EE UU pone en la mira a Rusia y China por la violaci¨®n de derechos humanos en 2021

El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, ha presentado este martes el informe anual, correspondiente a 2021, sobre la situaci¨®n de los derechos humanos en el mundo, un pormenorizado repaso, por pa¨ªses y continentes, sobre el estado de los derechos individuales, civiles, pol¨ªticos y laborales reconocidos en la Declaraci¨®n Universal de Derechos Humanos y otros convenios internacionales. ...

El secretario de Estado norteamericano, Antony Blinken, ha presentado este martes el informe anual, correspondiente a 2021, sobre la situaci¨®n de los derechos humanos en el mundo, un pormenorizado repaso, por pa¨ªses y continentes, sobre el estado de los derechos individuales, civiles, pol¨ªticos y laborales reconocidos en la Declaraci¨®n Universal de Derechos Humanos y otros convenios internacionales. Al igual que en 2020, los Gobiernos de Rusia y China fueron los que m¨¢s atropellaron los derechos fundamentales el a?o pasado, mientras que Espa?a recibe una menci¨®n por casos de abuso de la fuerza policial en la represi¨®n de varias protestas.

En el informe hecho p¨²blico este martes, Washington recopila las casos de pa¨ªses cuyos gobiernos han encarcelado injustamente, torturado o incluso asesinado a opositores pol¨ªticos, activistas, defensores de los derechos humanos o periodistas. En la lista aparecen en lugares destacados, adem¨¢s de Rusia y la Rep¨²blica Popular China, Corea del Norte, Nicaragua y Siria. El informe documenta abusos contra manifestantes pac¨ªficos prodemocracia en Birmania, Bielorrusia, Cuba, Hong Kong y Sud¨¢n. Destacan casos preocupantes de represi¨®n transfronteriza, como por ejemplo el desv¨ªo forzado por parte de Bielorrusia de un vuelo comercial internacional para arrestar a un periodista independiente cr¨ªtico con el Gobierno de Minsk.

Sobre China, el Departamento de Estado ha documentado asesinatos arbitrarios por parte del r¨¦gimen, as¨ª como desapariciones forzadas, casos de tortura y detenciones masivas de minor¨ªas. Caso especial es el ¡°genocidio¡± perpetrado por Pek¨ªn contra los uigures de la provincia aut¨®noma de Xinjiang, as¨ª como de otras minor¨ªas musulmanas de la regi¨®n. La persecuci¨®n sistem¨¢tica de los uigures ya fue denunciada en el informe de 2020. Otra menci¨®n expresa constata la dureza de las condiciones en algunas c¨¢rceles, ¡°que a veces ponen en peligro¡± la vida de los presos. Como en el caso de Rusia, el de China es tal vez el m¨¢s pormenorizado del documento, con atropellos que van de las restricciones a la libertad de creaci¨®n y creencia a las esterilizaciones forzosas o los abortos cometidos bajo intimidaci¨®n.

Aunque el informe no refleja los supuestos cr¨ªmenes de guerra en la invasi¨®n de Ucrania, que comenz¨® el 24 de febrero, el cap¨ªtulo relativo a Rusia abunda en violaciones de todo tipo, como el envenenamiento del l¨ªder opositor Alex¨¦i Navalni en agosto de 2020 con novichok, un agente nervioso utilizado tambi¨¦n en el atentado contra el exesp¨ªa Sergu¨¦i Skripal dos a?os antes. El documento del Departamento de Estado tambi¨¦n constata el seguimiento a manos de agentes del FSB (la agencia de inteligencia rusa, heredera de la antigua KGB) de decenas de opositores, as¨ª como su implicaci¨®n en la muerte de varios de ellos, en ocasiones disfrazada de suicidio. El texto agrupa esos episodios en un cap¨ªtulo titulado ¡°ordinaria privaci¨®n de la vida y otros asesinatos extrajudiciales o motivados pol¨ªticamente¡±, a manos de las autoridades.

Durante la presentaci¨®n del informe en Washington, Blinken asegur¨® que EE UU no est¨¢ en disposici¨®n de confirmar nada sobre el supuesto uso de armas qu¨ªmicas en Ucrania, pero dijo que se trata de una ¡°preocupaci¨®n real¡±. ¡°Estamos en conversaci¨®n directa con nuestros socios para tratar de determinar lo que realmente ha sucedido¡±, a?adi¨®.

Abusos en represi¨®n a protestas en Espa?a

Como otros pa¨ªses desarrollados, Espa?a tambi¨¦n recibe su bald¨®n. El informe refiere casos de abuso policial en la represi¨®n de protestas y, recogiendo las denuncias de partidos y ONG, cita los ejemplos de las manifestaciones tras la detenci¨®n y la condena del rapero Pablo Has¨¦l por enaltecimiento del terrorismo, en el transcurso de una de las cuales una mujer perdi¨® un ojo por el impacto de una bala de foam. Tambi¨¦n recuerda los sucesos de Linares (Ja¨¦n), en febrero de 2021, en los que dos polic¨ªas fueron detenidos por agredir a un hombre y a su hija, menor de edad, y que provocaron varias protestas populares. Con respecto a los denominados presos pol¨ªticos del proc¨¨s (l¨ªderes independentistas catalanes a los que el Tribunal Supremo conden¨® en 2019 por sedici¨®n), Washington hace una breve menci¨®n: ¡°Ni el Gobierno ni ninguna organizaci¨®n internacional de derechos humanos apoy¨® esa reclamaci¨®n [independentista]¡±, relativa a su presunta condici¨®n de presos pol¨ªticos.

Pese al sombr¨ªo panorama global, el documento tambi¨¦n arroja se?ales de progreso y ciertos destellos de esperanza. En Irak, las elecciones legislativas celebradas el a?o pasado fueron ¡°m¨¢s cre¨ªbles y transparentes que en 2018¡å, seg¨²n Washington. En Botsuana, un tribunal promovi¨® los derechos de las personas LGBTQI+ al defender la despenalizaci¨®n de las relaciones entre personas del mismo sexo. En Turkmenist¨¢n, todos los testigos de Jehov¨¢ objetores de conciencia al servicio militar encarcelados fueron indultados, una victoria para la libertad religiosa.

A diferencia de su predecesor, el aislacionista Donald Trump, el presidente Joe Biden ha demostrado desde el primer minuto de su mandato su compromiso con el respeto a los derechos humanos, al devolver a EE UU al seno del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, con sede en Ginebra, de donde el republicano Trump hab¨ªa retirado al pa¨ªs en protesta por el trato que la organizaci¨®n daba a Israel.

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