La petici¨®n de destituci¨®n de Lasso por los ¡®Papeles de Pandora¡¯ se desinfla
La comisi¨®n legislativa de la Asamblea que solicit¨® la censura del presidente se queda sola
La comisi¨®n de Garant¨ªas Constitucionales de la Asamblea que ped¨ªa la destituci¨®n del presidente de Ecuador a ra¨ªz de la investigaci¨®n de los Papeles de Pandora est¨¢ cada vez m¨¢s sola. Oficialistas y opositores han desactivado la tensi¨®n pol¨ªtica que conduc¨ªa al Gobierno a un nuevo ¨®rdago con el Congreso. El informe abr¨ªa la puerta a la censura de Guillermo Lasso y deb¨ªa votarse inminentemente en el pleno de la Asamblea, pero han pasado los d¨ªas y a¨²n no hay fecha para que el tema entre en agenda. Ser¨¢, como muy pronto, la pr¨®xima semana.
La comisi¨®n, de mayor¨ªa opositora con tres legisladores corre¨ªstas y cuatro de Pachakutik, sostiene en su informe que el presidente hab¨ªa incurrido en la prohibici¨®n aprobada por consulta popular de que cualquier funcionario p¨²blico sea propietario de forma directa o indirecta de bienes o capitales en para¨ªsos fiscales.
Lasso recurri¨® hasta a 14 sociedades financieras opacas en Panam¨¢ y Estados Unidos, seg¨²n se recoge en los Papeles de Pandora, una investigaci¨®n global coordinada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ), en la que particip¨® EL PA?S. El mandatario ha respondido en reiteradas ocasiones que se deshizo de las compa?¨ªas antes de lanzarse a las elecciones y que ha pagado m¨¢s de 500 millones de d¨®lares en impuestos en Ecuador entre ¨¦l y el Banco de Guayaquil, del que es accionista mayoritario.
La pol¨¦mica por los Papeles de Pandora ha puesto contra las cuerdas al presidente ecuatoriano durante semanas por la arremetida de la oposici¨®n, encabezada por el exmandatario Rafael Correa. Desde las redes sociales, han lanzado una campa?a de desgaste que, sin embargo, no ha cristalizado con contundencia en la investigaci¨®n legislativa.
El informe de la Comisi¨®n de Garant¨ªas Constitucionales, aupado por los tres esca?os corre¨ªstas y dos de los representantes del movimiento ind¨ªgena, ha sido ninguneado por el Partido Social Cristiano. Un comunicado de su l¨ªder hist¨®rico, Jaime Nebot, desinfl¨® el impacto de la maniobra legislativa arguyendo precisamente que ¡°discrepar no es conspirar¡±. Nebot apoy¨® a Lasso en la carrera presidencial pero se divorciaron pol¨ªticamente nada m¨¢s empezar, precisamente por discrepancias sobre c¨®mo formar mayor¨ªas en la Asamblea. Pese a las desavenencias, la postura del l¨ªder socialcristiano dio paso a que otros bloques de oposici¨®n se desmarcaran del informe que propon¨ªa la salida de Lasso.
¡°Se refiere en varias partes a un supuesto caso de conmoci¨®n interna y esa causal no es aplicable a este caso, a tenor de dos dict¨¢menes de la Corte Constitucional¡±, razonaba Nebot en su pronunciamiento, donde ratificaba que seguir¨ªa rebatiendo ¡°calumnias, insultos y disparates¡±, pero que jam¨¢s apoyar¨ªa iniciativas que puedan ¡°atentar contra el Estado de Derecho¡±.
A falta de que el asunto entre en agenda para ir a votaci¨®n al Pleno, los pronunciamientos de Izquierda Democr¨¢tica y la postura dividida de Pachakutik desvirt¨²an la posibilidad de llevar al presidente Guillermo Lasso a la destituci¨®n. Pero incluso, si hay avances en esa ruta, el Gobierno ha vuelto a poner sobre la mesa la opci¨®n de muerte cruzada que disolver¨ªa la Asamblea y le permitir¨ªa gobernar sin Congreso mientras convoca nuevas elecciones.
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