia espa?ol]¡±. Se tratar¨ªa, seg¨²n Cummings, de la demostraci¨®n evidente de que Johnson era consciente de los errores de su ministro de Sanidad.
86/ Evidence on the covid disaster: as the PM said himself, Hancock's performance on testing, procurement, PPE, care homes etc was 'totally fucking hopeless', & his account to MPs was fiction: https://t.co/lur4Ddrddy pic.twitter.com/JVGLCSov7v
— Dominic Cummings (@Dominic2306) June 16, 2021
Todos los miembros del Gobierno, comenzando por el propio Johnson, han defendido con efusividad a Hancock para intentar capear el temporal. A la vez, el equipo de comunicaci¨®n de Downing Street se ha dedicado a denigrar entre los medios a un personaje, Cummings, que provoca un notable rechazo por su car¨¢cter arisco, exc¨¦ntrico y arrogante. Su comparecencia para justificar una escapada al campo, junto a su mujer y su hijo, en medio de la primera ola de la covid-19 solo logr¨® irritar m¨¢s a la opini¨®n p¨²blica. Se resisti¨® a algo tan simple como pedir disculpas.
El conflicto viene de largo. A finales de mayo, Cummings compareci¨® ante una comisi¨®n parlamentaria para revelar la desastrosa gesti¨®n de Downing Street durante los primeros meses de la pandemia. El hombre m¨¢s poderoso del Gobierno de Johnson en los inicios del mandato hab¨ªa acabado saliendo por la puerta de atr¨¢s, derrotado por sus enemigos internos y abandonado a su suerte. La actual esposa de Johnson, Carrie Symonds, encabez¨® con ¨¦xito una revuelta contra los desp¨®ticos modos del asesor. Cummings prepar¨® con calma su venganza y dej¨® boquiabiertos a los diputados al describir en su comparecencia a un primer ministro que se resisti¨® a admitir la gravedad de la amenaza, y sobre todo, al calificar al ministro de Sanidad de marrullero e incompetente, ¡°un mentiroso que deber¨ªa haber sido despedido ya al menos en 15 o 20 ocasiones¡±.
Hancock compareci¨® ante la comisi¨®n parlamentaria y se mostr¨® desafiante. Neg¨® todas las afirmaciones de Cummings y le ret¨® a demostrar con documentos todo aquello de lo que le acusaba. La comisi¨®n reclam¨® al exasesor que entregara las pruebas correspondientes a las graves acusaciones que hab¨ªa vertido. Aunque se comprometi¨® a hacerlo, ha decidido ser ¨¦l quien maneje los tiempos de su venganza, con una nueva ronda de documentos incriminatorios que se encarga de anunciar a trav¨¦s de su cuenta personal de Twitter.
La exitosa campa?a de vacunaci¨®n en el Reino Unido, que ha inmunizado ya con doble dosis a un 57% de la poblaci¨®n, y la perspectiva de luz al final del t¨²nel, jugaron a favor de Hancock, quien logr¨® defenderse de las acusaciones con medias excusas y una apariencia de honestidad en sus errores. Que b¨¢sicamente consist¨ªan en dos: la incapacidad de poner en marcha un sistema de test de localizaci¨®n y rastreo de contagios durante los primeros meses de la pandemia, y la tr¨¢gica decisi¨®n de reenviar a las residencias a los mayores diagnosticados con la covid-19 en los hospitales.
El exasesor, por su parte, no ceja en su estrategia. En una publicaci¨®n en Substack, una plataforma de internet que permite la publicaci¨®n de newsletters y gestiona el pago de los lectores, escribi¨®: ¡°Hancock tiene en estos momentos responsabilidad directa en temas tan delicados como las nuevas variantes [del virus] o la gesti¨®n de las residencias. Mantener a un ministro as¨ª en un puesto de responsabilidad clave es garant¨ªa de desastre. Para defender la seguridad p¨²blica, es urgente que sea destituido¡±.
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