El drama de los desaparecidos se extiende en la guerra de Sud¨¢n
Desde el inicio de los combates entre el ej¨¦rcito y los paramilitares en abril se han registrado unas 200 desapariciones solo en la zona de Jartum, la capital
En el selfi, Arwal aparece con una sonrisa t¨ªmida, una camisa de colores alegres y trenzas recogidas, posando al lado de un ni?o peque?o con un refresco en las manos. La imagen la colg¨® el domingo por la noche su hermano, Angelo, en un grupo p¨²blico de Facebook. Iba acompa?ada de una descripci¨®n breve y una petici¨®n directa: ¡°Arwal est¨¢ desaparecida desde que estall¨® la guerra en Sud¨¢n entre el ej¨¦rcito y las paramilitares Fuerzas de Apoyo R¨¢pido a mediados de abril en la capital del pa¨ªs, Jartum, por lo que cualquier informaci¨®n que se les pueda proporcionar ser¨ªa al menos un hilo del que tirar para intentar encontrarla¡±
Dos d¨ªas antes, una de las administradoras del grupo public¨® el caso de otro joven llamado Muhammad Abdulrahim que fue detenido por los paramilitares la semana pasada, cuando regresaba a casa despu¨¦s de haber acompa?ado fuera de Jartum a un grupo de vecinos heridos para ser atendidos en alg¨²n hospital. Miembros de las Fuerzas de Apoyo R¨¢pido se lo llevaron. Su entorno contin¨²a sin saber nada de ¨¦l.
A medida que pasan las semanas y los combates en Sud¨¢n contin¨²an sin visos de remitir, se va haciendo cada vez m¨¢s notoria la tragedia no solo de los cientos de muertos, miles de heridos y cientos de miles de desplazados, sino tambi¨¦n la de los desaparecidos. Se trata de un drama agravado por la ausencia del Estado y por la inseguridad total que reina en las zonas donde se concentran los choques, como Jartum y la regi¨®n de Darfur, donde los paramilitares se han desplegado con fuerza y est¨¢n sembrando el terror.
Desde el inicio de los combates, el 15 de abril, y hasta el 20 de mayo, se han documentado 229 casos de desaparecidos, seg¨²n el recuento de una iniciativa local dedicada a ayudar a encontrar a personas en paradero desconocido. La mayor¨ªa son hombres de entre 20 y 35 a?os, y una quincena son menores de edad. Solo 35 han regresado con sus familias despu¨¦s de haber desaparecido, y otros seis han sido localizados muertos.
La inmensa mayor¨ªa de estas desapariciones ocurrieron en Jartum: unos 200 fueron vistos por ¨²ltima vez en la capital. En muchos casos se desvanecieron tras haber sido detenidos o haberse topado con los paramilitares, que controlan buena parte de la ciudad y se han desplegado y atrincherado en muchas zonas y edificios residenciales.
Debido al caos en el que se ha sumido la zona de Jartum, la Iniciativa de los Desaparecidos alerta, sin embargo, que es muy dif¨ªcil hacer un seguimiento del n¨²mero real de personas afectadas. Al igual que ocurre con la cifra de fallecidos, situada ahora en m¨¢s de 700, se teme que son muchas m¨¢s de las que se han podido documentar. Campa?as de la sociedad civil como esta tienen adem¨¢s recursos y capacidades limitadas, pero est¨¢n siendo sobre todo este tipo de iniciativas las que est¨¢n cubriendo el vac¨ªo de las agencias estatales.
En el caso de los desaparecidos, un medio clave para organizarse est¨¢n siendo las redes sociales, a las que familias y amigos est¨¢n recurriendo para compartir informaci¨®n sobre sus seres queridos en un intento de encontrarlos con la ayuda de otros usuarios. El n¨²mero de casos empieza a ser tan elevado que el Comit¨¦ Internacional de la Cruz Roja tambi¨¦n ha decidido facilitar un n¨²mero de tel¨¦fono para poder buscar ayuda.
Las Fuerzas de Apoyo R¨¢pido tienen una cadena de mando intencionadamente d¨¦bil, operan con gran autonom¨ªa, est¨¢n muy curtidas en batallas urbanas y tienen un dilatado historial de violaciones de derechos humanos. En las ¨²ltimas semanas est¨¢n trascendiendo tambi¨¦n m¨²ltiples noticias y relatos sobre sus asaltos a domicilios y arrestos selectivos.
Un antiguo miembro del partido del r¨¦gimen islamista del exdictador Omar Al Bashir, depuesto en 2019 y con el que los paramilitares est¨¢n abiertamente enfrentados, relat¨® en su perfil de Facebook el domingo que fue detenido y torturado a mediados de mayo y que fue retenido en un centro de detenci¨®n secreto de las Fuerzas de Apoyo R¨¢pido con entre 200 y 300 personas m¨¢s. Aunque el ej¨¦rcito est¨¢ menos presente en la capital, tambi¨¦n ha habido informes sobre detenciones de civiles por su parte desde el inicio de la guerra.
Adem¨¢s de los que desaparecen en centros y campos de detenci¨®n, hay muchos que han muerto sin que se puedan llegarse a recuperar o identificar sus cuerpos. En este sentido, organizaciones como la Iniciativa de los Desaparecidos y la Media Luna Roja sudanesa han informado sobre un gran n¨²mero de cad¨¢veres sin identificar en las calles de Jartum, en los hospitales que todav¨ªa operan, en morgues y en fosas donde han sido enterrados.
Aunque la cifra de desaparecidos se ha acelerado r¨¢pidamente desde el estallido de los combates en abril, la sociedad civil sudanesa lleva a?os lidiando con esta crisis. Durante el desalojo violento de una acampada levantada en Jartum en junio de 2019 para reclamar un Gobierno civil despu¨¦s de que las dos partes ahora enfrentadas tomaran el poder en el pa¨ªs, decenas de personas desaparecieron y su suerte nunca ha sido aclarada. Asimismo, despu¨¦s del golpe de Estado que el ej¨¦rcito y los paramilitares ejecutaron conjuntamente a finales de 2021 para poner fin a una transici¨®n democr¨¢tica iniciada dos a?os antes se documentaron numerosos desaparecidos, sobre todo despu¨¦s de celebrarse protestas.
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