60 a?os de embargo estadounidense a Cuba y sin cambios a la vista
Seis d¨¦cadas despu¨¦s de la orden firmada por John F. Kennedy, el Archivo de Seguridad Nacional de EE UU publica una docena de documentos desclasificados que describen las medidas destinadas a ¡°provocar el hambre, la desesperaci¨®n y el derrocamiento del Gobierno¡± de Fidel Castro
En medio de una de las peores crisis econ¨®micas de la historia de Cuba, con el pa¨ªs bajo una inflaci¨®n desatada y la convulsi¨®n de las protestas del 11 de julio que todav¨ªa colea ¡ªcon su secuela de juicios contra al menos 790 manifestantes, parte de ellos encausados por el delito de sedici¨®n¡ª, este 3 de febrero se cumplieron 60 a?os del d¨ªa en que el entonces presidente norteamericano John F. Kennedy firm¨® la orden n¨²mero 3447, que proclam¨® el ¡°embargo a todo el comercio con Cuba¡± un a?o despu¨¦s de que ambos pa¨ªses rompieran relaciones diplom¨¢ticas.
Con motivo del aniversario, el Archivo Nacional de Seguridad de EE UU (NSA, por sus siglas en ingl¨¦s) acaba de publicar una docena de documentos desclasificados que arrojan luz ¡ªy no pocas sombras¡ª sobre la que seguramente es la medida punitiva contra un pa¨ªs m¨¢s larga de la historia moderna. Los papeles oficiales dados a conocer por el NSA ¡ªinstituci¨®n acad¨¦mica adscrita a la Universidad George Washington¡ª registran los or¨ªgenes, justificaci¨®n y evoluci¨®n de las sanciones econ¨®micas adoptadas por el Gobierno norteamericano desde que Fidel Castro lleg¨® al poder, comenzando por el famoso memor¨¢ndum del 6 de abril de 1960 del subsecretario de Estado para Asuntos Interamericanos, Lester Mallory, dirigido al entonces presidente Dwight Eisenhower y titulado ¡°El declive y la ca¨ªda de Castro¡±, en el que argumenta sin tapujos la necesidad de aplicar medidas coercitivas contra la naciente revoluci¨®n para derrocarla.
La revoluci¨®n de Fidel Castro, argumenta Mallory en el escrito, es ¡°bastante popular¡±, y dado que no hay una ¡°oposici¨®n efectiva¡± contra ¨¦l, la ¨²nica forma de socavar el apoyo es ¡°a trav¨¦s del desencanto y la desafecci¨®n basada en la insatisfacci¨®n econ¨®mica y las dificultades¡±. Mallory, se?ala el NSA, aboga en ese momento por un conjunto de sanciones econ¨®micas dise?adas para negar ¡°dinero y suministros a Cuba, para disminuir los salarios monetarios y reales, para provocar el hambre, la desesperaci¨®n y el derrocamiento del Gobierno¡±.
Este temprano memor¨¢ndum, b¨¢sico para entender la justificaci¨®n pol¨ªtica del embargo norteamericano que sigue vigente hoy, es complementado por el NSA con otros documentos, mensajes y deliberaciones secretas de diversas administraciones norteamericanas, incluidas las consideraciones del exsecretario de Estado Henry Kissinger en 1975 de usar el embargo como moneda de cambio para normalizar las relaciones con Cuba.
Un original revelador es el informe secreto de la CIA titulado ¡°Sanciones de Estados Unidos y la OEA contra Cuba (1962-presente)¡±, elaborado en 1982. Este concluye que ¡°desde el principio las sanciones comerciales fueron significativamente perjudiciales para el crecimiento y el desarrollo general de Cuba¡±, si bien admite que el embargo no ¡°hab¨ªa cumplido¡± con sus objetivos y que ¡°los costos pol¨ªticos superaban sus beneficios¡±. El documento dado a conocer por la NSA considera que ¡°si bien Estados Unidos promueve p¨²blicamente el objetivo de una Cuba verdaderamente libre e independiente, el objetivo final siempre ha sido sacar a Castro del poder y hacer que el apoyo a Cuba sea lo m¨¢s costoso posible para los sovi¨¦ticos¡±.
Otro memor¨¢ndum de Harry Shlaudeman, subsecretario adjunto para Am¨¦rica Latina durante la Administraci¨®n Gerald Ford (que sustituy¨® a Nixon tras su dimisi¨®n), recomienda a Kissinger ¡°moverse r¨¢pidamente para negociar con Cuba, utilizando el levantamiento del embargo, en etapas, como moneda de cambio¡±. El documento, de 1975, propone restablecer relaciones diplom¨¢ticas y consulares como parte de un acuerdo inicial que incluir¨ªa un levantamiento parcial del embargo y compromisos mutuos sobre la no intervenci¨®n y negociaciones para resolver las reclamaciones de EE UU.
¡°Nuestro inter¨¦s es dejar atr¨¢s el tema de Cuba, no prolongarlo indefinidamente¡±, indica Shlaudeman, estableciendo una serie de pasos para normalizar relaciones y finalmente sacar el ¡°tema intr¨ªnsecamente trivial¡± de Cuba ¡°de las agendas internas e interamericanas¡±.
Otro dossier de la etapa de la Administraci¨®n Carter (1977-1981) describe el debate secreto sobre si excluir o no los alimentos y medicinas del embargo. En ese momento la flexibilizaci¨®n de las sanciones era defendida por varios congresistas y senadores estadounidenses, y el entonces secretario de Estado, Cyrus Vance, aconsej¨® al presidente ¡°retrasar¡± la exenci¨®n de alimentos y medicinas ¡°hasta que los cubanos tomen medidas para contribuir al proceso de mejora de las relaciones¡±. El argumento era que Cuba necesitaba ¡°demostrar la seriedad de su propio inter¨¦s en mejorar las relaciones¡±.
Seg¨²n el centro acad¨¦mico, el asesor de Seguridad Nacional de ese momento, Zbigniew Brzezinski, pidi¨® a Carter permanecer ¡°neutral¡± en el proyecto de ley del Senado para eximir a esas categor¨ªas del embargo, recomendando que su postura no fuese ¡°la de la neutralidad benevolente, sino m¨¢s bien la de la neutralidad esc¨¦ptica¡±, por temer que la suavizaci¨®n del embargo dejara a Vance con ¡°poca o ninguna influencia para lograr concesiones necesarias para hacer que la normalizaci¨®n sea pol¨ªticamente aceptable para Estados Unidos¡±.
De acuerdo con Peter Kornbluh, director del Proyecto de Documentaci¨®n de Cuba del NSA y responsable de la investigaci¨®n, ¡°el embargo interminable se ha convertido en un s¨ªmbolo perdurable de hostilidad perpetua en la postura de Estados Unidos hacia Cuba¡±.
Junto a los documentos publicados, el NSA adjunta una cronolog¨ªa de la historia de las sanciones norteamericanas contra Cuba realizada por el acad¨¦mico William Leogrande (coautor junto a Kornbluh de Back channel to Cuba, libro que recopila las m¨²ltiples negociaciones secretas realizadas entre Washington y La Habana en el ¨²ltimo medio siglo). Leogrande repasa los hitos de la pol¨ªtica de embargo desde Eishenhower hasta Biden, que despu¨¦s de abogar por un cambio en las relaciones con Cuba en la l¨ªnea normalizadora de Obama sigue instalado en la pol¨ªtica de presi¨®n de su antecesor, Donald Trump.
¡°Durante la campa?a de 2020, Joe Biden prometi¨® revertir las sanciones de Trump que perjudican a las familias cubanas, especialmente las restricciones a las remesas y los viajes familiares. Una vez en el cargo, a pesar de sus repetidas promesas de restaurar los servicios de remesas, no hizo nada, dejando todas las sanciones de Trump en su lugar¡±, se?ala Leogrande.
La proclama presidencial 3447 de John F. Kennedy entr¨® en vigor el 7 de febrero de 1962. Seis d¨¦cadas despu¨¦s, el embargo se mantiene y La Habana y Washington siguen entrampados: el Gobierno cubano achaca al ¡°bloqueo genocida¡± casi todos sus males, y EE UU dice que es una excusa y que no habr¨¢ cambios si Cuba no cambia primero. Febrero de 2022, y en esas estamos.
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