Liderazgos fuertes y simpat¨ªas prorrusas: el extremismo se extiende entre los j¨®venes de Europa Central y del Este
Varios estudios concluyen que el nacionalismo crece entre los ¡®millennials¡¯ y la generaci¨®n Z de pa¨ªses como Bulgaria, Hungr¨ªa o Rumania, que muestran un creciente desapego hacia la UE
Las ideas extremistas se extienden con rapidez entre los j¨®venes de Europa Central y del Este. Varios estudios muestran el ¨ªmpetu de las ideolog¨ªas favorables a un liderazgo autocr¨¢tico o que cuestionan la utilidad de la democracia. Rumena Filipova, directora de la organizaci¨®n independiente Institute for Global Analytics (IGA), subraya que los millennials y la generaci¨®n Z ¡°est¨¢n pol¨ªticamente alineados, inclinados a un liderazgo autocr¨¢tico y susceptibles a la desinformaci¨®n prorrusa¡±. ¡°Contrariamente a las expectativas de que los j¨®venes tengan m¨¢s visi¨®n de futuro que sus progenitores, la evidencia muestra que el colectivo juvenil no siente un mayor afecto por la democracia, la tolerancia social o las actitudes proccidentales que el resto de la sociedad¡±, asegura esta experta b¨²lgara que acaba de publicar un art¨ªculo sobre este tema en el Centro de An¨¢lisis de Pol¨ªticas Europeas (CEPA).
Los escasos avances democr¨¢ticos despu¨¦s de m¨¢s de tres d¨¦cadas desde la ca¨ªda de las dictaduras comunistas han provocado un may¨²sculo desencanto entre los j¨®venes de Europa Central y del Este. ¡°Se sienten excluidos de los procesos pol¨ªticos y de los beneficios econ¨®micos, lo que les hace estar menos satisfechos con la democracia¡±, explica Filipova. Prueba de ello es el alto absentismo en las elecciones de estos pa¨ªses.
Seg¨²n una encuesta realizada por el think tank GLOBSEC, con sede en Bratislava, m¨¢s de la mitad de los b¨²lgaros de entre 18 y 24 a?os preferir¨ªa un l¨ªder fuerte para no tener que preocuparse de los vaivenes del Parlamento. El sondeo tambi¨¦n resalta que los sentimientos nacionalistas ganan terreno en Bulgaria: solo el 32% de los j¨®venes en el rango de edad mencionado percibe a la extrema derecha como una amenaza; porcentaje que sube al 37% en la franja de 25 a 34 a?os.
Disminuye, en cambio, el apego a las instituciones internacionales, sobre todo a la UE. Un abrumador 71% de los menores de 35 a?os cree que Bruselas ¡°dicta a Bulgaria¡± lo que tiene que hacer. Adem¨¢s, los j¨®venes se muestran ambiguos en su condena de la invasi¨®n rusa de Ucrania: casi el 40% culpa al pa¨ªs invadido de incitar a la guerra. ¡°El sistema educativo tiene parte de su responsabilidad. En Bulgaria a¨²n se transmiten los estereotipos que presentan a Rusia favorablemente¡±, remarca Filipova.
Un panorama similar se repite en otros pa¨ªses de la regi¨®n. La abstenci¨®n y las inclinaciones nacionalistas-autoritarias se extienden entre las nuevas generaciones. De acuerdo con el Instituto Nacional Dem¨®crata, radicado en Washington, menos de un tercio de los j¨®venes de la Rep¨²blica Checa, Hungr¨ªa y Polonia expresan satisfacci¨®n con la actual situaci¨®n pol¨ªtica de sus pa¨ªses.
En Hungr¨ªa, por ejemplo, la apuesta por los influencers del primer ministro, el ultraconservador Viktor Orb¨¢n, ha fomentado un entorno sociopol¨ªtico que favorece las posiciones tradicionalistas y prorrusas. Incluso si los j¨®venes h¨²ngaros no votan por el partido gobernante Fidesz, las encuestas entre los menores de 30 a?os muestran que es m¨¢s probable que se alineen con fuerzas de oposici¨®n de extrema derecha como Nuestra Patria. Seg¨²n un sondeo elaborado por Medi¨¢n hace poco m¨¢s de un a?o, la facci¨®n de ultraderecha es la m¨¢s popular entre los j¨®venes. ¡°Las autoridades h¨²ngaras tambi¨¦n aumentaron el control sobre la educaci¨®n¡±, apunta Filipova.
En la misma l¨ªnea est¨¢ la vecina Rumania, que acaba de ingresar parcialmente en el espacio Schengen junto a Bulgaria: ambos pa¨ªses han levantado los controles en las fronteras a¨¦reas y mar¨ªtimas, pero mantienen las terrestres. Una encuesta realizada en marzo por la empresa IRES desvela que la Alianza para la Uni¨®n de Rumanos (AUR, que significa oro en rumano) es el predilecto entre los menores de 35 a?os. ¡°Los j¨®venes desconf¨ªan de la democracia y las instituciones, sobre todo del Gobierno y el Parlamento debido a que la corrupci¨®n end¨¦mica ha hecho que sean susceptibles a la propaganda ultraderechista¡±, se?ala Madalina Voinea, analista del think tank Expert Forum. Tambi¨¦n achaca este alejamiento a la inacci¨®n de los partidos tradicionales. El auge de las ideas antidemocr¨¢ticas se explica tambi¨¦n por la actividad de los pol¨ªticos radicales en las redes sociales, sobre todo TikTok, la plataforma que m¨¢s crece en la regi¨®n.
Seg¨²n Daniel David, rector de la Universidad Babes-Bolyai de Cluj-Napoca, la mayor de Rumania, la mitad de los j¨®venes de su pa¨ªs que se decantan por formaciones de extrema derecha tiene estudios medios y un 22% b¨¢sicos. ¡°Que un partido con un discurso m¨¢s soberanista capte este tipo de j¨®venes no es una sorpresa¡±, asegura este soci¨®logo, que opina que su frustraci¨®n radica en las actuales instituciones democr¨¢ticas.
En Serbia, las nuevas generaciones no se desv¨ªan significativamente de sus mayores en cuanto a nacionalismo o autoritarismo. Una encuesta desvel¨® que solo el 36% de los j¨®venes serbios tiene una actitud positiva hacia la democracia, mientras que el 40% prefiere que su pa¨ªs mantenga una pol¨ªtica exterior ¡°equilibrada¡± entre Oriente y Occidente. Solo el 13% quiere alinearse con la UE y la OTAN. ¡°Para la generaci¨®n Z, la adhesi¨®n a la OTAN y a la UE de los pa¨ªses de la Europa del Este y Central en la d¨¦cada de los 2000 ocurri¨® hace mucho tiempo, no tiene la memoria tan v¨ªvida como la de los millennials, de modo que est¨¢ m¨¢s abierta a las diatribas lanzadas por los nacionalistas¡±, recalca Filipova.
Las percepciones de exclusi¨®n pol¨ªtica y econ¨®mica, alimentadas por la desigualdad, la disminuci¨®n de las oportunidades y la limitada consideraci¨®n de las preocupaciones de los j¨®venes por parte de los gobiernos han azuzado la desafecci¨®n. ¡°Las fuerzas pol¨ªticas democr¨¢ticas deber¨ªan idear pol¨ªticas que tengan en cuenta a los j¨®venes y promover su inclusi¨®n en el proceso pol¨ªtico para que se perciban a s¨ª mismos como un electorado clave, en lugar de una ocurrencia tard¨ªa en la renovaci¨®n democr¨¢tica¡±, zanja la experta.
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