La UE impone un l¨ªmite al precio de los derivados del petr¨®leo ruso

La Uni¨®n Europea ya tiene listo el tope al precio de los derivados del petr¨®leo ruso. Ser¨¢n 100 d¨®lares por barril para los productos llamados premium (di¨¦sel, fuel para aeronaves) y un descuento de 45 d¨®lares por barril para el resto (parafinas, productos para la industria qu¨ªmica). Esta medida complementa la que se aprob¨® diciembre, que impuso directamente un l¨ªmite para el crudo, en este caso de 60 d¨®lares o un 5% por debajo del precio l¨ªmite del mercado. El castigo, que se suma al resto de las sanciones aprobadas por la invasi¨®n de Ucrania, ser¨¢ aplicado tanto por los Estados miembros de la UE como por los pa¨ªses del G-7.

El plazo para que esta sanci¨®n a la industria petrolera rusa estuviera lista acababa el domingo. El 5 de febrero entra en vigor el veto a la compra de derivados del crudo de los Urales que se autoimpusieron los pa¨ªses de la UE. Algo similar sucedi¨® en diciembre con el crudo sin refinar. El 5 de diciembre se activ¨® el veto a la compra de este producto, algo ya pactado en mayo por los socios comunitarios, y d¨ªas antes de que entrara en vigor se complement¨® con un tope de precios.

Los l¨ªmites de precios no se dirigen a los pa¨ªses de la UE y del G-7. Estos, con la excepci¨®n del crudo que llega por oleoducto (fundamentalmente, Hungr¨ªa), acordaron en primavera dejar de comprar petr¨®leo de los Urales y sus derivados en diciembre y febrero, respectivamente. Se buscaba restar muchos miles de millones de ingresos al Kremlin y dejar de financiar su maquinaria de guerra contra Ucrania, ya que solo en 2021 estas importaciones superaron los 70.000 millones de euros.

Pero esa medida tiene un impacto limitado, ya que solo se dirige a aquellos que voluntariamente la asumen. As¨ª que para ganar adeptos, la UE y el G-7, es decir, los Veintisiete m¨¢s Estados Unidos, Canad¨¢, Reino Unido y Jap¨®n, decidieron crear estos topes a los productos cotizados en los mercados mundiales de materias primas. La intenci¨®n es que m¨¢s pa¨ªses se sumen voluntariamente a las sanciones. ?Por qu¨¦ tendr¨ªan que hacerlo? Porque las compa?¨ªas occidentales (navieras, aseguradoras, reaseguradoras, intermediarios) tienen una presencia abrumadora en este tipo de transacciones y no pueden participar en estas operaciones si el pa¨ªs comprador no asume el tope.

La negociaci¨®n en esta ocasi¨®n ha sido mucho m¨¢s r¨¢pida que la primera vez. Entonces, las exigencias de Polonia de imponer un l¨ªmite m¨¢s bajo dilataron mucho el pacto. Esta vez tambi¨¦n Varsovia y los pa¨ªses m¨¢s duros con Rusia (Estonia, Lituania y Letonia) reclamaban m¨¢s ambici¨®n en el castigo, aunque no lo ped¨ªan tanto para los derivados del crudo como para el crudo sin refinar, ya que dos meses despu¨¦s de aprobarse la medida, esta deb¨ªa revisarse.

El resto de los socios y la propia Comisi¨®n Europea se han mostrado en desacuerdo con esa visi¨®n. El Ejecutivo comunitario se?ala que el tope aplicado en los ¨²ltimos dos meses est¨¢ funcionando y cumple con su doble objetivo: restar ingresos a Rusia y, al mismo tiempo, mantener el petr¨®leo de los Urales en el mercado para que no se disparen los precios. Desde que entr¨® en vigor, la cotizaci¨®n del crudo ruso se ha mantenido por debajo de esos 60 d¨®lares pr¨¢cticamente todo el tiempo. En cambio, el Brent, la referencia del mercado de petr¨®leo en Europa, se ha mantenido en una franja que est¨¢ entre los 75 y los 90 d¨®lares.

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