Los niveles de violencia entran en ebullici¨®n en Ecuador
El atentado que dej¨® cinco muertos en Guayaquil es la ¨²ltima amenaza del narco al Estado en un pa¨ªs donde se han registrado 145 ataques con explosivos desde enero
Nadie quiere hablar y nadie se siente seguro en Guayaquil. El nivel de violencia en Ecuador ha escalado hasta llegar al punto de ebullici¨®n tras el atentado de este fin de semana, que dej¨® cinco muertos, dos heridos a¨²n en estado cr¨ªtico y un pa¨ªs consciente de que los tiempos de tranquilidad se han extinguido. El ataque con explosivos, de madrugada y en un barrio del suburbio guayaquile?o, traslada al Estado el mensaje de que la acci¨®n del narcotr¨¢fico ha elevado el tono y est¨¢ dispuesta a cobrarse v¨ªctimas civiles. Hasta ahora, la narrativa oficial hablaba de peleas de territorio entre bandas del crimen organizado.
El ministro de Interior, Patricio Carrillo, lo diagnostica ya como una ¡°ola de violencia irracional¡± y admite que el atentado podr¨ªa ser una represalia contra el Estado por las incautaciones de droga del fin de semana: 250 kilos de coca¨ªna en un solo operativo a las afueras de Guayaquil. La otra teor¨ªa de la investigaci¨®n es que fue un ataque dirigido a un residente del barrio de El Cristo del Consuelo, una zona de escasos recursos desatendida desde siempre, conocido como Cucaracha. Sus vecinos, en cambio, lo defienden: lo ¨²nico que hizo el hombre de 42 a?os, que result¨® herido leve, era regentar una discoteca clandestina donde, precisamente, hab¨ªa una fiesta el s¨¢bado cuando estallaron los explosivos a las dos de la ma?ana.
¡±Son aficionados que han aprendido desde la qu¨ªmica y que usan elementos caseros como acetona y otros¡±, detall¨® este lunes el responsable de la pol¨ªtica de seguridad del pa¨ªs. ¡°No es lo tradicional como dinamita, pentolita o C4; es un mecanismo que se puede adquirir comercialmente en cualquier lugar y lo van construyendo¡±, reconoci¨® alarmado, tras visitar el barrio marcado con una cicatriz de fachadas destruidas y tejados inexistentes en nueve casas que ya eran humildes antes de la explosi¨®n.
El gran foco de la violencia en Ecuador est¨¢ concentrado en Guayaquil, que es a su vez la ciudad por cuyos puertos sale m¨¢s droga de todo el pa¨ªs. La ONU ha puesto en su ¨²ltimo informe -el Reporte Mundial de Drogas de 2022- a Ecuador en el tercer lugar con m¨¢s incautaciones y considera al pa¨ªs ahora tambi¨¦n como un punto clave de la ruta de distribuci¨®n ilegal. El puerto de Guayaquil, de hecho, es tambi¨¦n el tercer punto de salida de droga, camuflada en contenedores de mercanc¨ªas contaminados, con destino hacia Estados Unidos y Europa. En las fotos de las incautaciones, los fardos colocados en el suelo por la polic¨ªa para su exhibici¨®n cubren m¨¢s superficie.
La ciudad costera ostenta tambi¨¦n el r¨¦cord en otras dos cifras que perfilan el nivel al que han calado las bandas criminales en la rutina de los guayaquile?os: de los m¨¢s de 2.500 asesinatos registrados en este a?o, un tercio (866) se produjeron en Guayaquil y en las poblaciones vecinas. Es, adem¨¢s, el punto m¨¢s caliente del pa¨ªs en donde se han cometido la mitad de los ataques con explosivos. De 145 en todo el territorio nacional, la capital econ¨®mica ecuatoriana registr¨® 72. Pero ninguno de la magnitud del atentado de este s¨¢bado, que dej¨® un boquete de metro y medio con una profundidad de casi 40 cent¨ªmetros.
La escalada de violencia hab¨ªa ido dejando mensajes de advertencia en los ¨²ltimos meses, con la aparici¨®n de dos cuerpos colgados en un puente en Dur¨¢n, una ciudad sat¨¦lite de Guayaquil, y con la colocaci¨®n de coches bombas en zonas residenciales o comerciales. Y este lunes, en pleno estado de excepci¨®n, otras tres personas fueron asesinadas en un cruce de balas, agravando la sensaci¨®n de inseguridad que ha acallado a quienes viven cerca de los peque?os traficantes y de los miembros de las bandas criminales.
Nadie quiere denunciar, tal y como ha reconocido el ministro de Interior tras el atentado, pese a que hay una recompensa de 10.000 d¨®lares por dar informaci¨®n sobre lo sucedido. Pero el temor se ha extendido tambi¨¦n fuera del entorno de esas bandas. Los due?os de peque?os comercios ahora tienen que pagar a las mafias ¡°vacunas extorsivas¡± mensuales para poder funcionar sin miedo a un ataque y los guayaquile?os han aprendido a modificar sus rutinas para no exponerse a m¨¢s riesgo del necesario.
Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.