Guatemala endurece su legislaci¨®n contra el aborto y declara a la comunidad LGBTI ¡°incongruente con la moral cristiana¡±

Ana Lanz se muestra alarmada y temerosa despu¨¦s de que el Congreso de Guatemala aprobara un paquetazo legislativo que castiga con penas m¨¢s severas el aborto, proh¨ªbe la educaci¨®n sexual en las escuelas y echa llave a cualquier iniciativa que incentive el matrimonio igualitario. Esta activista guatemalteca, presidenta de Visibles ¡ªuna organizaci¨®n que promueve los derechos de la comunidad LGBTI¡ª, describe como peligrosa la nueva legislaci¨®n, en un pa¨ªs donde hasta octubre pasado se registraron 28 cr¨ªmenes de odio contra personas sexualmente diversas y sigue siendo uno de los m¨¢s violentos para las mujeres. ¡°Es una ley intencionalmente violenta, que se aprueba en el marco del D¨ªa Internacional de la Mujer, lo que env¨ªa un mensaje claro desde el Gobierno. Es una ley de odio, de retroceso de derechos humanos¡±, afirma, indignada, Lanz. El presidente Alejandro Giammattei ha anunciado la tarde de este jueves que vetar¨¢ la ley, que ha llenado de j¨²bilo a las iglesias cristianas, firmes promotoras del nuevo decreto legislativo, y que han declarado a este pa¨ªs centroamericano como ¡°Capital Iberoamericana Provida¡±.

Han sido semanas intensas para las organizaciones que defienden los derechos humanos en Guatemala e intentan frenar la deriva reaccionaria del Gobierno que lidera el conservador Alejandro Giammattei. Estos organismos civiles califican de ¡°talibana¡± la nueva legislaci¨®n, porque violenta los derechos de las mujeres y borra de un plumazo el reconocimiento del Estado a personas sexualmente diversas, que desde el texto legislativo son consideradas ¡°grupos minoritarios incongruentes con la moral cristiana¡±. La ley tambi¨¦n golpea con fuerza al Estado laico, al darle un enorme altavoz al mensaje de las religiones cristianas pentecostales, que han avanzado como un tsunami con su pr¨¦dicas conservadoras en la mayor¨ªa de los pa¨ªses centroamericanos. Algunos de estos movimientos satanizan a la mujer, como ocurri¨® en una comunidad rural de Nicaragua, donde una joven de 26 a?os fue quemada en una hoguera despu¨¦s de que el pastor del poblado afirmara que estaba ¡°pose¨ªda por el demonio¡±.

A media tarde del jueves el presidente de Giammattei ha respondido al repudio local y la alarma internacional que ha generado el decreto. A trav¨¦s de un mensaje publicado en Twitter, el mandatario ha afirmado que veter¨¢ el decreto cuando llegue a su oficina. ¡°Como representante de la unidad nacional, anuncio que de venir a este despacho la Iniciativa de Ley 5272, que da origen al Decreto 18-2022, ser¨¢ vetada porque viola la Constituci¨®n Pol¨ªtica de la Rep¨²blica y convenciones internacionales de las cuales Guatemala ha sido signataria¡±, ha informado Giammatti, en un giro inesperado a su discurso conservador y contrario al aborto.

¡°Desde la comunidad [LGBTI] hemos visto como otros pa¨ªses de Latinoam¨¦rica, como Colombia y Chile, avanzan con legislaciones que promueven derechos para las mujeres y parejas del mismo sexo. Es una burla para nuestra comunidad que en pleno siglo XXI el Congreso de Guatemala apruebe este decreto legislativo. Es una ley intencionalmente violenta, que nos niega recuperar la autonom¨ªa de nuestros cuerpos, el derecho de vivir en libertad e incita al odio¡±, afirma Lanz.

La arremetida contra los derechos de mujeres y comunidad LGBTI ha encontrado un firme impulsor en el presidente Giammattei, quien particip¨® en un congreso cristiano organizado en la sede del Gobierno, en el que afirm¨® que ¡°har¨¢ todo lo posible por respetar la vida desde su concepci¨®n¡±. El mandatario dijo en el evento que se trataba de un ¡°d¨ªa especial¡± para Guatemala. ¡°?Qu¨¦ pasar¨ªa si nos uni¨¦ramos? Hoy este evento es una invitaci¨®n a unirnos en proteger la vida desde su concepci¨®n hasta la muerte natural en sus cinco etapas¡±, dijo el mandatario. ¡°Mientras en otros pa¨ªses ahorita se est¨¢n tirando bombas, nosotros aqu¨ª le decimos s¨ª a la vida, alto a la guerra, s¨ª a la paz¡±, agreg¨® en referencia a la ofensiva rusa contra Ucrania.

Giammattei celebraba de esta manera un triunfo legislativo que sella su pol¨ªtica conservadora. La ley, que aumenta hasta diez a?os las penas de c¨¢rcel por abortar, fue aprobada por 102 votos, principalmente de la bancada oficialista, Vamos, y sus aliados. En la actualidad, en Guatemala solo est¨¢ permitido el aborto terap¨¦utico ¡ªcuando la vida de la madre est¨¢ en peligro¡ª. El hecho de que solo ocho congresistas votaran en contra del decreto legislativo da una idea del retroceso que sufre este pa¨ªs, donde adem¨¢s son perseguidos activistas de derechos humanos, fiscales y jueces que encaran la corrupci¨®n e impunidad, dos de los c¨¢nceres que carcomen a Guatemala. El Procurador de los Derechos Humanos guatemalteco, Jord¨¢n Rodas, ha instado al Gobierno a vetar el decreto que considera que viola los derechos humanos y ¡°contraviene lo establecido en leyes y convenciones internacionales aprobadas por el Estado de Guatemala¡±.

Por su parte, la activista Lanz insiste en que el decreto a?ade tensi¨®n a la comunidad LGBTI. ¡°Se han activado todas las alarmas y tambi¨¦n los miedos que tenemos porque hist¨®ricamente hemos sido rechazados¡±, afirma. ¡°Es preocupante que desde el Estado se nos etiquete como amenaza y peligro para la paz. Estas narrativas promueven la violencia y cr¨ªmenes de odio hacia nosotras y principalmente contra las mujeres trans¡±, agrega.

Los organismos que defienden los derechos humanos en el pa¨ªs centroamericano se movilizan para intentar frenar el ¨²ltimo paso para que la ley entre en vigencia, que es el visto bueno de la Corte Constitucional. Tienen pocas esperanzas, porque tachan a los jueces de ¡°corruptos¡± y de bailar al son que se toca desde la Presidencia. ¡°Vamos a presentar un amparo y una iniciativa por inconstitucionalidad¡±, dice Lanz, quien adem¨¢s informa que se organizan movilizaciones desde las redes sociales para manifestarse contra la legislaci¨®n. Si el proceso legal falla en Guatemala, estas organizaciones llevar¨¢n el caso a instancias internacionales, como la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). ¡°La lucha no termina, aqu¨ª nadie se cansa¡±, dice Lanz. ¡°No podemos permitirle al Estado que legisle sobre nuestros cuerpos e identidades en nombre de Dios y la familia tradicional. Las familias diversas existimos, quiera o no verlas el Gobierno. Siempre hemos resistido, aunque el Estado trate de invisibilizarlos¡±, concluye la activista.

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