Biden sostiene que ¡°los aires est¨¢n cambiando a favor de la democracia¡±
El presidente estadounidense ha participado en la segunda edici¨®n de la Cumbre Internacional por la Democracia, uno de sus proyectos estrella en pol¨ªtica exterior
Para George W. Bush fue la libertad. Para Barack Obama, la lucha contra las armas nucleares. Cada presidente estadounidense tiende a elegir un concepto que aspira a que sea su legado y sobre el que trata de movilizar al resto del mundo. Para Joe Biden, que asumi¨® el poder apenas d¨ªas despu¨¦s del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, es la democracia.
Biden celebra esta semana su segunda cumbre internacional sobre la defensa de la democracia, en...
Para George W. Bush fue la libertad. Para Barack Obama, la lucha contra las armas nucleares. Cada presidente estadounidense tiende a elegir un concepto que aspira a que sea su legado y sobre el que trata de movilizar al resto del mundo. Para Joe Biden, que asumi¨® el poder apenas d¨ªas despu¨¦s del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, es la democracia.
Biden celebra esta semana su segunda cumbre internacional sobre la defensa de la democracia, entre cr¨ªticas que acusan a esta reuni¨®n de ser poco m¨¢s que un c¨²mulo de discursos vac¨ªos y Estados Unidos, un pa¨ªs que no puede dar lecciones. El presidente estadounidense replica que acontecimientos como la invasi¨®n rusa de Ucrania, comenzada tres meses despu¨¦s de la primera cumbre, dejan clara la necesidad de defender ese principio m¨¢s que nunca.
La democracia, asegur¨®, funciona. ¡°Cuando nos reunimos en 2021 (en la primera cumbre) la sensaci¨®n generalizada en el mundo era que la democracia hab¨ªa dejado atr¨¢s sus mejores d¨ªas. Pero ahora la historia es distinta (...) Hay verdaderos indicios de que los aires est¨¢n cambiando¡±, sosten¨ªa Biden. ¡°Las democracias no se est¨¢n debilitando, est¨¢n m¨¢s fuertes. Y las autocracias no se est¨¢n fortaleciendo, est¨¢n m¨¢s d¨¦biles¡±.
Su Administraci¨®n ha prometido durante esta cumbre, que concluir¨¢ el jueves y que coorganizan Costa Rica, Holanda, Corea del Sur y Zambia, 690 millones de d¨®lares (636 millones de euros) para la lucha contra la corrupci¨®n, la ayuda a la celebraci¨®n de elecciones libres e imparciales en el mundo y el desarrollo de tecnolog¨ªas que apoyen a gobiernos democr¨¢ticos. En la primera cumbre, en noviembre de 2021, hab¨ªa anunciado 400 millones de d¨®lares.
Casi inmediatamente despu¨¦s de Biden intervino el presidente ucranio, Volod¨ªmir Zelenski, que inst¨® a redoblar el apoyo a su pa¨ªs en la ¡°guerra en contra de la libertad y la democracia¡±.
Entre los pa¨ªses asistentes se encontraba Espa?a. El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, intervino v¨ªa v¨ªdeo para asegurar que ¡°Espa?a es una democracia vibrante y s¨®lida¡± y que durante su mandato el Ejecutivo ¡°ha aumentado la transparencia¡± en el Ejecutivo.
M¨¢s de 120 pa¨ªses participan en la cumbre. Todos los que asistieron a la primera cumbre, adem¨¢s de un pu?ado que no recibieron invitaci¨®n entonces, desde Honduras a Tanzania y Mozambique. En un gesto de repulsa a su deriva autocr¨¢tica, otros pa¨ªses aliados no fueron convocados ni entonces ni ahora, desde Arabia Saud¨ª o Egipto a los miembros de la OTAN Turqu¨ªa y Hungr¨ªa.
Esa misma lista de invitados ha suscitado cr¨ªticas, como ya ocurri¨® en la primera edici¨®n. Entre los participantes se encuentra Israel, cuyo primer ministro, Benjam¨ªn Netanyahu, ha tratado de imponer una reforma judicial que debilitar¨ªa la independencia de los magistrados; el jefe de Gobierno se ha visto obligado a aparcar la medida despu¨¦s de importantes manifestaciones de protesta en las calles del pa¨ªs y tras una serie de presiones de otros gobiernos, muy especialmente la Casa Blanca. En la cumbre, Netanyahu, que ha intervenido con un mensaje grabado, destacaba su convicci¨®n de que finalmente se acabar¨¢ llegando a un compromiso pol¨ªtico sobre su propuesta, que considera compatible con las libertades civiles. El primer ministro tambi¨¦n ha subrayado que la relaci¨®n entre EE UU e Israel es inquebrantable.
No es el ¨²nico participante que ha dado pasos poco democr¨¢ticos en los ¨²ltimos tiempos. India ha expulsado del parlamento al pol¨ªtico de oposici¨®n Rahul Gandhi, despu¨¦s de que el heredero de la dinast¨ªa que gobern¨® el pa¨ªs durante d¨¦cadas lanzara una serie de cr¨ªticas al primer ministro, Narendra Modi. En Estados Unidos suscita preocupaci¨®n la legislaci¨®n en M¨¦xico que impone cortapisas al Instituto Nacional Electoral, el organismo encargado de supervisar los procesos electorales.
Pero la Casa Blanca asegura que la lista de invitados no pretende juzgar qu¨¦ pa¨ªses son democr¨¢ticos y cu¨¢les no. ¡°Estamos comprometidos a apoyar las instituciones democr¨¢ticas, los derechos humanos, el Estado de derecho, la libertad de prensa. Las decisiones en torno a si a?ad¨ªamos m¨¢s pa¨ªses a la invitaci¨®n se tomaron con esas ideas en mente. Los que han sido invitados por primera vez en 2023 han demostrado una voluntad pol¨ªtica clara de impulsar los temas de la cumbre¡±, aseguraba en v¨ªsperas de la reuni¨®n virtual el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby.
Otras cr¨ªticas denuncian que no se ha invitado a los defensores de la democracia en los pa¨ªses que no han acudido a la cumbre. O que no existe un mecanismo que obligue a los pa¨ªses a cumplir los m¨ªnimos compromisos adoptados en la primera reuni¨®n. La cumbre tampoco cuenta con herramientas para castigar a los pa¨ªses autocr¨¢ticos. A Estados Unidos se le reprocha que no ha puesto un gran ¨¦nfasis en la defensa de los derechos humanos en su pol¨ªtica exterior; y que su propia democracia dista mucho de ser perfecta.
Aunque no todo son opiniones contrarias. La cumbre, seg¨²n sus partidarios, es necesaria para enviar un mensaje positivo sobre la democracia tras golpes como el sufrido en el ataque al Capitolio. La organizaci¨®n proderechos humanos Freedom House calcula que la libertad global retrocedi¨® el a?o pasado por d¨¦cimo s¨¦ptimo a?o consecutivo.
La cumbre ¡°aporta valor a?adido y puede dar pie a una mayor coordinaci¨®n y cooperaci¨®n internacional en un momento de declive democr¨¢tico¡±, escribe Laura Thornton, de la Alianza para Asegurar la Democracia, un programa del centro de an¨¢lisis German Marshall Fund de Estados Unidos.
En el pasado m¨¢s reciente, las aspiraciones de legado de los presidentes estadounidenses no se llegaron a consumar. Bush, que empez¨® su defensa de la libertad con la cumbre de las Azores y la invasi¨®n de Irak, tuvo que renunciar a esa ambici¨®n y apelar en cambio a la colaboraci¨®n mundial -en forma de un reci¨¦n nacido G20- para apagar los fuegos de la crisis financiera estallada en las postrimer¨ªas de su mandato. El fruto m¨¢s tangible de los esfuerzos de Obama para la no proliferaci¨®n, el tratado New Start de control de armas nucleares entre Washington y Mosc¨², se ha venido abajo con el anuncio ruso de que no lo renovar¨¢.
Mientras tanto, Biden acaba de anunciar, junto al presidente surcoreano Yoon Suk-yeol, una tercera edici¨®n de la cumbre, aunque que esta vez Se¨²l ser¨¢ la anfitriona.
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