La periodista Ksenia Sobchak, hija del mentor de Putin, abandona Rusia

Ksenia Sobchak, hija del mentor pol¨ªtico del presidente ruso, Vlad¨ªmir Putin, y periodista ¡ªen unas ocasiones, opositora; en otras, defensora del sistema instaurado por el Kremlin¡ª, ha sido la ¨²ltima figura sumada a la larga lista de cr¨ªticos que han huido de Rusia. Sobchak ha cruzado la frontera despu¨¦s de saber que su domicilio y las oficinas de su empresa hab¨ªan sido registradas y tras la detenci¨®n de dos de sus colaboradores bajo la acusaci¨®n de haber extorsionado al jefe del gigante industrial estatal Rostec, el exagente del KGB Sergu¨¦i Ch¨¦mezov. ¡°No me lo creo en absoluto, y espero que todo est¨¦ arreglado pronto y quede en que fue una tonter¨ªa. Si no, habr¨¢ sido una redada en mi editorial, la ¨²ltima libre en Rusia¡±, denunci¨® la activista el mi¨¦rcoles en sus redes sociales, la ¨²ltima vez que abord¨® este tema en p¨²blico.

Ksenia Sobchak es hija de Anatoli Sobchak, una figura clave en la Rusia de los noventa por su cercan¨ªa a Boris Yeltsin y por haber sido el alcalde de San Petersburgo que introdujo en la pol¨ªtica al agente del KGB Putin. Su viuda, Liudmila Narusova, es hoy senadora en el Consejo de la Federaci¨®n. Sobchak, la hija, fue presentadora en la televisi¨®n independiente Dozhd, cerrada por el Kremlin al inicio de la guerra, y pol¨ªtica, ¨²nica candidata independiente aprobada por la junta electoral del Kremlin para las presidenciales de 2018, donde obtuvo un 1,6% del apoyo.

El conglomerado empresarial Rostec es, por su parte, uno de los m¨¢s importantes del pa¨ªs, con m¨¢s de medio millar de firmas de alta tecnolog¨ªa civiles y militares. Su director, que tiene el rango de general, acus¨® a Sobchak y sus socios de haber intentado obtener 11 millones de rublos (unos 180.000 euros) a cambio de no criticar al gigante estatal. Ch¨¦mezov es precisamente uno de los altos cargos sancionados por la anexi¨®n de Crimea en 2014, aunque ello no le hab¨ªa impedido mantener un yate y dos residencias en Espa?a hasta este a?o.

El martes fue arrestado el director de la empresa de medios de Sobchak, Kirill Sujanov, y un d¨ªa despu¨¦s fue el turno del exdirector de la revista Tatler, Arian Romanovski. Seg¨²n la prensa rusa, Sujanov fue detenido en un restaurante cuando los representantes de Ch¨¦mezov le entregaban 800.000 rublos, m¨¢s de 12.000 euros. ¡°Estoy preparado para declararme culpable y disculparme p¨²blicamente con la v¨ªctima¡±, afirm¨® el directivo en un tribunal de Mosc¨².

Sobchak huy¨® a la Uni¨®n Europea a trav¨¦s de Bielorrusia. ¡°Ella se encuentra en Lituania y, como ciudadana israel¨ª, con pasaporte israel¨ª, no le hace falta visado. Si no me equivoco, puede entrar y salir durante 90 d¨ªas¡±, confirm¨® el jefe del Departamento de Seguridad del pa¨ªs b¨¢ltico, Darius Jauniskis, al diario 15Min.

El peri¨®dico israel¨ª Haaretz revel¨® en abril que Sobchak hab¨ªa recibido la nacionalidad del pa¨ªs mediterr¨¢neo. Al estallar la guerra, miles de ciudadanos rusos con antepasados jud¨ªos iniciaron los mismos tr¨¢mites para tener un salvoconducto en el caso de que se cerrasen las fronteras, temor que ha reavivado el Kremlin estos dos ¨²ltimos meses con la movilizaci¨®n para el frente y el nuevo nivel de alarma aplicado a las regiones fronterizas con Ucrania.

El pol¨ªtico disidente ruso Ilia Yashin, en prisi¨®n actualmente, ha planteado en las redes sociales la tesis de que la acusaci¨®n vertida contra el equipo de Sobchak podr¨ªa ser una trampa. ¡°En agosto, cuando estaba en el centro de detenci¨®n preventiva de Kapotnya, trajeron a un chico a nuestra celda. Junto a un par de amigos moderaban varios canales pol¨ªticos de Telegram, donde publicaban evidencias comprometedoras de funcionarios. Entre ellos, [Sergu¨¦i] Ch¨¦mezov. Al final, recibieron dinero de los asistentes del jefe de Rostec a cambio de eliminar sus publicaciones, pero luego ¨¦l los denunci¨®. Los tres fueron encarcelados¡±.

La figura de Sobchak es controvertida tambi¨¦n entre la oposici¨®n. Algunos la acusan de haber servido al Kremlin. Le echaron en cara recientemente que en su canal de YouTube Peligro: Sobchak recomendase a quienes han recibido una carta de movilizaci¨®n que acudiesen a los centros de reclutamiento y confiasen en la justicia. Tras su huida, le recordaron ese mismo v¨ªdeo. Sin embargo, tambi¨¦n es cierto que su canal ha cubierto temas espinosos, como las brutales torturas a presos en las c¨¢rceles rusas.

La huida de Rusia no garantizar¨ªa a Sobchak la inmunidad. Si la justicia rusa confirma formalmente la acusaci¨®n de que cre¨® un grupo criminal, un delito grave, las autoridades rusas podr¨ªan solicitar su b¨²squeda internacional y extradici¨®n. ¡°Irse fuera no es la panacea. Hay ciertos mecanismos que, a pesar de la tensi¨®n actual en la cooperaci¨®n internacional con Rusia, a¨²n funcionan¡±, afirm¨® al diario Ura el director del Colegio de Abogados de Mosc¨², Sergu¨¦i Dzhorin. Sin embargo, otro conocido letrado, Sergu¨¦i Badamshin, recalc¨® en sus redes sociales que, hasta ahora, Sobchak no ha recibido ninguna notificaci¨®n y, por tanto, no est¨¢ inculpada.

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