¡®Qatargate¡¯: La Defensora del Pueblo Europea pide explicaciones por los viajes pagados por Qatar a un alto funcionario de la Comisi¨®n
El Ejecutivo europeo admite que un director general se aprob¨® a s¨ª mismo un viaje a Doha con los gastos pagados cuando su equipo negociaba un acuerdo con Qatar y reconoce que est¨¢ trabajando en reglas m¨¢s estrictas para evitar conflictos de inter¨¦s
El Qatargate lleva sac¨¢ndole los colores a las instituciones europeas desde que, en diciembre, la polic¨ªa belga destapara una trama de corrupci¨®n presuntamente lanzada por Qatar (y con sospechas sobre otros Estados como Marruecos) que tiene desde entonces a varios eurodiputados y exparlamentarios detenidos a la espera de juicio. El sonrojo ha llegado ahora a la Comisi¨®n Europea, que ven¨ªa preci¨¢ndose de los est¨¢ndares m¨¢s estrictos de transparencia en Bruselas. La Defensora del Pueblo Europea ha pedido explicaciones al Ejecutivo de la UE sobre los viajes a Doha pagados por Qatar al director general de su departamento de transporte. Adem¨¢s, como ha reconocido este lunes un portavoz de la Comisi¨®n, ese alto funcionario, el de m¨¢s rango de su equipo, se autoriz¨® a s¨ª mismo dichos viajes tras constatar, sin ninguna evaluaci¨®n externa, que no ten¨ªa conflicto de intereses pese a que su equipo estaba, en esos mismos momentos, negociando un acuerdo de aviaci¨®n con el Gobierno catar¨ª.
En una carta enviada a la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, la ombudsman o Defensora del Pueblo, Emily O?Reilly, hace referencia a las revelaciones realizas por el diario Politico sobre Henrik Hololei, el m¨¢ximo responsable de la direcci¨®n general de Transporte de la Comisi¨®n, que viaj¨® nueve veces de forma gratuita en Qatar Airways entre 2015 y 2021. Seg¨²n ha confirmado este lunes la propia Comisi¨®n, en al menos uno de esos viajes (de varios d¨ªas) el director general tambi¨¦n tuvo pagados como m¨ªnimo los gastos de hotel en Doha.
En los pasados d¨ªas, desde que empezaron las revelaciones de estos viajes, la Comisi¨®n ha subrayado que, en el momento de los hechos, y de acuerdo con las normas internas vigentes entonces, no se constat¨® ning¨²n conflicto de intereses que pudiera impedir dichos viajes costeados por Qatar o una empresa del pa¨ªs del Golfo, pese a que Hololei los realiz¨® cuando su equipo estaba negociando un acuerdo de aviaci¨®n con Qatar. Pero seg¨²n ha reconocido este lunes un portavoz del Ejecutivo europeo, fue el propio Hololei el que se aprob¨® a s¨ª mismo dichos viajes, ya que al ser el m¨¢ximo responsable de su departamento, es el encargado de autorizar los viajes tanto a su equipo como a s¨ª mismo, sin necesidad de consultar ¡ªpuede hacerlo, pero no es obligatorio¡ª a otra autoridad sobre la idoneidad del viaje. Una paradoja que a la Comisi¨®n le ha costado mucho explicar y que, seg¨²n ha asegurado, est¨¢ en v¨ªas de ser cambiada, en un intento de endurecer los requisitos para evitar conflictos de inter¨¦s.
Esa promesa no ha impedido que O¡¯Reilly quiera saber m¨¢s. Por ejemplo, qu¨¦ cambios se aplicar¨¢n a las normas internas, algo que la Comisi¨®n ha asegurado le har¨¢ saber en el plazo proporcionado por la propia O¡¯Reilly: hasta el 3 de junio pr¨®ximo. Pero aunque subraya que las preguntas de O¡¯Reilly no implican que haya sospechas de una mala gesti¨®n, se ha apresurado a adelantar pistas: las reglas se van a ¡°endurecer¡± y las posibilidades de aceptar viajes pagados ser¨¢n ¡°restringidas¡±; solo podr¨¢n correr con los gastos organismos como Naciones Unidas, el G-7 o G-20. La idea es que estas nuevas reglas se apliquen ¡°lo antes posible¡±.
La Comisi¨®n tambi¨¦n ha empezado a adelantar otros datos requeridos por la Defensora: asegura que los casos de viajes de funcionarios de la Comisi¨®n pagados por terceros son ¡°extremadamente raros¡±, m¨¢s a¨²n si son fuera de la UE. Solo el 1,5% de las misiones de miembros de la Comisi¨®n Europea son pagadas de alguna forma (total o parcialmente) por terceras partes. De ellas, la cifra de los directores generales que participan en este tipo de misiones son m¨¢s ¡°limitadas¡± a¨²n, solo entre 0,1% y 0,2% de los casos, y ¡°en su mayor¨ªa¡±, para eventos dentro de la UE.
La larga investigaci¨®n que contin¨²a en manos de la justicia belga hace temer a algunos analistas que se pierda el ¨ªmpetu renovador que inund¨® a las instituciones en Bruselas nada m¨¢s estallar el Qatargate. Actualmente, siguen bajo detenci¨®n preventiva dos eurodiputados en activo, la exvicepresidenta de la Euroc¨¢mara Eva Kaili y el socialista belga Marc Tarabella, a quienes les ha sido denegada recientemente la libertad condicional. Un tercer parlamentario, el italiano Andrea Cozzolino, est¨¢ bajo detenci¨®n domiciliaria en Italia a la espera de que la justicia decida sobre su extradici¨®n a B¨¦lgica. A ellos se une el presunto cabecilla de la trama, el exeurodiputado Pier Antonio Panzeri, que ha firmado un acuerdo con la justicia para hacer revelaciones a cambio de una pena menor. Su presunta mano derecha en la trama por la que se han incautado 1,5 millones de euros en efectivo ¡ªse sospecha que las cifras manejadas eran superiores¡ª, el asistente parlamentario, Francesco Giorgi, fue puesto en libertad con un brazalete electr¨®nico para poder ocuparse de la hija de dos a?os que tiene con su pareja, la griega Kaili.
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