EE UU y Rusia sacan adelante la primera resoluci¨®n sobre Ucrania del Consejo de Seguridad de la ONU en tres a?os de guerra

Por primera vez en lo que va de guerra, el Consejo de Seguridad, m¨¢ximo ¨®rgano ejecutivo de la ONU, ha aprobado una resoluci¨®n sobre la guerra de Ucrania. Presentada por EE UU, la resoluci¨®n ha salido adelante, con diez votos favorables y cinco abstenciones, las de los miembros europeos del Consejo (Reino Unido, Francia, Dinamarca, Grecia y Eslovenia), gracias a una conjunci¨®n de intereses in¨¦dita hasta que Donald Trump regres¨® a la Casa Blanca: los de EE UU y Rusia, secundados por China, que han votado juntos por primera vez en d¨¦cadas. Un extra?o resultado, inconcebible hace s¨®lo unos meses ...

Por primera vez en lo que va de guerra, el Consejo de Seguridad, m¨¢ximo ¨®rgano ejecutivo de la ONU, ha aprobado una resoluci¨®n sobre la guerra de Ucrania. Presentada por EE UU, la resoluci¨®n ha salido adelante, con diez votos favorables y cinco abstenciones, las de los miembros europeos del Consejo (Reino Unido, Francia, Dinamarca, Grecia y Eslovenia), gracias a una conjunci¨®n de intereses in¨¦dita hasta que Donald Trump regres¨® a la Casa Blanca: los de EE UU y Rusia, secundados por China, que han votado juntos por primera vez en d¨¦cadas. Un extra?o resultado, inconcebible hace s¨®lo unos meses ¡ªbajo la presidencia del dem¨®crata Joe Biden¡ª y que confirma el giro copernicano en el escenario global: Washington y Mosc¨², intentando sacar adelante su plan de paz para Ucrania, pero sin Ucrania y sin la UE. La abstenci¨®n de los miembros europeos dice mucho, pero no lo hace en voz alta: un solo veto, de Francia o de Reino Unido, la habr¨ªa hecho descarrilar.

La resoluci¨®n adoptada por el Consejo, un sucinto p¨¢rrafo titulado El camino hacia la paz y que pide b¨¢sicamente (¡°implora¡±, para ser m¨¢s precisos) un fin inmediato del conflicto y una paz duradera, es una prolongaci¨®n en may¨²sculas, por el rango del Consejo, de la adoptada en la sesi¨®n matutina por la Asamblea General, donde se aprobaron la propuesta de EE UU y otra resoluci¨®n impulsada por Ucrania y la UE. De distinto signo, incluidas diferencias irreconciliables como denominar ¡°conflicto¡± lo que para Bruselas es una guerra, ambas obtuvieron el mismo refrendo: 93 votos a favor. La diferencia es que las resoluciones del plenario no son vinculantes, y las del Consejo s¨ª: tal vez una futura hoja de ruta para la soluci¨®n negociada que, de espaldas a Kiev y Bruselas, estudian Washington y Mosc¨².

La propuesta aprobada por el Consejo establece una equivalencia entre Ucrania y Rusia: habla del conflicto entre ambos pa¨ªses y no, como pretendieron los cinco miembros europeos, de ¡°agresi¨®n a gran escala de Ucrania por la Federaci¨®n Rusa¡±. El club europeo present¨® una moci¨®n en tal sentido, pero fue rechazada, al igual que el resto de enmiendas planteadas. Adem¨¢s de constatar el divorcio entre EE UU y la UE, la clara divergencia del Reino Unido ante la postura de Washington no se sustanci¨®, finalmente, en el veto que muchos esperaban, suficiente para haber tumbado la resoluci¨®n (¡°No hay equivalencia posible entre Ucrania y Rusia¡±, objet¨® la embajadora brit¨¢nica; ¡°en este conflicto hay un agresor y un agredido¡±, arguy¨® su hom¨®logo franc¨¦s).

Las explicaciones de los pa¨ªses antes de la votaci¨®n tambi¨¦n subrayaron las l¨ªneas divergentes que, con la vuelta de Trump a la Casa Blanca, han emprendido una y otra orilla del Atl¨¢ntico. Pero la postura m¨¢s sorprendente, por fervorosa, casi de converso, fue la confianza y la fe depositadas por EE UU en la ONU para poner fin a lo que insiste, pese a la objeci¨®n europea, en denominar ¡°conflicto¡±. ¡°Generaciones enteras de ucranios y rusos (sic) han muerto en tres a?os de guerra (¡­) El mundo se halla al borde del abismo (¡­) frente a la amenaza nuclear", se?al¨® la representante de EE UU en la ONU.

En un d¨ªa de v¨¦rtigo, de historia y tambi¨¦n de histeria, con m¨²ltiples vericuetos procedimentales, EE UU ha hablado por boca de la ONU y arrinconado a¨²n m¨¢s a Europa en una causa intr¨ªnseca al continente. Por la ma?ana, en una sesi¨®n de la Asamblea General ¡ªel plenario de los 193 Estados miembros¡ª entraron en rumbo de colisi¨®n los dos borradores de resoluci¨®n, uno presentado por Ucrania y la UE que se negociaba desde hac¨ªa un mes, y otro de ¨²ltima hora, presentado el viernes por EE UU. Los dos textos obtuvieron pr¨¢cticamente el mismo resultado ¡ªs¨®lo vari¨® levemente el n¨²mero de noes y de abstenciones¡ª, lo que permite constatar tambi¨¦n un desgarro en la organizaci¨®n.

A favor del texto estadounidense votaron tambi¨¦n juntos los representantes de Washington y Mosc¨², secundado este, como viene siendo habitual en cualquier iniciativa de la ONU, por los representantes de lo que EE UU denominaba hasta hace poco el eje del mal: Bielorrusia, Nicaragua, Sud¨¢n, Corea del Norte y la piedra en el zapato de Hungr¨ªa, entre los 18 votos en contra. Curiosamente, la delegaci¨®n de Estados Unidos se abstuvo de votar su propio texto tras aprobarse tres enmiendas presentadas por la UE.

El acercamiento entre Washington y Mosc¨² para acabar con la guerra de Ucrania, en paralelo al distanciamiento de Kiev y sus aliados europeos por parte de la Administraci¨®n de Donald Trump, ha quedado de manifiesto este lunes en la sesi¨®n monogr¨¢fica que la ONU ha dedicado a conmemorar el tercer aniversario de la invasi¨®n rusa. La jornada, jalonada por discursos incompatibles con una soluci¨®n negociada, como los que pronunciaron por la ma?ana los representantes de Ucrania y Rusia, ha parecido en algunos momentos m¨¢s una huida hacia delante (EE UU ha reiterado que su resoluci¨®n habla al futuro, no al pasado) que un intento de acercar posturas. No, desde luego, las de una y otra orilla del Atl¨¢ntico cada vez m¨¢s lejanas.

Pese a su desd¨¦n del multilateralismo, la Administraci¨®n de Donald Trump utiliza ahora la plataforma global de Naciones Unidas para avanzar en sus intereses, como si la ONU fuese de repente la soluci¨®n a los males del mundo. As¨ª se desprende del comunicado del secretario de Estado, Marco Rubio, titulado La ONU debe actuar para llevar la paz a Europa, y publicado este fin de semana para caldear la sesi¨®n en la ONU.

Rubio subrayaba el car¨¢cter ¡°sencillo e hist¨®rico¡± de la propuesta de resoluci¨®n de Washington, que es ¡°consecuente con la opini¨®n del presidente Trump de que la ONU debe volver a su prop¨®sito fundacional, consagrado en la Carta de las Naciones Unidas, de mantener la paz y la seguridad internacionales, incluso mediante la soluci¨®n pac¨ªfica de controversias¡±. ¡°Instamos a todos los Estados miembros a apoyarla para trazar un camino hacia la paz¡±, subrayaba el comunicado de Rubio. Una declaraci¨®n optimista, si no triunfalista, en la que el titular de Exteriores calificaba de ¡°alcanzable¡± el objetivo de la paz.

Le dio la raz¨®n el embajador ruso ante la ONU, Vasili Nebenzia, que adem¨¢s de atribuir toda la responsabilidad por el conflicto al ¡°golpe interno¡± del Maid¨¢n, la actuaci¨®n de los ¡°esbirros de Hitler¡± ¡ªen alusi¨®n a las autoridades proeuropeas de Kiev¡ª y, en definitiva, el ¡°proyecto antirruso¡± de Kiev ¡°alentado por Europa¡±, tuvo palabras de encomio para la nueva Administraci¨®n republicana. Adem¨¢s de arremeter contra Volod¨ªmir Zelenski, haci¨¦ndose eco de la creciente frustraci¨®n de Donald Trump con el presidente ucranio, Nebenzia alab¨® a ¡°nuestros colegas estadounidenses¡± por ¡°su paso en la direcci¨®n correcta¡±, dijo sobre la resoluci¨®n de EE UU. La llegada de Trump a la presidencia, subray¨® ante la Asamblea, ha marcado un punto de inflexi¨®n. ¡°Trump ha visto por fin la verdadera cara de Zelenski y ha visto que no le interesa la paz, s¨®lo mantenerse en el poder, dispuesto a sacrificar a la poblaci¨®n y todos sus recursos naturales¡±.

La Asamblea General adopt¨® seis resoluciones sobre la guerra durante el primer a?o, denunciando a Mosc¨² y exigiendo al Kremlin la retirada de todas sus tropas. Una resoluci¨®n de octubre de 2022, que condenaba el ¡°intento de anexi¨®n ilegal¡± por parte de Rusia de cuatro regiones de Ucrania, obtuvo el mayor apoyo, con el voto afirmativo de 143 Estados. A diferencia de las del Consejo de Seguridad, las resoluciones de la Asamblea General, donde ning¨²n pa¨ªs tiene derecho de veto, no son vinculantes, pero tienen peso pol¨ªtico y reflejan la opini¨®n mundial sobre la guerra. El resultado de las votaciones de este lunes en la Asamblea arroja un in¨¦dito empate entre dos propuestas que persiguen objetivos bien distintos. El resultado de la aprobada por el Consejo, sin precedentes, puede imprimir un rumbo desconocido al mundo.