T¨²nez expulsa al desierto a decenas de subsaharianos tras un estallido de violencia racial

La presi¨®n contenida en Sfax, epicentro de la migraci¨®n irregular en el Mediterr¨¢neo central, 270 kil¨®metros al sur de la capital de T¨²nez, ha estallado con ecos de persecuci¨®n contra miles de subsaharianos. Decenas de migrantes de ?frica occidental han sido expulsados por las autoridades de la ciudad portuaria hacia una zona des¨¦rtica en la frontera con Libia tras la ola de violencia en la que muri¨® apu?alado el lunes un ciudadano tunecino, seg¨²n informaron ONG locales de defensa de los derechos humanos en la noche del mi¨¦rcoles. Muchos de los m¨¢s de 10.000 subsaharianos que aguardan en Sfax a embarcarse en una patera rumbo a las costas italianas se han reagrupado en la estaci¨®n ferroviaria para intentar escapar de una ciudad tomada por las fuerzas de seguridad, en medio del creciente clima de acoso a los negros africanos.

La ONG Foro Tunecino para los Derechos Econ¨®micos y Sociales (FTDES) y otras dos decenas de organizaciones que siguen de cerca las cuestiones migratorias han denunciado que un centenar de migrantes y refugiados de Costa de Marfil, Camer¨²n, Mal¨ª, Chad y Guinea-Conakry, entre los que figuran mujeres y menores, fueron expulsados el mi¨¦rcoles hacia Ben Gardane, en un ¨¢rea des¨¦rtica fronteriza con Libia. Los desplazados, que fueron concentrados antes por la polic¨ªa en el recinto ferial de Sfax, han denunciado haber sufrido malos tratos, robo de dinero y la destrucci¨®n de sus tel¨¦fonos m¨®viles. Otros 50 subsaharianos ya fueron trasladados durante el fin de semana a la misma zona.

Centenares de habitantes de la ciudad costera se han organizado para vigilar sus barrios y exigir la salida inmediata de los migrantes irregulares, en protesta por la muerte de un tunecino de 41 a?os, acuchillado en un enfrentamiento con subsaharianos, seg¨²n informa France Presse. Las patrullas vecinales han montado barricadas y quemado neum¨¢ticos para cerrar los accesos a sus distritos. Las redes sociales tambi¨¦n se han inflamado con im¨¢genes, cuya veracidad no ha podido ser contrastada de forma independiente, de redadas policiales para expulsar a migrantes de sus casas entre aplausos de los vecinos. Otras grabaciones muestran a subsaharianos tendidos en el suelo rodeados de personas armadas con palos, o dan cuenta del ingreso en hospitales de decenas de negros africanos heridos.

La tensi¨®n entre los habitantes de Sfax y los migrantes subsaharianos ya emergi¨® el pasado mes de mayo, cuando muri¨® en un hospital un hombre originario de Ben¨ªn tras haber sido apu?alado por siete tunecinos. Himma Hamad, responsable de inmigraci¨®n en la secci¨®n de Sfax de la Liga Tunecina de los Derechos Humanos, aseguraba entonces a EL PA?S que hab¨ªa recogido decenas de denuncias de agresiones a migrantes subsaharianos tras el discurso ¡°de tinte xen¨®fobo¡± pronunciado el pasado febrero por el presidente de T¨²nez, Kais Said, que gobierna por decreto tras disolver el Parlamento hace dos a?os. Said calific¨® la presencia de decenas de miles de subsaharianos (entre 20.000 y 40.000, seg¨²n las fuentes) entre los 11 millones de habitantes del pa¨ªs como ¡°hordas que suponen una amenaza demogr¨¢fica para la identidad ¨¢rabe de T¨²nez¡±.

El mandatario volvi¨® a insistir el martes en que T¨²nez ¡°no va a aceptar en su territorio a quien no respete la ley¡± y que caer¨¢ tambi¨¦n todo el peso de la justicia sobre quienes ¡°alojen migrantes ilegales en sus casas, se las alquilen o les ofrezcan trabajo¡±. La Liga Tunecina de los Derechos Humanos se?ala que adem¨¢s de sufrir acoso social y explotaci¨®n laboral, con sueldos dos tercios inferiores a los que perciben los tunecinos, los subsaharianos de Sfax viven constantemente bajo la amenaza de ser expulsados de sus viviendas.

El presidente Said tambi¨¦n advirti¨® de que T¨²nez rechaza convertirse ¡°en un pa¨ªs de tr¨¢nsito hacia Europa o de reasentamiento de ciudadanos de algunos pa¨ªses africanos¡±. El mes pasado, la Uni¨®n Europea ofreci¨® al pa¨ªs una aportaci¨®n de m¨¢s de 1.000 millones de euros en ayudas para que contenga la avalancha de pateras desde sus costas hacia Italia. La presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen; la primera ministra Italiana, Giorgia Meloni, y el jefe del Gobierno de Pa¨ªses Bajos, Mark Rutte, viajaron hasta la capital tunecina con la promesa de contribuir a que el pa¨ªs magreb¨ª pueda abordar las reformas que le exige el Fondo Monetario Internacional a cambio de un plan de rescate financiero que implica un alto coste social y de empleo.

Ante la llegada masiva de migrantes en embarcaciones improvisadas desde T¨²nez a las costas italianas, en particular hasta la isla de Lampedusa, la UE ha puesto sobre la mesa un paquete de 105 millones de euros ¡ªel triple de la financiaci¨®n anual de los ¨²ltimos dos a?os¡ª para programas de control de fronteras, registros y devoluciones de inmigrantes irregulares. El sindicato Uni¨®n General de Trabajadores Tunecinos (UGTT), la mayor organizaci¨®n del pa¨ªs magreb¨ª, ha responsabilizado al presidente tunecino de haber agravado la situaci¨®n migratoria al aceptar convertirse ¡°en gendarme del Mediterr¨¢neo¡± e interceptar sistem¨¢ticamente las embarcaciones de inmigrantes irregulares y conducirlas hasta el puerto de Sfax.

En los cuatro primeros meses de 2023 se registraron cerca de 19.000 interceptaciones de migrantes en la ruta hacia Italia, lo que representaba ya el 82% de todas las contabilizadas en 2022. Ante el bloqueo en las costas marroqu¨ªes, argelinas y libias, T¨²nez es ahora la principal v¨¢lvula de escape de la presi¨®n migratoria africana a trav¨¦s del Mediterr¨¢neo hacia Europa. En los 100 kil¨®metros de litoral comprendidos entre Sfax y Mahdia (al norte), se concentran casi el 75% de las salidas de pateras desde T¨²nez. Situada a menos de 200 kil¨®metros de Sfax, a media jornada de navegaci¨®n con un peque?o motor fuera borda, la isla italiana de Lampedusa es la puerta de entrada a Europa para los miles de subsaharianos llegados hasta el litoral de T¨²nez.

Sigue toda la informaci¨®n internacional en Facebook y Twitter, o en nuestra newsletter semanal.