Bolsonaristas radicales intentan invadir la sede de la Polic¨ªa Federal en Brasilia
Simpatizantes de la extrema derecha tambi¨¦n incendian veh¨ªculos en la capital de Brasil el d¨ªa en que Lula fue ratificado por la justicia electoral como presidente del pa¨ªs
Un grupo de simpatizantes del presidente brasile?o Jair Bolsonaro intent¨® invadir la sede de la Polic¨ªa Federal en Brasilia la noche del lunes, pocas horas despu¨¦s de que Luiz In¨¢cio Lula da Silva fuera ratificado por la justicia electoral como presidente electo en una ceremonia protocolaria. Unas pocas decenas de v¨¢ndalos, seg¨²n las im¨¢genes divulgadas por la prensa local, intentaron entrar a la fuerza en la sede central de la polic¨ªa en la capital, pero fueron reprimidos con bombas de gas lacrim¨®geno y balas de goma por las fuerzas de seguridad. Los bolsonaristas reaccionaron lanzando palos y piedras en direcci¨®n a los agentes. Por el momento no hay informaciones definitivas sobre el n¨²mero de heridos ni detenidos en los incidentes.
Los seguidores de la extrema derecha tambi¨¦n incendiaron al menos cinco autobuses y decenas de coches en las inmediaciones de la sede policial, lo que oblig¨® a desplegar un fuerte dispositivo policial por parte del gobierno del Distrito Federal. Parte de los manifestantes pertenec¨ªa al campamento que desde hace m¨¢s de un mes funciona frente al cuartel general de las Fuerzas Armadas para pedir una intervenci¨®n militar que evite que Lula regrese al poder.
El detonante de las protestas fue la detenci¨®n del ind¨ªgena Ac¨¢cio Serere Xavante, un conocido simpatizante de Bolsonaro en la capital que desde hace tiempo participa en las concentraciones golpistas. El arresto temporal del ind¨ªgena se dio a petici¨®n de la Fiscal¨ªa y por orden del juez Alexandre de Moraes, que lidera las investigaciones sobre los ataques de la extrema derecha al orden democr¨¢tico. La Fiscal¨ªa afirm¨® que el cacique incita a sus seguidores a cometer cr¨ªmenes, y que hay un ¡°claro objetivo de instigar a la poblaci¨®n a intentar, con el empleo de violencia o grave amenaza, abolir el Estado Democr¨¢tico de Derecho, impidiendo la toma de posesi¨®n del presidente¡±.
Los disturbios en la capital, que empezaron a ser controlados avanzada la noche, hicieron temer por la seguridad de Lula, que estaba alojado en un hotel cercano a la zona de los incidentes. Cerca de 60 agentes de la Polic¨ªa Militar se posicionaron frente a la entrada haciendo un cord¨®n de seguridad. El futuro ministro de Justicia, Fl¨¢vio Dino, quiso lanzar un mensaje de tranquilidad y desmentir los bulos que ya empiezan a correr en los c¨ªrculos bolsonaristas sobre la integridad f¨ªsica del l¨ªder de la izquierda. ¡°En ning¨²n momento estuvo expuesto a ning¨²n riesgo; [Lula] est¨¢ en absoluta seguridad y as¨ª seguir¨¢ hasta el momento de la toma de posesi¨®n y hasta el pleno ejercicio de sus funciones¡±, dijo en una improvisada declaraci¨®n a los medios. Tambi¨¦n asegur¨® que los incidentes no funcionar¨¢n como coacci¨®n y que el Estado seguir¨¢ responsabilizando a quienes atentan contra la democracia.
Los incidentes vuelven a poner el foco en las medidas de seguridad de la toma de posesi¨®n de Lula el d¨ªa de A?o Nuevo. A pesar de que la seguridad en Brasilia te¨®ricamente se hab¨ªa reforzado este lunes por la ceremonia de diplomatura de Lula, el secretario de Seguridad del Distrito Federal, J¨²lio Danilo Souza, se neg¨® a admitir fallos. Bolsonaro, que sigue siendo el presidente hasta que el 1 de enero Lula tome las riendas del pa¨ªs, no se pronunci¨® sobre los actos violentos perpetrados por sus seguidores.
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