Los pesos pesados de la Comisi¨®n Europea afrontan su gran prueba ante la Euroc¨¢mara

El Parlamento Europeo afronta hoy su propio supermartes. Justo una semana despu¨¦s de las elecciones estadounidenses que, con la victoria del republicano Donald Trump, han confirmado los peores temores de la UE, los seis candidatos a vicepresidentes de la pr¨®xima Comisi¨®n Europea, entre ellos la espa?ola Teresa Ribera, se enfrentan a su examen ante los eurodiputados en una sesi¨®n maratoniana que durar¨¢ todo el d¨ªa.

Los dem¨¢s comisarios, excepto el h¨²ngaro Oliver Varhelyi, ya lograron el pl¨¢cet la semana pasada con una facilidad enga?osa. De cara al supermartes europeo, los grupos pol¨ªticos han estado negociando de nuevo intensamente y hasta el ¨²ltimo momento para que nada descarrile en esta ¨²ltima curva. ¡°Nadie quiere una crisis¡±, apuntaba un diputado por los pasillos del Parlamento este lunes, apostillando que, en cualquier caso, no ser¨¢ f¨¢cil evitarla. Quien menos quiere esa crisis es la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, que tiene prisa por poner en marcha su nuevo Ejecutivo ¡°cuanto antes¡±, ha presionado este mismo lunes su portavoz. No solo est¨¢ el cambio de guardia en la Casa Blanca en enero: hay dos guerras a las puertas de la UE y sus dos grandes Estados ¨DFrancia y Alemania¨D no salen de la inestabilidad pol¨ªtica.

Se examinan seis pesos pesados del Ejecutivo: el italiano Raffaele Fitto, designado para hacerse cargo de los Fondos de Cohesi¨®n; la estonia Kaja Kallas, alta representante para la Pol¨ªtica Exterior; Stephane S¨¦journ¨¦, aspirante a regir la pol¨ªtica de industria; la rumana Roxana Minzatu, en Empleo; la finlandesa Henna Virkunen, titular de las pol¨ªticas tecnol¨®gicas y seguridad; y la vicepresidenta tercera del Gobierno espa?ol, Teresa Ribera, que se har¨ªa cargo de Competencia. Pero las miradas se centran, sobre todo, en dos integrantes de este sexteto: Ribera, a quien los populares espa?oles ¨Dque ya votaron en su contra en la primera parte del proceso, el an¨¢lisis del conflicto de intereses¨D prometen un duro cuestionamiento de su respuesta ante la dana en Valencia, y en el ultraconservador Fitto.

La designaci¨®n del ministro para Asuntos Europeos italiano como vicepresidente de la Comisi¨®n ha provocado ampollas en familias como los liberales de Renew ¡ªque recuerdan una y otra vez que Von der Leyen les prometi¨® expl¨ªcitamente que no elevar¨ªa a ese alto rango al candidato de la italiana Giorgia Meloni¡ª, los socialdem¨®cratas de S&D o los Verdes. Estos subrayan que en julio apoyaron la candidatura de la alemana, algo que no hizo ECR, la familia pol¨ªtica de Meloni, a quien la alemana ha premiado pese a ello con una vicepresidencia, lamentan.

Fitto ser¨¢ el primero en someterse a las preguntas de los eurodiputados este martes y Ribera (la primera espada de los socialdem¨®cratas) la ¨²ltima, en un calendario muy criticado por las fuerzas de centro e izquierda. El orden del d¨ªa fue aprobado gracias a una alianza del Partido Popular Europeo (PPE) con los grupos de extrema derecha como estrategia para asegurarse de que sus candidatos no se ca¨ªan durante el proceso de audiencias, especialmente el italiano. Esto demuestra que es el PPE el que tiene la manija para configurar mayor¨ªas pactando a su izquierda o su derecha y que si los candidatos se acaban sometiendo a la votaci¨®n de los eurodiputados de las diferentes comisiones (algo que hasta ahora no ha pasado porque se ha dado el visto bueno a los ya ratificados por asentimiento de dos tercios de los portavoces de cada grupo parlamentario), la espa?ola queda en manos de los populares.

Para evitar un bloqueo pol¨ªtico, lo que retrasar¨ªa la puesta en marcha de la Comisi¨®n, Von der Leyen se est¨¢ empleando a fondo. Ha cancelado su asistencia a la COP29 en Bak¨² (Azerbaiy¨¢n), por el proceso en marcha en Bruselas, al que le ¡°presta toda su atenci¨®n¡±. Algo que qued¨® evidente ya la semana pasada: la aparente facilidad con que fueron aprobados la mayor parte de los candidatos, incluso los considerados m¨¢s fr¨¢giles, como el malt¨¦s Glenn Micallef (debido precisamente a ese calendario fijado por derecha y ultraderecha), estuvo a punto de quebrarse el pasado martes.

Ese d¨ªa comparecieron ante sus se?or¨ªas de la Euroc¨¢mara las comisarias designadas de Medio Ambiente, la conservadora sueca Jessika Roswall, y de Gesti¨®n de Crisis, la liberal belga Hadja Lahbib, cuyas audiencias fueron flojas, coinciden analistas. Para evitar su rechazo, que habr¨ªa provocado un bloqueo y retrasado indefectiblemente el arranque de la nueva Comisi¨®n, Von der Leyen dio un golpe de mano: el mi¨¦rcoles, justo cuando se conoc¨ªa la victoria de Trump y el h¨²ngaro Varhelyi se aprestaba a presentarse a su vez ante los eurodiputados, la alemana reuni¨® a los presidentes de los grupos que forman la coalici¨®n hist¨®rica que ha regido la UE: el conservador Manfred Weber, la socialdem¨®crata Iratxe Garc¨ªa y la liberal Val¨¦rie Hayer, que acabaron dando el visto bueno a las dos candidatas. En el paquete tambi¨¦n se negoci¨® que el h¨²ngaro, que tampoco convenci¨® a la mayor¨ªa de grupos, enviara una nueva tanda de respuestas a preguntas por escrito en lugar de someterse a una nueva comparecencia.

Y esa estrategia del ¡°paquete¡± de comisarios aprobados ensayada la semana pasada ¡ªal estilo de todos a una, o ninguno¡ª es la que tambi¨¦n se perfila como el plan a seguir de cara a este supermartes, coinciden la mayor parte de los grupos. Si bien las cosas no ser¨¢n f¨¢ciles. Por si hiciera falta alguna prueba m¨¢s, pocos cuentan con que el proceso sea r¨¢pido. ¡°Hay demasiadas preguntas abiertas como para tener fumata blanca¡±, reconoc¨ªa este lunes un parlamentario, que aplazaba el anuncio sobre los vicepresidentes al mi¨¦rcoles o incluso al jueves. En ese nuevo gran paquete entrar¨ªa tambi¨¦n la decisi¨®n final sobre Varhelyi, cuyo nombramiento, que se debati¨® este lunes, ha sido retrasado al menos al mi¨¦rcoles.

Los liberales, pragm¨¢ticos (al fin y al cabo este martes se juegan dos vicepresidencias), se muestran dispuestos a acabar aprobando al italiano en un nuevo paquete. Pero a los socialistas no les gusta, de partida, vincular el examen de Ribera con el de Fitto: ¡°No pueden estar conectados. El acuerdo del PPE, en todo momento, desde el principio de la legislatura, ha sido con las fuerzas proeuropeas, con socialdem¨®cratas y liberales; lo que no es aceptable es que est¨¦n poniendo ahora mismo a un mismo nivel a Fitto con Ribera¡±, ha lamentado la presidenta del grupo socialista, la espa?ola Iratxe Garc¨ªa, antes de comenzar una reuni¨®n del grupo en unas declaraciones que recuerdan a las que ya se escucharon cuando los conservadores se aliaron para imponer un calendario que sit¨²a al italiano con ventaja.

A ¨²ltima hora de la tarde, analizadas las estrategias a seguir este martes, los socialistas se han marchado serios y sin hacer declaraciones, aunque con la premisa de que sin Ribera, Von der Leyen no podr¨¢ arrancar su nuevo equipo tan r¨¢pido como quiere.