La Convenci¨®n Constituyente chilena innova, pero debe prevenirse del reaccionarismo

Mientras el himno nacional era entonado en la ceremonia de instalaci¨®n de la Convenci¨®n Constitucional en Chile, se pod¨ªan escuchar afuera del edificio los gritos de ¡°liberar, liberar¡­ a los presos por luchar¡±. Varios constituyentes, como Patricia Politzer y Beatriz S¨¢nchez, pidieron que la sesi¨®n fuera interrumpida hasta que los carabineros dejaran de reprender las manifestaciones en el exterior. ¡°Hay familiares de todos los convencionales que vinieron a acompa?arnos en estos momentos y est¨¢n siendo reprimidos, est¨¢n siendo golpeados afuera¡±, reclam¨® tambi¨¦n Elsa Labra?a, constituyente de la Lista del Pueblo.

Ya con la sesi¨®n suspendida, Elisa Lonc¨®n, quien horas m¨¢s tarde ser¨ªa electa presidenta de la Convenci¨®n, dijo que era necesario exterminar a la violencia de la cultura pol¨ªtica. ¡°Nosotros como convencionales venimos a instaurar una cultura de di¨¢logo y de no m¨¢s represi¨®n¡±.

Ah¨ª, en lo que algunos veh¨ªculos de prensa noticiaron como ¡°retrasos e interrupciones¡±, hemos visto una innovaci¨®n pol¨ªtica. Eso porque la conexi¨®n directa entre electores y electos es un perfeccionamiento incentivado por una nueva generaci¨®n de pol¨ªticos a los que llamamos innovadores.

Seg¨²n la investigaci¨®n Electas, del Instituto Update, mujeres electas en Am¨¦rica Latina que consideramos innovadoras practican la pol¨ªtica de manera muy similar en todas las partes de la regi¨®n, aun sin conocerse: tienen consciencia de clase, raza y g¨¦nero; son menos personalistas y m¨¢s colaborativas; trabajan en redes de organizaciones y colectivos, priorizando acuerdos supra partidarios; y, sobre todo, est¨¢n m¨¢s conectadas a diario con su base de apoyo que los pol¨ªticos tradicionales que vuelven a sus bases solamente en ¨¦poca de elecci¨®n o para medidas asistencialistas.

Siendo la Convenci¨®n Constitucional fruto directo de las revueltas populares de 2019, vimos en esa preocupaci¨®n de las y los constituyentes por los manifestantes afuera de la Convenci¨®n una confirmaci¨®n de su car¨¢cter innovador.

En ese mismo camino, la Convenci¨®n aprob¨® en su segundo d¨ªa de trabajo una declaraci¨®n de indulto para los presos del estallido de 2019 y a los ¡°presos pol¨ªticos mapuche¡± desde 2001, aprehendidos en el conflicto de tierras en Araucan¨ªa. La declaraci¨®n no tiene poder de acelerar la discusi¨®n que ya est¨¢ pautada en el Congreso Nacional, pero fue un gesto hacia los que forzaron la existencia de la Convenci¨®n misma.

Igualmente la aprobaci¨®n de comisiones que estar¨¢n atentas al di¨¢logo y participaci¨®n popular puede ser entendida como un remedio a la crisis de representatividad pol¨ªtica. Las comisiones m¨¢s innovadoras han sido la de Derechos Humanos; Participaci¨®n Ciudadana; Descentralizaci¨®n; Comunicaci¨®n y Transparencia; Participaci¨®n Plurinacional y Educaci¨®n Popular, Social y Territorial; y de Participaci¨®n y Consulta con los Pueblos Originarios.

Entendimos, tras la investigaci¨®n Electas (donde 96 mujeres con mandato en seis pa¨ªses de Am¨¦rica Latina fueron entrevistadas), que la llegada de esos nuevos actores a la pol¨ªtica institucional es casi siempre fruto del despertar pol¨ªtico masivo, que siembra un cambio cultural. As¨ª como en Chile hubo el estallido social de 2019, en Argentina, por ejemplo, la aprobaci¨®n de la ley del aborto sucedi¨® tras docenas de marchas del #NiUnaMenos, que promovi¨® una transformaci¨®n cultural en la sociedad, permitiendo que el tema fuera debatido abiertamente desde la mesa de la cena de las familias hasta las plazas p¨²blicas.

Esos estallidos despiertan en muchas mujeres y j¨®venes el deseo de ocupar lugares de decisi¨®n. Por eso, una vez electas y electos, sus trabajos son guiados por la resoluci¨®n de problemas. Y, para solucionarlos de manera m¨¢s ¨¢gil, usan la intuici¨®n y la empat¨ªa como herramienta pol¨ªtica capaz de abrir debates y hacer concesiones. Ese ejercicio de escucha, por su vez, invita a la participaci¨®n popular, lo que tambi¨¦n fortalece la idea de corresponsabilidad entre electores y electos.

Hemos podido ver un poco de esas ideas en el discurso de Elisa Lonc¨®n, acad¨¦mica mapuche electa presidenta de la Convenci¨®n ¨C otra innovaci¨®n pol¨ªtica innegable ya que queremos mujeres en el poder con poder. Lonc¨®n no habl¨® de su victoria ni de disputas. Habl¨® sobre cuidados ¨C un nuevo vocabulario pol¨ªtico que tambi¨¦n hemos captado entre mujeres de toda Am¨¦rica Latina. ¡°Estamos instalando una manera de ser plural, democr¨¢tico y participativo; esta Convenci¨®n que hoy d¨ªa me toca presidir transformar¨¢ a Chile en un pa¨ªs plurinacional, intercultural y que no atente contra los derechos de las mujeres, que cuide la madre tierra y que tambi¨¦n limpie las aguas de la naci¨®n¡±, dijo.

Por otra parte, la llegada de las mujeres a la pol¨ªtica institucional de manera m¨¢s intensa en los ¨²ltimos a?os tambi¨¦n ha evidenciado un dato aterrador: el 99% de las entrevistadas de Electas informaron haber sufrido alg¨²n tipo de violencia en la pol¨ªtica por el hecho de ser mujer. Como nos dijo una senadora mexicana, ¡°creo que todas nosotras, mujeres en pol¨ªtica, ya hemos sufrido violencia de g¨¦nero. Las que dicen que no, es porque no la reconocen¡±.

Y aqu¨ª vale recordar que violencia de g¨¦nero no es un ataque contra alguien de un g¨¦nero espec¨ªfico, sino un ataque motivado por las expectativas sobre el papel que la v¨ªctima debe desempe?ar en la sociedad. Violencia esa que surge de varias maneras: pueden ser ignoradas o censuradas por sus opciones en la esfera privada, por sus ideas p¨²blicas, o hasta por su apariencia. En los casos m¨¢s extremos, hemos registrado casos como pol¨ªticas golpeadas, acosadas, violadas e incluso asesinadas.

En el caso de la Convenci¨®n, el proyecto Mujeres y Pol¨ªtica en Twitter, que se propone analizar violencia de g¨¦nero online en contra las 77 constituyentes electas, identific¨® que el 67% de las candidatas recibieron mensajes violentos en la campa?a, la mayor¨ªa ¡°por su condici¨®n de mujer, independiente de si son de derecha, centro o izquierda.¡± Aunque limitado a publicaciones en redes sociales, el proyecto tambi¨¦n es una confirmaci¨®n de que, para las mujeres en la pol¨ªtica, ser electa es solo el primer reto que se impone de manera m¨¢s dif¨ªcil que para los dem¨¢s.

La misi¨®n de la Convenci¨®n, ahora, es mantener abierto el di¨¢logo con todo el espectro pol¨ªtico. El avance progresista en la regi¨®n suele ser sucedido de reaccionarismo. Brasil es un ejemplo donde dos gobiernos progresistas (los de Luiz In¨¢cio Lula da Silva y Dilma Rousseff) fueron sustituidos por un presidente reaccionario. La aprobaci¨®n de la ley del aborto legal, seguro y gratuito es un ejemplo mejor a seguir - en Argentina, las articuladoras de ese proceso lograron construir una cooperaci¨®n tambi¨¦n con los que pensaban distinto de ellas en otros temas. Aqu¨ª reside el desaf¨ªo.

Beatriz Della Costa (Brasil) es polit¨®loga, cofundadora del Instituto Update y Directora de Electas - Mujeres en la pol¨ªtica, una webserie sobre las pol¨ªticas electas en cinco pa¨ªses de latinoam¨¦rica.

Carol Pires (Brasil) es periodista, coguionista de Al Filo de la Democracia, nominado al Oscar 2020 como mejor documental, y maestra en estudios latinoamericanos por la Universidad de Columbia.

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