Donald Trump se declara inocente de los 37 cargos por los papeles de Mar-a-Lago
El expresidente, acusado de siete delitos federales, ha comparecido ante un juez de Miami entre enorme expectaci¨®n y arropado por centenares de simpatizantes
El imprevisible Donald Trump cumpli¨® el guion este martes en Miami. Era una jornada hist¨®rica. Otra. Se present¨® ante el juez federal John Goodman en el palacio de justicia del centro de la ciudad. Escuch¨® con los brazos cruzados sobre la mesa los 37 cargos de los que se le acusa por su gesti¨®n de los papeles de Mar-a-Lago. Y, en torno a las 15:05, se declar¨® a trav¨¦s de su abogado inocente (¡±not guilty¡±, no culpable en la jerga procesal estadounidense) de los siete delitos federales que se le imputan y que, aunque es altamente improbable, podr¨ªan llegar a sumar penas de hasta 400 a?os. Es el primer presidente estadounidense, en activo o retirado, que es acusado por un delito federal y la segunda vez en unos pocos meses que su presencia es requerida ante la justicia.
Una caravana de veh¨ªculos negros blindados cubri¨® los 18 kil¨®metros que separan el tribunal del resort con campo de golf de su propiedad en la cercana localidad de Doral en la que pas¨® la noche. Lleg¨® a eso de las 13:50, hora local, a su cita con la justicia, con 70 minutos de adelanto.
Jaleado por decenas de sus simpatizantes que hab¨ªan apostado a que har¨ªa su entrada por la puerta sur, Trump ingres¨® en un garaje subterr¨¢neo, desde donde subi¨® a la decimotercera planta. All¨ª lo esperaba el juez, que hab¨ªa denegado el d¨ªa anterior el permiso de grabar o tomar fotograf¨ªas del proceso. Unos 20 elegidos pudieron acceder a la sala. Otros 350, en su mayor parte periodistas, siguieron los acontedimiento por unas televisiones en un espacio del quinto piso.
A los pocos minutos, y como parte de un procedimiento rutinario, ya estaba detenido. Otra vez. Le tomaron las huellas digitales, pero no la cl¨¢sica fotograf¨ªa de los reos. Colocados en una balanza la posibilidad de que esa imagen se filtre y se convierta en un icono para quienes creen que todo esto obedece a una persecuci¨®n pol¨ªtica y la necesidad real de tomar una imagen nueva de una de las personas m¨¢s retratadas del mundo, el Departamento de Justicia prefiri¨® evitar el riesgo.
Un gran jurado deber¨¢ decidir ahora si es culpable de retener intencionadamente informaci¨®n sensible para la defensa nacional, de guardarse y ocultar papeles confidenciales a los investigadores federales y de falsedad, as¨ª como de conspiraci¨®n para obstruir a la justicia con uno de sus empleados, Walt Nauta, que tambi¨¦n estaba citado este martes y fue detenido poco despu¨¦s que el jefe.
Ambos hab¨ªan cenado juntos el lunes. Ante el juez, Nauta pidi¨® y obtuvo un aplazamiento de dos semanas antes de declararse culpable o no. Goodman les impuso la prohibici¨®n de hablar entre ellos si no es con la mediaci¨®n de un abogado. Parece dif¨ªcil: Nauta es tal vez el asistente m¨¢s leal de Trump y uno de sus m¨¢s estrechos colaboradores. Adem¨¢s de eso, el magnate se fue sin m¨¢s medidas cautelares; puede, por ejemplo, viajar al extranjero porque, insistieron sus abogados, no hay riesgo de fuga.
No est¨¢n claros los pr¨®ximos pasos del procedimiento, que podr¨ªa alargarse durante m¨¢s de un a?o, m¨¢s all¨¢ de que, tras este tr¨¢mite a cargo de Goodman, el asunto pasa a manos de la jueza encargada de dirigir los trabajos del gran jurado, que examinar¨¢ las pruebas y emitir¨¢ un veredicto. Se llama Aileen Cannon y tambi¨¦n ser¨¢ la que determine la pena, en caso de que sea hallado culpable. La nombr¨® el propio Trump en 2020 y es una vieja conocida del caso. El pasado oto?o tom¨® una decisi¨®n favorable a las aspiraciones de la defensa del magnate, que fue despu¨¦s revisada y anulada por un tribunal de apelaciones.
Parece claro que los letrados del expresidente tratar¨¢n de entorpecer el proceso alegando que desclasific¨® los documentos antes de dejar la Casa Blanca, o que algunas de las pruebas aportadas en un duro y pormenorizado pliego de cargos de 49 p¨¢ginas hecho p¨²blico el pasado viernes violan la protecci¨®n del secreto entre la relaci¨®n abogado-cliente.
En ese documento se detallan, a partir de interrogatorios, conversaciones transcritas, mensajes entre empleados o grabaciones de seguridad, la vida en Mar-a-Lago y las idas y venidas de un centenar de cajas con unos 13.000 documentos, 300 de ellos clasificados, que se llev¨® Trump de la Casa Blanca, pese a que pertenecen por ley a los Archivos Nacionales. Estuvieron en su residencia en Palm Beach hasta el registro efectuado por el FBI el 8 de agosto de 2022, despu¨¦s de que el expresidente se negara repetidamente a devolverlas a las autoridades.
?Un juicio r¨¢pido?
El siguiente acto del ¨²ltimo frente judicial que se abre ante el expresidente, el ¨²nico en la historia que se ha enfrentado a dos impeachments (juicios pol¨ªticos) mientras estaba en el cargo, ser¨¢ en unos meses, a¨²n no est¨¢ claro cu¨¢ntos. El fiscal especial Jack Smith, encargado de la investigaci¨®n por el Departamento de Justicia, prometi¨® la semana pasada un ¡°juicio r¨¢pido¡±, pero todo indica que el proceso se dilatar¨¢ hasta meterse de lleno en la campa?a presidencial de 2024. Smith vol¨® a Miami el lunes por la noche y estaba presente en la sala.
Tump ha confirmado que no piensa apearse de sus aspiraciones presidenciales. La ley estadounidense le permite presentarse por tercera vez a la Casa Blanca aunque est¨¦ imputado. Domina con holgura las encuestas de votantes republicanos para lograr la designaci¨®n de su partido, as¨ª que no cabe descartar que su campa?a se convierta en un circo de dos pistas: del mitin al juzgado.
No es el ¨²nico caso que tiene abierto. Adem¨¢s de otras investigaciones que a¨²n deben materializarse sobre su presunta implicaci¨®n en el ataque al Capitolio o por supuestamente haber influido para alterar los resultados de las elecciones de 2020, que a¨²n se niega a reconocer que perdi¨® ante Joe Biden, Trump ya tuvo que escuchar el detalle de un pliego de cargos el pasado abril en Nueva York. Fue por el supuesto pago en negro durante las elecciones de 2016, que lo llevaron a la Casa Blanca, a la actriz porno Stormy Daniels para acallar una relaci¨®n extramatrimonial. Est¨¢ citado ante el juez de Manhattan de nuevo para el inicio del juicio el 25 de marzo de 2024.
El ambiente en las inmediaciones del tribunal federal de Miami se fue animando durante la ma?ana, tras varios d¨ªas en los que los alrededores solo estuvieron tomados por una legi¨®n de periodistas llegados de todo el mundo para cubrir una imputaci¨®n hist¨®rica. La ciudad se prepar¨® para lo peor (el alcalde de Miami, el republicano Francis Su¨¢rez, dijo que estar¨ªan listos para manejar una masa de simpatizantes de hasta 50.000 personas), pero no hubo para tanto. En torno a medio millar de trumpistas se dejaron caer por el centro de la ciudad este martes, que convirtieron la zona en un verdadero circo.
Superaron en n¨²mero, con mucho, a los detractores del expresidente. La din¨¢mica record¨® al espect¨¢culo que acogieron las calles de Nueva York en abril. Trump amenaz¨® entonces con que su citaci¨®n traer¨ªa ecos del funesto 6 de enero de 2021, d¨ªa del ataque al Capitolio por una turba de sus fan¨¢ticos, pero las concentraciones fueron mayoritariamente pac¨ªficas y la participaci¨®n, escasa. Este martes, armados con meg¨¢fonos, tel¨¦fonos m¨®viles en ristre para grabarlo todo y vestidos con extravagantes disfraces, sus ac¨®litos buscaron desde primera hora de la ma?ana la atenci¨®n de los reporteros para diseminar sus mensajes extremistas. Pareci¨® m¨¢s un carnaval que una revuelta.
Lo recibieron y lo despidieron con fervor casi religioso. Poco antes de las 16:00, el expresidente sali¨® del tribunal rumbo al restaurante Versailles, hist¨®rico punto de encuentro de la comunidad cubana en Miami en un gesto que fue interpretado como un cortejo de los votantes latinos de Florida.
Una vez all¨ª, prometi¨® ¡°comida para todos¡±, promesa que no se materializ¨®, tampoco para s¨ª mismo: no prob¨® bocado, pero s¨ª escuch¨® los rezos de los presentes. Algo m¨¢s de una hora despu¨¦s abord¨® de nuevo su avi¨®n privado rumbo a Nueva Jersey, donde ha pasado los ¨²ltimos d¨ªas en otra de sus suntuosas residencias con campo de golf. A las 20.15 (hora local) ten¨ªa previsto convertir un acto privado ¡°a la luz de las velas¡± que ten¨ªa programado con donantes (a 10.000 d¨®lares por cabeza) en una comparecencia ante la prensa para reaccionar a las ¨²ltimas noticias judiciales.
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